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Diciembre 2007

Monográficos Hispagua: Año hidrológico 2006-2007

Ebro

Reservas almacenadas

El año hidrológico se cierra con niveles de agua embalsada ligeramente superiores al anterior (3.240 m3 frente a los 3.029 de septiembre de 2006). Esto implica un crecimiento del 7%, muy similar al experimentado como media en la península. La cantidad de agua embalsada supuso el 43,77% del total de la capacidad en los embalses de la cuenca.

Respecto a la media de los diez últimos años, la cuenca del Ebro sigue estando por debajo, pese al crecimiento del último año. En concreto, la media se sitúa en los 3.482 hm3, es decir, 242 hm3 más que el volumen almacenado a 30 de septiembre de 2007.

No obstante, la propia Confederación Hidrográfica del Ebro advierte de que estas cifras no permiten comparaciones demasiado exactas ya que, a partir del presente año hidrológico, se han incluido embalses que previamente no se recogían en los anteriores informes.

Aún así, sirva esta gráfica para observar la comparativa entre el año hidrológico 2006-2007 y su precedente:

Fuente: Confederación Hidrográfica del Ebro

Como se puede observar, a pesar de que las reservas se mantuvieron finalmente por debajo de la media histórica y de que en el inicio del año hidrológico no mejoró el nivel de los embalses, durante buena parte de este periodo (a partir de la primavera) la reserva hidráulica alcanzó cifras superiores a la media histórica.

Precipitaciones

El año hidrológico en la cuenca del Ebro se inicia con un trimestre seco. Las precipitaciones más copiosas apenas alcanzan el 80% de la media histórica en octubre, que fue el mes más húmedo de los tres. Noviembre y diciembre arrojaron datos más negativos, del 64% y 45% respectivamente.

La situación de relativa sequía se prolongó durante el mes de enero, que a pesar de ser considerado como normal por el Agencia Estatal de Meteorología, registró la mitad de las precipitaciones de las normales. Pero la situación se corrigió de manera drástica en los dos siguiente meses: tanto en febrero como en marzo de 2007 el volumen total de lluvias fue extremadamente alto, duplicando sobradamente las medias históricas. Así, en febrero se registraron 71,7 l/m2 (frente a los 32,6 de la media), mientras que en marzo se alcanzaron los 85,6 l/m2: un 218% más del lo normal.

El tercer trimestre del año hidrológico (abril a junio) comienza con un primer mes que prolonga las abundantes lluvias, similares en proporción a las febrero y marzo. No obsante, tanto en mayo como en junio las precipitaciones se reducen, siendo considerados meses ligeramente secos y normales, respectivamente.

El tramo final del año hidrológico prolonga esta tendencia. Tan solo agosto se acerca a los niveles normales, mientras que en julio y en septiembre las lluvias apenas superaron la mitad de la media histórica.

Más información:

CHE - Confederación Hidrográfica del Ebro

SAIH Ebro - Sistema Automático de Información Hidrológica del Ebro

 

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