The river breaches the European quality standards because of poisonous sludge
Tue, 15/11/2011
La calidad de las masas de agua del Ebro (sus embalses, lagos, acuíferos, afluentes y el propio río) progresa adecuadamente, aunque todavía hay contaminación en aguas subterráneas y problemas químicos en algunos tramos superficiales, según atestigua el último informe de control de calidad de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), con datos recogidos en el 2010. ¿Los puntos negros Las zonas que soportan el impacto de la agricultura y, sobre todo, el trecho del río que discurre entre Flix (Ribera d'Ebre) y Tortosa (Baix Ebre).
«Mientras no se complete la limpieza de los lodos tóxicos del embalse de Flix será difícil cumplir con los parámetros de la directiva europea», admite Javier Sanromán, director de Calidad de las Aguas de la CHE. El incumplimiento de la normativa, precisa el técnico, «se produce cuando se valora el estado químico del agua. Cuando lo que se analiza es el estado ecológico, el resultado no es malo». Como consecuencia de ello, «los peces presentan altas dosis de mercurio, una anomalía que no se resolverá hasta que hayan pasado unos cuantos años después de la descontaminación de Flix», advierte Sanromán.
Los controles realizados por la CHE en aguas destinadas al abastecimiento humano (en poblaciones de más de 500 habitantes), concluyen que todos los puntos analizados se encuentran en buen estado, lo mismo que los tramos de interés piscícola. El informe señala que ninguna masa de agua superficial presenta un estado ecológico malo, pero advierte de que 18 de ellas, un 2,7%, son «deficientes».
«Mientras no se complete la limpieza de los lodos tóxicos del embalse de Flix será difícil cumplir con los parámetros de la directiva europea», admite Javier Sanromán, director de Calidad de las Aguas de la CHE. El incumplimiento de la normativa, precisa el técnico, «se produce cuando se valora el estado químico del agua. Cuando lo que se analiza es el estado ecológico, el resultado no es malo». Como consecuencia de ello, «los peces presentan altas dosis de mercurio, una anomalía que no se resolverá hasta que hayan pasado unos cuantos años después de la descontaminación de Flix», advierte Sanromán.
Los controles realizados por la CHE en aguas destinadas al abastecimiento humano (en poblaciones de más de 500 habitantes), concluyen que todos los puntos analizados se encuentran en buen estado, lo mismo que los tramos de interés piscícola. El informe señala que ninguna masa de agua superficial presenta un estado ecológico malo, pero advierte de que 18 de ellas, un 2,7%, son «deficientes».