El consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, ha firmado el contrato para la construcción de tres nuevas depuradoras en Sisante, Pozoamargo y Casas de Benítez (Cuenca), que cuenta con un presupuesto de diez millones de euros.
Este contrato tiene como objetivo cumplir el compromiso del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, de que todos los ciudadanos vivan donde vivan, cuenten con un sistema de depuración adecuado a sus necesidades.
Además, el objeto de estos contratos es construir las infraestructuras básicas de saneamiento y depuración en los mencionados municipios de Cuenca, con el fin de proteger el medioambiente y la calidad de las aguas.
El Gobierno de Castilla-La Mancha tiene actualmente en ejecución en la provincia de Cuenca proyectos de depuración por importe global de 135,6 millones de euros para la construcción de 91 depuradoras que darán servicio a 98 municipios.
Asimismo, una vez ejecutado el plan de inversiones de depuración en la provincia de Cuenca, el 95 por ciento de la población conquense dispondrá de un sistema de depuración, y cuando entren en funcionamiento, estas depuradoras podrán atender las necesidades de hasta 5.800 habitantes y podrá tratar diariamente hasta 1.795 metros cúbicos de aguas residuales.
Además, mediante este tipo de infraestructuras también se da cumplimento al compromiso del Gobierno regional de continuar impulsando la obra pública como motor generador de empleo, riqueza y calidad de vida de los ciudadanos.
A la firma de estos contratos con el consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda concurrieron los representantes de las empresas OCIDE, EIFFAGE Infraestructuras y EIFFAGE Energía que forman la Unión Temporal de Empresas (UTE), que construirá estas depuradoras.