Murcia Government ask for funds to enlarge the Murcia desalination plant

Tue, 20/09/2005

EFE

El consejero de Agricultura, Antonio Cerdá, pidió hoy al director general de la sociedad estatal Aguas de las Cuencas Mediterráneas (ACUAMED), Adrián Baltanás, que el Ministerio de Medio Ambiente transfiera a Murcia mediante un convenio 35 millones de euros para ampliar la depuradora de Murcia.
La depuradora actualmente trata cien mil metros cúbicos de agua al día y con la ampliación tratará 180.000, dedicando una tercera parte del volumen, mediante un sistema terciario, para el riego de la Vega Media.
Cerdá hizo estas declaraciones después de mantener con Baltanás un encuentro en la Consejería en el que éste le explicó los proyectos de las desalinizadoras de Torrevieja y Aguilas, ambas en periodo de información pública, así como un repaso general al programa AGUA en la Región, donde está previsto invertir 1.500 millones de euros, con una producción de 330 hectómetros cúbicos de agua.
En cuanto al citado convenio, Baltanás le pareció interesante, pero no ha dado todavía una respuesta en tanto la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, conozca los detalles.
Baltanás le pidió a Cerdá un apoyo explícito a la construcción de la desalinizadora de Torrevieja, en tanto en cuanto beneficia en dos terceras partes a la Región de Murcia, a pesar de estar ubicada en la Generalitat Valenciana, por lo que le solicitó que ante esa administración expresase su respaldo a la obra.
Al respecto, Cerdá afirmó en conferencia de prensa que por el momento no daría su apoyo hasta que se conozcan más detalles del proyecto, entre ellos, el precio que tendrá el agua desalada y su viabilidad, así como la opinión del alcalde de Torrevieja.
Adrián Baltanás comentó que la desalación es el mejor recurso en caso de sequía porque siempre está disponible el agua, no así en el caso de los trasvases, que como ha quedado demostrado en el del Tajo-Segura, ante la falta de agua en cabecera, los envíos son menores "cuando más se necesitan".
En este sentido, dudó de la eficacia de una inversión de 5.000 millones de euros como la que necesitaba el trasvase del Ebro, "que cuando de verdad se necesitan sólo se pueden utilizar una parte".
Sin embargo, Cerdá mantuvo que la única solución para la Región es la transferencia de agua desde otra cuenca hidrográfica