The first phase of the ecological improvement of the river Órbigo (Leon) could be concluded ahead of schedule
Wed, 19/10/2011
La primera fase de las obras de mejora del estado ecológico del río Órbigo, en la provincia de León, en las que el Ministerio del Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) invierte más de tres millones de euros, podrían concluir antes del plazo previsto, fijado inicialmente en 18 meses.
Así lo ha manifestado este martes el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), Antonio Gato, quien ha destacado que se trata de un proyecto "largamente esperado" en el que ya se ha comenzado a trabajar con un esfuerzo económico "muy importante".
Las obras forman parte de la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos, cuyo objetivo es recuperar la conectividad longitudinal y transversal del río Órbigo para mejorar su capacidad de laminación natural, regenerar los hábitats fluviales y recuperar las comunidades piscícolas.
Concretamente, se actuará en un tramo de 23,5 kilómetros de longitud, que se corresponde con la cabecera del río, comprendido desde la confluencia del río Luna con el Omaña, punto de su nacimiento, hasta el arroyo Redecilla en el término municipal de Santa Marina del Rey.
Los trabajos para recuperar la continuidad longitudinal del sistema fluvial en este tramo del río se centrarán en la modificación del azud de Alcoba de la Ribera que se transformará en semidesmontable.
Por otra parte, se logrará incrementar la conectividad lateral del cauce con sus riberas y llanuras de inundación mediante la eliminación o el retranqueo de las barreras longitudinales, es decir, motas o escolleras.
En la actualidad más de 10,8 kilómetros de cauces del tramo en el que se actuará están limitados por motas o escolleras que impiden en periodos de crecida que el río pueda desbordarse en sus llanuras de inundación y minimizan de este modo los posibles daños que se producen aguas abajo.
ELIMINACIÓN DE OBSTÁCULOS
Con esta actuación se eliminarán estos obstáculos en un tramo de diez kilómetros y se permeabilizarán todos los azudes existentes para facilitar el paso en ascenso y en descenso de las poblaciones piscícolas.
Por último, se mejorará la vegetación de ribera mediante la plantación de más de seis hectáreas de árboles y arbustos propios de la zona y con el tratamiento silvícola de la vegetación del tramo en el que se va a actuar.
A esta actuación seguirán otras dos fases, muy similares, en otros dos tramos del río. En este sentido, se actuará desde Hospital de Órbigo hasta La Bañeza en su confluencia con el río Tuerto con un presupuesto de unos tres millones de euros, así como en el tramo que une La Bañeza con Santa Cristina de la Polvorosa en su confluencia con el río Esla, con un presupuesto de 4,2 millones.
UN RÍO EN "PERFECTAS CONDICIONES"
Antonio Gato confió en que se aborden la segunda y tercera fases de actuación tras concluir esta primera intervención, cuyos trabajos comenzaron el pasado día 7 de octubre. "Esperamos que en el futuro puedan acometerse las otras dos fases y tengamos un gran río en perfectas condiciones", concluyó.
El presidente de la CHD se pronunció de este modo en León, donde participó en la inauguración del I Congreso Ibérico 'RestauraRíos', donde expertos internacionales de España, Portugal, Alemania, Suiza, Francia, Noruega, México y Estados Unidos analizan diferentes políticas y experiencias de restauración de ríos y protección frente a inundaciones.
En el acto inaugural Antonio Gato estuvo acompañado por la directora general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino (MARM), Marta Moren y por la presidenta del Centro Ibérico de Restauración Fluvial, Lourdes Hernández.
Así lo ha manifestado este martes el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), Antonio Gato, quien ha destacado que se trata de un proyecto "largamente esperado" en el que ya se ha comenzado a trabajar con un esfuerzo económico "muy importante".
Las obras forman parte de la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos, cuyo objetivo es recuperar la conectividad longitudinal y transversal del río Órbigo para mejorar su capacidad de laminación natural, regenerar los hábitats fluviales y recuperar las comunidades piscícolas.
Concretamente, se actuará en un tramo de 23,5 kilómetros de longitud, que se corresponde con la cabecera del río, comprendido desde la confluencia del río Luna con el Omaña, punto de su nacimiento, hasta el arroyo Redecilla en el término municipal de Santa Marina del Rey.
Los trabajos para recuperar la continuidad longitudinal del sistema fluvial en este tramo del río se centrarán en la modificación del azud de Alcoba de la Ribera que se transformará en semidesmontable.
Por otra parte, se logrará incrementar la conectividad lateral del cauce con sus riberas y llanuras de inundación mediante la eliminación o el retranqueo de las barreras longitudinales, es decir, motas o escolleras.
En la actualidad más de 10,8 kilómetros de cauces del tramo en el que se actuará están limitados por motas o escolleras que impiden en periodos de crecida que el río pueda desbordarse en sus llanuras de inundación y minimizan de este modo los posibles daños que se producen aguas abajo.
ELIMINACIÓN DE OBSTÁCULOS
Con esta actuación se eliminarán estos obstáculos en un tramo de diez kilómetros y se permeabilizarán todos los azudes existentes para facilitar el paso en ascenso y en descenso de las poblaciones piscícolas.
Por último, se mejorará la vegetación de ribera mediante la plantación de más de seis hectáreas de árboles y arbustos propios de la zona y con el tratamiento silvícola de la vegetación del tramo en el que se va a actuar.
A esta actuación seguirán otras dos fases, muy similares, en otros dos tramos del río. En este sentido, se actuará desde Hospital de Órbigo hasta La Bañeza en su confluencia con el río Tuerto con un presupuesto de unos tres millones de euros, así como en el tramo que une La Bañeza con Santa Cristina de la Polvorosa en su confluencia con el río Esla, con un presupuesto de 4,2 millones.
UN RÍO EN "PERFECTAS CONDICIONES"
Antonio Gato confió en que se aborden la segunda y tercera fases de actuación tras concluir esta primera intervención, cuyos trabajos comenzaron el pasado día 7 de octubre. "Esperamos que en el futuro puedan acometerse las otras dos fases y tengamos un gran río en perfectas condiciones", concluyó.
El presidente de la CHD se pronunció de este modo en León, donde participó en la inauguración del I Congreso Ibérico 'RestauraRíos', donde expertos internacionales de España, Portugal, Alemania, Suiza, Francia, Noruega, México y Estados Unidos analizan diferentes políticas y experiencias de restauración de ríos y protección frente a inundaciones.
En el acto inaugural Antonio Gato estuvo acompañado por la directora general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino (MARM), Marta Moren y por la presidenta del Centro Ibérico de Restauración Fluvial, Lourdes Hernández.