The regional government allocated 11 million euros to clean up spills of nine localities of Cuenca
Tue, 17/06/2008
El consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, ha firmado el contrato con el que se da inicio a las obras para que 2.700 conquenses dispongan de un eficaz sistema de tratamiento para sus vertidos. La inversión para acometer la construcción de estas nuevas instalaciones asciende a 11 millones de euros.
El proyecto prevé la construcción de siete instalaciones para dar servicio a nueve localidades, pues dos de ellas, en concreto las que atenderán a los núcleos de Valparaíso de Arriba y Valparaíso de Abajo, así como de Loranca y Olmedilla del Campo, serán conjuntas, informó la Junta en un comunicado.
Esta medida favorece a poblaciones pequeñas, algunas de las cuales no superan los trescientos habitantes. Sin embargo, y dentro del objetivo de cumplir sobradamente con la normativa europea en materia de depuración, el conjunto de las depuradoras se ha diseñado para atender a una población equivalente a 27.000 habitantes. Con ello, se asegura el crecimiento sostenible que a corto y medio plazo puedan experimentar estas localidades.
Compatibilizar el crecimiento económico con la protección del medio ambiente se ha convertido en una prioridad para Castilla-La Mancha, y estas nuevas instalaciones, que en conjunto está previsto que depuren hasta un máximo de 5.500 metros cúbicos de vertidos, contribuyen a la consecución de este objetivo.
Este contrato forma parte de los 126 millones de euros que desde el año 2006 ha licitado la Consejería de Ordenación del Territorio y Vivienda, a través de la Entidad Pública de Aguas de Castilla-La Mancha, en la provincia de Cuenca. Con este presupuesto se van a construir 89 estaciones depuradoras para dar servicio a 94 localidades conquenses.
El proyecto prevé la construcción de siete instalaciones para dar servicio a nueve localidades, pues dos de ellas, en concreto las que atenderán a los núcleos de Valparaíso de Arriba y Valparaíso de Abajo, así como de Loranca y Olmedilla del Campo, serán conjuntas, informó la Junta en un comunicado.
Esta medida favorece a poblaciones pequeñas, algunas de las cuales no superan los trescientos habitantes. Sin embargo, y dentro del objetivo de cumplir sobradamente con la normativa europea en materia de depuración, el conjunto de las depuradoras se ha diseñado para atender a una población equivalente a 27.000 habitantes. Con ello, se asegura el crecimiento sostenible que a corto y medio plazo puedan experimentar estas localidades.
Compatibilizar el crecimiento económico con la protección del medio ambiente se ha convertido en una prioridad para Castilla-La Mancha, y estas nuevas instalaciones, que en conjunto está previsto que depuren hasta un máximo de 5.500 metros cúbicos de vertidos, contribuyen a la consecución de este objetivo.
Este contrato forma parte de los 126 millones de euros que desde el año 2006 ha licitado la Consejería de Ordenación del Territorio y Vivienda, a través de la Entidad Pública de Aguas de Castilla-La Mancha, en la provincia de Cuenca. Con este presupuesto se van a construir 89 estaciones depuradoras para dar servicio a 94 localidades conquenses.