Junta de Castilla y Leon and the Government set the challenge of activate 176 treatment plants in five years

Sun, 14/02/2010

El Mundo

Poner en marcha 176 nuevas depuradoras y ampliar y mejorar otras 60 en el plazo de 5 años para que en 2015 se cumpla la directiva europea que exige el buen estado ecológico de los ríos. Este es el reto que plantea el II Plan de Calidad de las Aguas firmado recientemente por la Junta y el Gobierno y que pone sobre la mesa más de 1.055 millones de euros para cumplir los objetivos no alcanzados en el anterior plan (que caducó en 2005). Pese a las exigencias de la UE, no se ha logrado impedir que, a día de hoy, 2.232 núcleos urbanos de la cuenca del Duero, cinco años después, sigan sin depurar adecuadamente sus aguas residuales, según datos de la CHD. El listado completo de las actuaciones que se proponen en este segundo plan, al que ha tenido acceso este periódico, pone de manifiesto el grave problema al que se enfrenta un territorio tan extenso y despoblado como el de Castilla y León: en los últimos años se ha avanzado mucho en la reducción de la carga contaminante, alcanzando casi al 90% de los habitantes hablando en términos de población equivalente, pero aún queda mucho por hacer. 4.900 localidades de menos de 200 habitantes concentran ahora sólo el 20% de la carga contaminante. «No vamos mal, pero nos queda mucho para poder llegar a poca población», reconoce la consejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz, tras dejar atrás tres años de "travesía en el desierto" en la que la Junta, sin la ayuda del Ministerio, ha acometido la construcción de 52 depuradoras con una inversión de 108 millones.
Las actuaciones incluidas en este segundo Plan de Calidad de las Aguas se estructuran en torno a cinco ejes: Obras de interés general (130,6 millones) y actuaciones en zonas sensibles (39,6 millones), que corren por cuenta del Ministerio de Medio Ambiente íntegramente; actuaciones asignadas a las sociedades de aguas (130,6 millones) en las que la Junta participa aportando un 26,14% de los fondos; obras en localidades fuera de la Red Natura 2000 (346,5 millones) que sufraga íntegramente la Junta y, por último, un apartado de actuaciones localizadas en municipios dentro de la Red Natura 2000 (457,7 millones), con un 72,4% de presupuesto regional.
En este primer apartado de obras de interés general, las actuaciones previstas en Soria (nueva depuradora con sistema terciario y emisario en Golmayo) copan 37,6 millones de un presupuesto que también servirá para acometer, en Salamanca y su alfoz, la construcción de emisarios y azudes en Pelabravo, Villagonzalo, Arapiles, Las Torres y Carbajosa con 11,4 millones de euros. Dentro de las actuaciones en zonas sensibles destacan, por su presupuesto, la ampliación de la depuradora y la instalación de filtros terciarios en Venta de Baños (Palencia), con 7 millones, y la ampliación y mejora de las instalaciones de Guijuelo (Salamanca), con 5,1 millones. Otros trabajos importantes serán la instalación del sistema de depuración terciario en la EDAR de Zamora, la conexión con la depuradora de Morales del Vino y otras actuaciones en diversos colectores, que se llevarán casi 10 millones de euros.

