The price of the water will raise a 15% because of the rivers quality plan
Fri, 08/06/2007
España tiene un problema de contaminación en los ríos.
Aunque en los últimos 10 años se han construido un millar de depuradoras a gran ritmo, hay que duplicar -o más- la cifra para cumplir las exigencias europeas sobre calidad del agua. Para ello son necesarios 20.000 millones de euros en ocho años. El Gobierno pondrá la cuarta parte de este dinero, y aunque haya financiación europea, la mayor parte de la inversión saldrá del canon de depuración que paga cada usuario. Las constructoras afirman que el precio del agua tendrá que subir al menos un 15%, como ya ha ocurrido en Aragón, pionera en depuración. Aunque parece mucho, un español gasta en agua de media 102 euros al año. Así que la subida sería de unos 15 euros.
El precio del agua del grifo varía en cada comunidad y en cada ciudad. Va de los 0,49 euros por 1.000 litros de Lugo a los 2,06 euros de Baleares. De media, según el estudio Precios y costes de servicios de agua del Ministerio de Medio Ambiente, menos del 1% del gasto familiar va a agua potable. Conclusión: el agua es barata. 102 euros por habitante al año, 1,14 euros por metro cúbico, unas 500 veces menos que el agua embotellada. Y eso pese a que en 2005 el precio subió de media un 5% y en comunidades como Murcia más al utilizar cada vez más agua desalada.
Un 25% del precio lo constituye el canon de saneamiento, con el que se paga gran parte de los 770 millones que cada año cuesta depurar el agua. Sin embargo, ese canon tendrá que subir para completar el Plan Nacional de Calidad de las Aguas que el Consejo de Ministros tiene previsto aprobar hoy, según anunció ayer en el Foro Cinco Días la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona.
Desde 1995 se han construido más de 1.000 depuradoras en un gran esfuerzo inversor para cumplir la directiva europea de 1991 sobre la calidad de agua. Esta norma obligaba a que, en 2005, los ayuntamientos de 1.000 habitantes depurasen sus aguas, algo que cumplen los municipios que agrupan al 80% de la población. Para 2015, Bruselas endurece las condiciones al establecer que todos los ayuntamientos tienen que depurar el agua y fijar criterios más estrictos para los que ya cumplen.
El Plan del Gobierno contempla una inversión, en números redondos, de 20.000 millones de euros (cuatro veces más de lo que se invirtió entre 1995 y 2005). El Gobierno, según fuentes conocedoras del plan, contribuirá en gran medida a pagar estas obras y ha puesto a disposición de las comunidades unos 5.000 millones: 3.000 para las obras de interés general, 1.000 para subvencionar obras en pueblos muy pequeños y dispersos y otros 1.000 como ayuda a las comunidades que tienen 'zonas sensibles', espacios de valor ecológico que requieren mejor depuración y que se han multiplicado. Además, algunas comunidades podrán tener fondos europeos. Pero aún así faltarán más de 12.000 millones de euros que tendrá que salir de canon de depuración, algo imposible hoy. El plan del Gobierno prevé más de 2.100 actuaciones, entre ellas más de 1.000 nuevas depuradoras, pero también colectores, ampliaciones y adaptaciones de las existentes. El plan supondrá duplicar el actual ritmo de inversión en depuración.
Narbona explicó ayer que 'los precios del agua tienen que reflejar todos sus costes, cosa que en el caso de las aguas depuradas todavía no es del todo cierto'. Y apuntó la subida del canon: 'La iniciativa privada podrá entrar mejor en colaboración con el sector público en la medida en que garanticemos cánones que cubran los costes de esas actuaciones'.
El director de la Asociación Tecnológica para el Tratamiento del Agua, Ángel Cajigas, ex responsable de la materia en Medio Ambiente, coincide en que las constructoras pueden financiar parte de las obras si les dan una concesión, pero para eso requieren que el canon de saneamiento suba. 'El precio del agua tiene que subir para cumplir el plan de depuración. El canon varía según la comunidad entre 0,2 y 0,3 euros por metro cúbico, pero debe estar sobre 0,4 euros para que sea asumible', según Cajigas. Esto implica una subida de precio de al menos el 15%, cifra que incluso elevan técnicos de Medio Ambiente, aunque variará en cada autonomía. El Círculo de Empresarios defendió tarifas del agua 'que reflejen el coste para racionalizar la demanda'.
La idea es que el canon suba lo mismo dentro de cada comunidad, aunque los habitantes de las ciudades ya pagan su depuración. Con el aumento del canon en las ciudades se pagará la construcción de depuradoras en pueblos pequeños, cuyo coste no sería asumible para los habitantes de un pueblo. Algunas comunidades no tienen un canon uniforme y lo cobra cada ayuntamiento. Para distribuir el coste entre la población, Medio Ambiente ha pedido a estas autonomías que creen el canon en todo su territorio.
