The Hydrographic Confederation maintains to the Principality in prealerts by droughts
Tue, 25/10/2011
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC), Jorge Marquínez, indicó ayer que el Principado aún continúa en fase de prealerta por sequías, por lo que el Plan Especial de Sequía sigue activado en las cuencas que este organismo gestiona dentro de las provincias de Asturias, Lugo y Cantabria.
En declaraciones a los periodistas poco antes de participar en una jornada en Oviedo, Jorge Marquínez indicó que las precipitaciones de estos últimos días en el Principado no han sido suficientes. «No ha habido variaciones significativas, vamos a ver cómo evolucionan las lluvias», señaló.
La CHC decidió activar el plan en fase de prealerta la pasada semana, aunque éste abarca diversos aspectos clave para la gestión de estas situaciones.
El primero de ellos tiene que ver con la caracterización de las sequías en las cuencas del Norte, con importantes diferencias respecto a las de otras regiones. Esta definición se hace teniendo en cuenta desde documentos históricos hasta indicadores hidrológicos y análisis de los principales sistemas de abastecimiento del Principado.
Posteriormente, el plan analiza los indicadores que predicen o manifiestan la existencia de una situación de sequía, además de los umbrales que apunten hacia una manifiesta falta de agua.
Por último, cada umbral desarrolla una serie de medidas asociadas, en las que se distinguen las que son responsabilidad directa de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico y las que son competencia de otros organismos o administraciones. En este último caso, la CHC desarrollaría una función de información, apoyo, asesoramiento y autorizaciones administrativas.
En declaraciones a los periodistas poco antes de participar en una jornada en Oviedo, Jorge Marquínez indicó que las precipitaciones de estos últimos días en el Principado no han sido suficientes. «No ha habido variaciones significativas, vamos a ver cómo evolucionan las lluvias», señaló.
La CHC decidió activar el plan en fase de prealerta la pasada semana, aunque éste abarca diversos aspectos clave para la gestión de estas situaciones.
El primero de ellos tiene que ver con la caracterización de las sequías en las cuencas del Norte, con importantes diferencias respecto a las de otras regiones. Esta definición se hace teniendo en cuenta desde documentos históricos hasta indicadores hidrológicos y análisis de los principales sistemas de abastecimiento del Principado.
Posteriormente, el plan analiza los indicadores que predicen o manifiestan la existencia de una situación de sequía, además de los umbrales que apunten hacia una manifiesta falta de agua.
Por último, cada umbral desarrolla una serie de medidas asociadas, en las que se distinguen las que son responsabilidad directa de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico y las que son competencia de otros organismos o administraciones. En este último caso, la CHC desarrollaría una función de información, apoyo, asesoramiento y autorizaciones administrativas.