The coastal towns, satisfied with the draft of the Tajo Basin Plan
Wed, 26/10/2011
El presidente de la Asociación de los Municipios Ribereños de los embalses de Entrepeñas y Buendía, Antonio Luengo, ha aplaudido que el borrador del Plan de Cuenca del Tajo recoja una de las principales reclamaciones de los municipios ribereños --la lámina permanente de agua--, así como que revise la política de trasvases al Levante.
Luengo ha señalado en declaraciones a Europa Press que los pantanos de Entrepeñas y Buendía deben ser "pantanos de reserva", ha asegurado que el Tajo se encuentra en una situación "deplorable" y ha alertado de que la vecina comunidad de Madrid puede depender próximamente del agua de la cabecera del Tajo.
En este sentido ha insistido en que la lámina permanente debe rondar los 1.000 hectómetros y los trasvases para consumo humano no pueden superar los 100 hectómetros.
Luengo ha asegurado que "cualquier trasvase superior, con la bajada de aportes hídricos que existe, significaría el agotamiento a corto plazo de la reserva de Entrepeñas y Buendía".
PREOCUPACIÓN EN CAÑAVERUELAS
El alcalde de Cañaveruelas, Gregorio Villamil, por su parte, se ha mostrado preocupado por el plan de cuenca para el Tajo, ya que considera que el nuevo documento tendría que ser una continuación del anterior y debería recoger la lámina permanente mínima del 40% en los embalses y otra reserva hídrica para construir infraestructuras de abastecimiento y mantener regadíos en la comarca.
En declaraciones a Europa Press, Villamil ha asegurado que el plan debe contemplar actuaciones en la zona de los ribereños para crear mayor riqueza y desarrollo en la zona. "Deben quedar unas reservas de agua para las infraestructuras que necesita la zona. ¿De qué nos sirve que se haga un plan hidrológico de la Cuenca del Tajo si no tenemos las infraestructuras necesarias para poder utilizar esa reserva?", se ha preguntado.
Villamil también reclama que el plan contemple una reserva "bastante amplia de abastecimiento humano porque las poblaciones, lo que queremos, es que crezcan". Por último, ha reiterado que debe recuperarse el Plan Hidrológico Nacional y se retome el proyecto de los azudes en los embalses.
Luengo ha señalado en declaraciones a Europa Press que los pantanos de Entrepeñas y Buendía deben ser "pantanos de reserva", ha asegurado que el Tajo se encuentra en una situación "deplorable" y ha alertado de que la vecina comunidad de Madrid puede depender próximamente del agua de la cabecera del Tajo.
En este sentido ha insistido en que la lámina permanente debe rondar los 1.000 hectómetros y los trasvases para consumo humano no pueden superar los 100 hectómetros.
Luengo ha asegurado que "cualquier trasvase superior, con la bajada de aportes hídricos que existe, significaría el agotamiento a corto plazo de la reserva de Entrepeñas y Buendía".
PREOCUPACIÓN EN CAÑAVERUELAS
El alcalde de Cañaveruelas, Gregorio Villamil, por su parte, se ha mostrado preocupado por el plan de cuenca para el Tajo, ya que considera que el nuevo documento tendría que ser una continuación del anterior y debería recoger la lámina permanente mínima del 40% en los embalses y otra reserva hídrica para construir infraestructuras de abastecimiento y mantener regadíos en la comarca.
En declaraciones a Europa Press, Villamil ha asegurado que el plan debe contemplar actuaciones en la zona de los ribereños para crear mayor riqueza y desarrollo en la zona. "Deben quedar unas reservas de agua para las infraestructuras que necesita la zona. ¿De qué nos sirve que se haga un plan hidrológico de la Cuenca del Tajo si no tenemos las infraestructuras necesarias para poder utilizar esa reserva?", se ha preguntado.
Villamil también reclama que el plan contemple una reserva "bastante amplia de abastecimiento humano porque las poblaciones, lo que queremos, es que crezcan". Por último, ha reiterado que debe recuperarse el Plan Hidrológico Nacional y se retome el proyecto de los azudes en los embalses.