Varios municipios del País Vasco han resultado inundados por las fuertes lluvias que se han producido este domingo. San Sebastián ha sido uno de los más perjudicados, pues más de 2.400 personas se han visto afectadas por las tormentas. Con más de 300 litros por metro cuadrado, los vecinos de esta localidad no recuerdan unas inundaciones iguales desde las registradas en 1983. El Ayuntamiento de la ciudad, en la que se han evacuado a 100 personas, ha anunciado que pedirá la declaración de zona catastrófica. Vizcaya ha sido la segunda localidad más afectada.

Según ha señalado el alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, las lluvias afectaron a unas 2.400 personas en la localidad, de las cuales 100 han sido evacuadas. De éstas, 30 fueron realojadas por los servicios sociales del Consistorio, 12 unidades familiares, con menores a su cargo, en pisos de emergencia, mientras que 18 durmieron en el polideportivo Gasca. Los barrios más perjudicados fueron los de Txomin-Enea y Martutente.

Los datos, tal y como el regidor donostiarra ha precisado en rueda de prensa en la capital guipuzcoana, son "parejos" a las inundaciones que se produjeron en 1983, pues en "veintitantos años no se han registrado acontecimientos" como las fuertes lluvias del domingo. Es por ello por lo que Izaguirre ha anunciado que pedirá la declaración de zona catastrófica.

Además de lanzar un mensaje de "tranquilidad" a los vecinos, el alcalde ha apuntado a que "lo peor ya ha pasado", ya que los pronósticos del tiempo auguran una disminución de lluvia en los próximos días.

En ese sentido, ha explicado que en la reunión del gabinete de crisis que realizaron en la mañana del lunes han constatado una bajada de los niveles del río Urumea, que ya está recuperando la normalidad. En cuanto a los problemas con la luz, ha informado que Iberdrola está trabajando para solucionarlos.

UNA OFICINA Y UN TELÉFONO AL SERVICIO DE LOS AFECTADOS

Asimismo, Izagirre ha señalado que ahora lo importante es atender a las personas, para lo que el Ayuntamiento ha habilitado en la casa de cultura de Loiola una oficina de atención a los afectados -que en los próximos días se trasladará a la casa de cultura de Martutene-, así como ha habilitado el teléfono 010 al servicio de los damnificados.

Posteriormente a la rueda de prensa, el alcalde donostiarra ha realizado junto con el viceconsejero de Interior, Raúl Fernández Arroiabe, y el diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, una visita a las zonas afectadas.

Estos dos últimos también comparecieron ante los medios de comunicación en San Sebastián, previamente a esta visita, y coincidieron en que la Diputación de Guipúzcoa ha puesto en marcha todos los servicios para buscar soluciones a la situación de los guipuzcoanos afectados.

En su intervención, Arroiabe ha señalado que es "muy prematuro" hablar de plantear la declaración de zona catastrófica, como ha reclamado el Ayuntamiento donostiarra. No obstante, ha coincidido con Izagirre al apuntar que las lluvias han sido "muy importantes".

Según ha indicado, en este momento, la situación es de "relativa normalidad", ya que "se está recuperando todas las zonas y los ríos ya han bajado a sus cauces casi normales". "Toca evaluar los daños y ver cuál ha sido la afección que han podido tener tanto los particulares como las instituciones y tratar de ver cómo solventamos todos estos problemas", ha insistido el viceconsejero de Interior.

DESACTIVACIÓN DEL PLAN ESPECIAL DE INUNDACIONES

Tras la mejora del tiempo en las últimas horas de este lunes, el Departamento de Interior del Gobierno Vasco ha desactivado el Plan Especial de Inundaciones. Lo ha hecho después de que el pasado domingo, a consecuencia del aumento del nivel de inundación en amplias zonas de Guipúzcoa, activara la Fase II de dicho plan.

No obstante, el consejero de Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares, ha anunciado que su Departamento seguirá "prestando toda la ayuda y apoyo que sea necesario", así como ha mostrado su solidaridad a los damnificados de las inundaciones de Vizcaya y Guipúzcoa.

En el transcurso de una comisión parlamentaria, Ares también ha aprovechado para felicitar a los servicios de emergencia. "Su actuación ha permitido paliar los daños y atender con la máxima urgencia a las personas afectadas", ha manifestado.

LOCALIZADO EL CADÁVER DE UN HOMBRE DE 76 AÑOS DESAPARECIDO

Pero las lluvias no sólo han provocado daños materiales en las localidades vascas, sino que además han ocasionado la muerte de un hombre de 76 años en Irún (Guipúzcoa). El cadáver del anciano ha sido localizado sobre las 17 horas de la tarde de este lunes en aguas del río Bidasoa, frente al campo de fútbol de la ikastola Txingudi, según informó a Europa Press el departamento de Interior.

El vecino de la ciudad guipuzcoana se encontraba en la huerta de su domicilio, en el barrio de Ventas, cuando alrededor de las 17.30 horas fue arrastrado por una riada hasta el cauce de un arroyo. Desde entonces permanecía desaparecido, hasta que los equipos de rescate de la Ertzaintza y la Cruz Roja dieron con su cuerpo sin vida.

Mientras tanto, los vascos recuperan la normalidad en los municipios afectados por las tormentas. Entre ellos se encuentra la población vizcaína de Galdakao, cuyos daños materiales han sido menores, según ha informado el propio Consistorio en un comunicado.

"Nos hemos adaptado a las necesidades de nuestro municipio y los medios con los que disponemos para poder afrontar con un mínimo de garantías situaciones como las que se han registrado este pasado fin de semana, durante el que no ha existido percance personal alguno y sí daños materiales, especialmente en los bajos de fábricas y establecimientos ubicado en la orilla de Ibaizabal", ha explicado el alcalde de la localidad, Ibon Uribe.

Por otro lado, la estación de Santurtzi del metro de Bilbao permanecerá cerrada como mínimo hasta este viernes debido a los dos metros y medio de agua acumulada en la misma y que, presumiblemente, será achicada a lo largo de este lunes y el martes.

Posteriormente, los técnicos de la empresa realizarán un estudio de los daños y valorarán los trabajos que deberán acometerse. Además, se mantendrán los servicios de lanzadera con la estación de Portugalete, que tendrán una frecuencia de cinco minutos.