El consejero de Medio Ambiente de Cantabria, Francisco Martín, acompañado de la directora general de Obras Hidráulicas y Ciclo Integral del Agua, Ana Isabel Ramos, y el alcalde de Valdeolea, Ángel Calderón, inauguró hoy el saneamiento de Mataporquera, obra en las que la Consejería de Medio Ambiente ha invertido 851.711 euros.
La obra incluye la construcción de una EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) con lagunaje, la primera de estas características que se construye en Cantabria, que consiste en someter a las aguas, en un gran estanque, a un tratamiento terciario de exposición solar para su completa desinfección.
Además se ha construido un colector interceptor que recoge los caudales producidos por los diferentes barrios de Mataporquera y que discurre por la carretera de Matamorosa a Mataporquera hasta llegar a la EDAR y al estanque, y que evitarán que las aguas residuales se viertan al río Camesa.
Tras el agradecimiento del alcalde a la Consejería de Medio Ambiente por la obra realizada y las explicaciones técnicas de la directora general de Obras Hidráulicas, el consejero mostró su satisfacción, aludiendo a la paradoja de que precisamente el núcleo urbano más importante de Valdeolea careciera de saneamiento.
También se refirió a la solución técnica adoptada, un sistema de depuración blando que se ha llevado a cabo por las condiciones orográficas y climáticas del municipio, y que es la primera vez que se aplica en Cantabria. Martín señaló que esta obra es "una muestra más del esfuerzo de este Gobierno realiza para que los ciudadanos del entorno rural tengan los mismos servicios y las mismas condiciones de vida que el resto".
DOS EJES PRINCIPALES
El trazado de la red de saneamiento tiene dos ejes principales y varios ramales. El primer eje comienza interceptando el actual vertido al río, junto al paso a nivel con barreras, y discurre por el camino aglomerado existente. Frente a la estación de ferrocarril se ha situado un pozo de resalto, con un salto de dos metros, para reducir la cota de la tubería, hasta la margen derecha del Camesa. El colector discurre en todo momento por gravedad, junto al camino peatonal existente, paralelo a las vías del ferrocarril.
El colector, de PVC y con un diámetro de 400 milímetros, recoge por un ramal las aguas residuales de los vertidos de la fábrica Codefer, así como otros caudales generados al otro lado de la vía del ferrocarril, que se vertían directamente al río. También se incorpora al colector un ramal que proviene del barrio de Parafrancos. Este colector desemboca en un pozo de bombeo, capaz de elevar las aguas residuales generadas hasta la cota de entrada a Depuradora.
DEPURADORA Y ESTANQUE
La EDAR tiene unas dimensiones de 11,40 metros de largo, 10,65 metros de ancho y una profundidad de 3,50 metros, lo que ha obligado a efectuar una excavación superior a 700 metros cúbicos, de manera que los muros de la instalación se elevan un metro por encima del terreno.
Las aguas residuales conducidas hasta la depuradora se encuentran, en primer lugar, con un pre-tratamiento que elimina los sólidos y las partículas más gruesas, como la arena, las grasas y las espumas. Luego, el caudal se introduce en el tratamiento primario, constituido por un depósito provisto de aireación y decantación de los sólidos en suspensión contenidos en el agua negra.
Este depósito está conectado con otro más pequeño, que constituye el tratamiento secundario en decantador. El efluente resultante del decantador se recoge mediante canaletas hasta una arqueta de análisis que a través de un emisario vierte el agua depurada al segundo eje. Este segundo eje conduce las aguas, ya depuradas casi al 90 por ciento, hasta el estanque, donde la exposición solar provoca la desinfección. El estanque mide 70 metros de largo y 40 de ancho, con una profundidad de 0,75 metros. Además, se ha realizado un cierre perimetral para delimitar la construcción con plantación de especies aromáticas (tomillo y lavanda) para reducir los olores de las aguas estancadas.
También se incluyen en el saneamiento los ramales denominados 'Ramal Puente' y 'Ramal Colegio'. El primero recoge las aguas residuales de las viviendas situadas al otro lado del puente sobre el río Camesa, y el segundo recoge las aguas de la zona del polideportivo y del colegio que vertían directamente al río.
MEJORA DEL PROYECTO
A lo largo de la obra, los técnicos se han encontrado con imprevistos que han obligado a modificar la planificación inicial. La primera variación se produjo en los trabajos del pozo de bombeo número 1, en la depuradora, y en los ejes primero y segundo. El movimiento de tierras fue muy superior al estimado y además se incrementó el porcentaje de roca excavada. También las características del terreno encontrado en el primer eje, con aparición de fangos y terrenos sueltos mezclados, obligaron a realizar excavaciones superiores a las presupuestadas.
Asimismo, los criterios marcados por el Servicio de Carreteras Autonómicas del Gobierno de Cantabria, para la ejecución del cruce definido en el ramal de Parafrancos de la carretera CA-284, obligaron a ejecutar una hinca bajo la capa de firme de la misma. Por último, la elevada profundidad de la Estación de Bombeo número 1 ha precisado de un tornillo 'sinfín' para la evacuación de las partículas sólidas que llegan a la instalación. Este instrumento elimina la necesidad de trabajar dentro del bombeo a la hora de realizar operaciones futuras de mantenimiento, con la consiguiente mejora en comodidad y seguridad para los operarios.