Aunque durante todo el verano la sequía y los problemas de abastecimiento de algunos concellos se convirtieron en la principal preocupación de la Consellería de Medio Ambiente, el departamento de Agustín Hernández se prepara también para evitar y minimizar los daños que puedan ocasionar futuras inundaciones. El primer paso ha sido identificar las zonas con "riesgo significativo" de crecidas en la cuenca hidrográfica Galicia-Costa. En total, en la comunidad autónoma existen 543 kilómetros de río, agrupados en unas 167 áreas, con peligro de riada, además de otras 39 zonas costeras donde la subida de las mareas también puede ocasionar destrozos.

En estas áreas la Xunta restringirá la construcción o bien acometerá obras para evitar las crecidas. Las medidas concretas para cada zona se detallarán en un plan de gestión de riesgos que deberá estar terminado antes de 2015, según el departamento de Agustín Hernández.

Previamente la consellería ha realizado un estudio para localizar aquellos tramos de río que si se desbordan podrían causar daños materiales o bien poner en riesgo a la población.

De los 14.700 kilómetros de ríos con los que cuenta Galicia, la Consellería de Medio Ambiente ha analizado un total de 5.894 tomando como referencia los datos de inundaciones históricas, las características topográficas, las pendientes así como otros factores como la erosión provocada por los incendios y la cercanía a edificaciones, zonas peatonales o actividades turísticas o agrarias.

El resultado es que el 3,7 por ciento de la red fluvial de la cuenca Galicia-Costa tiene un riesgo potencial de anegamiento. En Pontevedra se identificaron 55 zonas de río peligrosas, en Lugo 33 y en A Coruña 79.

La Ría de Muros es la más conflictiva en cuanto a crecidas, puesto que concentra hasta 25 áreas de riesgo, según el estudio de la Xunta.

Dentro de la provincia pontevedresa, la mayoría de las áreas con posibilidad de inundaciones se sitúan en la Ría de Vigo, con un total de 15, en la Ría de Pontevedra, con once puntos conflictivos, y en la Ría de Arousa, donde ascienden a doce. Entre los tramos afectados con peligro de crecidas en Pontevedra destacan el río de Zamáns, el Lagares, el Cabeiro, el Puntillón, el Verdugo, el Loiro, el Vispo o el Lérez.

Pero no solo son los ríos los únicos que podrían provocar inundaciones en Galicia. El estudio e l a b o r a d o por Medio A m b i e n t e a d v i e r t e que hay un total de 39 zonas donde la subida del nivel del mar por la crecida de un río en su desembocadura, por un temporal o por el cambio climático, podría provocar situaciones de riesgo.

El director xeral de Aguas de Galicia, Francisco Menéndez, explicó ayer que tras identificarse estas 39 áreas costeras y los 543 kilómetros de río, la consellería procederá a realizar estudios detallados de cada zona."Tendrán que estar terminados antes de 2013", aclaró.

Con esta información Medio Ambiente podrá delimitar la posible superficie afectada por las crecidas de los ríos y los daños que podría causar. "Lo que haremos será definir una zona en la que se restringirán los usos del suelo",explicó.

En el caso, sin embargo, de que ya existieran edificaciones próximas al cauce de los ríos con peligro de inundación, la Xunta estudiará "caso a caso" y acometerá "obras de defensa" para evitar los anegamientos.