Aunque en los últimos 10 años se han construido un millar de depuradoras a gran ritmo, hay que duplicar -o más- la cifra para cumplir las exigencias europeas sobre calidad del agua. Para ello son necesarios 20.000 millones de euros en ocho años. El Gobierno pondrá la cuarta parte de este dinero, y aunque haya financiación europea, la mayor parte de la inversión saldrá del canon de depuración que paga cada usuario. Las constructoras afirman que el precio del agua tendrá que subir al menos un 15%, como ya ha ocurrido en Aragón, pionera en depuración. Aunque parece mucho, un español gasta en agua de media 102 euros al año. Así que la subida sería de unos 15 euros.
El precio del agua del grifo varía en cada comunidad y en cada ciudad. Va de los 0,49 euros por 1.000 litros de Lugo a los 2,06 euros de Baleares. De media, según el estudio Precios y costes de servicios de agua del Ministerio de Medio Ambiente, menos del 1% del gasto familiar va a agua potable. Conclusión: el agua es barata. 102 euros por habitante al año, 1,14 euros por metro cúbico, unas 500 veces menos que el agua embotellada. Y eso pese a que en 2005 el precio subió de media un 5% y en comunidades como Murcia más al utilizar cada vez más agua desalada.
Un 25% del precio lo constituye el canon de saneamiento, con el que se paga gran parte de los 770 millones que cada año cuesta depurar el agua. Sin embargo, ese canon tendrá que subir para completar el Plan Nacional de Calidad de las Aguas que el Consejo de Ministros tiene previsto aprobar hoy, según anunció ayer en el Foro Cinco Días la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona.
Desde 1995 se han construido más de 1.000 depuradoras en un gran esfuerzo inversor para cumplir la directiva europea de 1991 sobre la calidad de agua. Esta norma obligaba a que, en 2005, los ayuntamientos de 1.000 habitantes depurasen sus aguas, algo que cumplen los municipios que agrupan al 80% de la población. Para 2015, Bruselas endurece las condiciones al establecer que todos los ayuntamientos tienen que depurar el agua y fijar criterios más estrictos para los que ya cumplen.
El Plan del Gobierno contempla una inversión, en números redondos, de 20.000 millones de euros (cuatro veces más de lo que se invirtió entre 1995 y 2005). El Gobierno, según fuentes conocedoras del plan, contribuirá en gran medida a pagar estas obras y ha puesto a disposición de las comunidades unos 5.000 millones: 3.000 para las obras de interés general, 1.000 para subvencionar obras en pueblos muy pequeños y dispersos y otros 1.000 como ayuda a las comunidades que tienen 'zonas sensibles', espacios de valor ecológico que requieren mejor depuración y que se han multiplicado. Además, algunas comunidades podrán tener fondos europeos. Pero aún así faltarán más de 12.000 millones de euros que tendrá que salir de canon de depuración, algo imposible hoy. El plan del Gobierno prevé más de 2.100 actuaciones, entre ellas más de 1.000 nuevas depuradoras, pero también colectores, ampliaciones y adaptaciones de las existentes. El plan supondrá duplicar el actual ritmo de inversión en depuración.
Narbona explicó ayer que 'los precios del agua tienen que reflejar todos sus costes, cosa que en el caso de las aguas depuradas todavía no es del todo cierto'. Y apuntó la subida del canon: 'La iniciativa privada podrá entrar mejor en colaboración con el sector público en la medida en que garanticemos cánones que cubran los costes de esas actuaciones'.
El director de la Asociación Tecnológica para el Tratamiento del Agua, Ángel Cajigas, ex responsable de la materia en Medio Ambiente, coincide en que las constructoras pueden financiar parte de las obras si les dan una concesión, pero para eso requieren que el canon de saneamiento suba. 'El precio del agua tiene que subir para cumplir el plan de depuración. El canon varía según la comunidad entre 0,2 y 0,3 euros por metro cúbico, pero debe estar sobre 0,4 euros para que sea asumible', según Cajigas. Esto implica una subida de precio de al menos el 15%, cifra que incluso elevan técnicos de Medio Ambiente, aunque variará en cada autonomía. El Círculo de Empresarios defendió tarifas del agua 'que reflejen el coste para racionalizar la demanda'.
La idea es que el canon suba lo mismo dentro de cada comunidad, aunque los habitantes de las ciudades ya pagan su depuración. Con el aumento del canon en las ciudades se pagará la construcción de depuradoras en pueblos pequeños, cuyo coste no sería asumible para los habitantes de un pueblo. Algunas comunidades no tienen un canon uniforme y lo cobra cada ayuntamiento. Para distribuir el coste entre la población, Medio Ambiente ha pedido a estas autonomías que creen el canon en todo su territorio.