El alto nivel de arsénico detectado en el agua que abastece la localidad de Puente Domingo Flórez obliga a los vecinos a beber agua embotellada. Así lo precisó el alcalde, Julio Arias, quien explicó que aunque el nivel detectado en los análisis periódicos no es muy alto, tan sólo tres puntos por encima de lo exigido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), «es preciso alertar a los vecinos de esta situación y recomendar el consumo de agua embotellada». La Diputación de León ya ha llevado a esta localidad unos 20.000 litros de agua desde el pasado 21 de septiembre, cuando se detectó la alerta en la analítica. Los lunes, los miércoles y los viernes se reparte el suministro, que suele ser una media de cinco litros por persona, ya que el agua tan sólo es para el consumo de boca.

En la localidad de Salas de la Ribera también se detectó un alto nivel de arsénico, aunque se solucionó instalando una bomba en la captación subterránea de la pedanía. «Todas las captaciones de esta montaña tienen el mismo problema cuando baja el nivel freático», explicó el alcalde, para añadir que se debe a que la intensa sequía de los últimos meses ha provocado el descenso de las aguas, que ahora arrastran los metales pesados que se encuentran en el fondo de los pozos y manantiales. A la espera de que el lunes se conozcan los resultados de la última analítica, el millar de vecinos de Puente, «que lo ha entendido muy bien», seguirá bebiendo agua embotellada. El Ayuntamiento ya trabaja para conseguir mejorar la red de abastecimiento con unos filtros especiales que eviten este problema.