Las principales obras a ejecutar se desarrollarán en Burgos y Segovia. En la primera de estas provincias, se ampliarán y mejorarán los emisarios del alfoz para su conexión con la EDAR de Burgos (73 millones). En la segunda, los colectores del alfoz y su conexión con la depuradora de la capital, que también será ampliada y mejorada, con más de 23 millones. Ambas actuaciones correrán por cuenta de la Sociedad estatal Aguas del Duero, mientras que la Sociedad Pública de Medio Ambiente de la Junta llevará a cabo ampliaciones y mejoras en la depuradora de Ávila y los colectores de su alfoz, así como trabajos para garantizar la depuración en León capital y todo su alfoz. Ambas actuaciones superan los 34 millones de inversión. Las localidades de más de 2.000 habitantes que acapararán las principales inversiones en el capítulo de actuaciones fuera de la Red Natura se ejecutarán en Valladolid. En Laguna de Duero se construirá un nuevo colector para conectar con la EDAR de la capital con 12 millones y con otros 10, se garantizará la conexión con la depuradora de la capital de las aguas sucias de La Cistérgina. Las nuevas depuradoras de Cistierna en León (6,8 millones), Cabezón (5,1 millones) y Santovenia (4 millones) en Valladolid y Sanchonuño en Segovia (3 millones) son otras de las principales inversiones.Sin embargo, el mayor número de actuaciones recogidas en el Plan están recogidas en el apartado referido a municipios de entre 500 y 2.000 habitantes fuera de la Red Natura. En este capítulo se contempla la construcción de 139 nuevas depuradoras y la mejora de otras 44, a cargo de la Junta de Castilla y León. En Ávila, las principales inversiones se destinarán a las nuevas depuradoras de Poyales del Hoyo (2,1 millones), Fontiveros (1,2 millones) y La Cañada (0,8 millones), mientras que en Burgos, la nueva EDAR de Caleruega acaparará 0,7 millones.En León, las actuaciones más caras son las de Alija del Infantado (0,9 millones) y Algadefe (0,8 millones), presupuestos algo superiores a los que servirán para ejecutar las nuevas depuradoras más caras de la provincia de Palencia: Villaumbrales y Monzón de Campos (ambas con un presupuesto de 0,7 millones).La localidad de Boada se llevará la inversión más importante prevista en Salamanca (1,4 millones), seguida por Mozarbez (1,1 millones) y Aldeaseca de Armuña (0,8 millones). Las inversiones más potentes en Segovia se ejecutarán en San Martín y Mudrian (0,9 millones), Chañe (0,9 millones) y Valverde del Majano (0,7 millones). La nueva depuradora de San Miguel del Arroyo (1,2 millones) y la de La Parrilla (0,9 millones) serán las inversiones más importantes en Valladolid, mientras que en Zamora serán las de Venialbo (0,8 millones) y Sanzoles (0,7 millones). En Soria la obra contemplada es la de la nueva EDAR de Quintana Redonda (0,4 millones). .

La consejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz, está convencida de que el mayor problema de la Comunidad en cuanto a depuración se refiere (la existencia de miles de núcleos de población con una población insignificante) tendrá solución en el futuro sin necesidad de ejecutar grandes obras.Para ello, recuerda que la Confederación Hidrográfica del Duero ha puesto en marcha en 14 localidades 9 tipos de depuradoras experimentales de bajo coste que impedirán que dejen de funcionar en el futuro por culpa de los elevados costes de mantenimiento. En Ávila se construirá una depuradora en Gilbuena que beneficiará a 200 vecinos; otra en Mironcillo (350); mientras que en Burgos se construirá en Peñaranda de Duero (900); y en Trabajos (800); en León se hará otra en Gradefes (600); y en Gordoncillo (1.000); en Palencia se realizará en Tariego del Cerrato (700); en Salamanca en Monleras (800); en Segovia en Valdeprados (150); y en Torreiglesias (830); en Soria en Langa de Duero (1.400); en Valladolid en Villalba de los Alcores (1.408); y en Zamora en Castrillo de Guareña (300) y en Arzadegos (200).«En la reunión que celebrará próximamente la Comisión de Seguimiento encargada de velar por el cumplimiento del Plan de Calidad de las Aguas comenzaremos a analizar cuál de todos los sistemas es el mejor para poder implantarlo en los pequeños municipios», explica Ruiz.Para este tipo de actuaciones, el presupuesto contemplado en el protocolo del Plan reserva 205.158.270,11 euros en el capítulo de intervenciones en municipios de menos de 500 habitantes que estén dentro y fuera de la Red Natura 2000.Y es que el citado protocolo deja claro que es una prioridad del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino la ejecución de obras de depuración en poblaciones menores de 2.000 habitantes que estén incluidas o tengan parte de su territorio (5% o 10 hectáreas como mínimo) dentro de la Red Natura 2000.El optimismo de la consejera de Medio Ambiente en alcanzar una solución para los pequeños municipios, contrasta con las dudas que le asaltan a la hora de afirmar de forma tajante que podrá cumplir su compromiso de legislatura.«Nos habíamos comprometido a alcanzar todas las localidades de más de 1.000 vecinos o 2.000 habitantes equivalentes, pero el escenario actual de crisis económica puede ponerlo en peligro», reconoce María Jesús Ruiz, quien recuerda que, aunque este segundo Plan de Calidad de las Aguas mantiene su horizonte en 2015, está contemplada una prórroga de 2 años para que se terminen de ejecutar las actuaciones ya en marcha. El Plan también señala por dónde hay que empezar: «Son objetivo inmediato las actuaciones que pudieran estar incluidas en procedimientos de infracción».