Los perímetros de protección se emplean para salvaguardar la calidad y cantidad de las aguas
subterráneas destinadas al consumo humano. Es una figura prevista en las legislaciones nacional y europea, entre otras, la Directiva Marco del Agua, DMA, 2000/60/CE, el Texto refundido de la Ley de Aguas 1/2001 o el Reglamento del Dominio Público Hidráulico RD 849/1986. La aplicación de la DMA hace necesario efectuar un registro de áreas protegidas que incluya todas las aguas destinadas al consumo humano estableciendo el año 2015 para el
cumplimiento de normas y objetivos en estas. Hay que elaborar los proyectos técnicos de los
perímetros de protección antes de diciembre de 2009 al tener que incluirse en el programa de
medidas y estar operativos en diciembre de 2012, al ser necesario incluirlos en los planes de gestión de cada cuenca. Hay que integrar además esta figura de protección de las aguas de consumo humano con la delimitación de zonas de salvaguarda conforme a los requerimientos de la Directiva Marco del Agua.