Dead birds appear in another lagoon of Ciudad Real as a possible outbreak of botulism
Tue, 23/08/2011
La aparición de ejemplares de aves muertas en la laguna del Prado, en Pozuelo de Calatrava (Ciudad Real), ha levantado la voz de alarma ante la posibilidad de que se trate de un nuevo episodio de botulismo aviar similar al registra también desde hace días la laguna de Navaseca, en Daimiel.
Según ha podido saber hoy Efe, desde hace aproximadamente una semana se está detectando mortandad de aves de distintas especies en esta laguna, que está incluida en el catálogo de espacios protegidos de Castilla-La Mancha como Reserva Natural y Refugio de Fauna.
Las aves muertas están siendo retiradas prácticamente a diario del vaso lagunar por personal técnico y agentes medioambientales de la Consejería de Agricultura de la Junta de Comunidades.
El nuevo episodio de muerte masiva de aves en una laguna de La Mancha Húmeda se produce días después de que se tuviera constancia de una circunstancia similar en la laguna de Navaseca (Daimiel), que según confirmó entonces a Efe el jefe de Toxicología y de la Unidad de Sanidad Animal del Instituto de Recursos Cinegéticos (IREC), Rafael Mateo, se trataba de un caso de botulismo aviar.
La laguna de Pozuelo de Calatrava, también conocida como 'La Inesperada', se encuentra a escasos treinta kilómetros de la laguna de Navaseca, que se localiza en el entorno del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel.
Expertos consultados hoy por Efe han señalado que la muerte de aves en estas lagunas puede estar relacionado con el mismo brote de botulismo, o bien, tratarse de un episodio diferente.
En cualquier caso, han comentado, para poder determinar si se trata de un mismo caso o no sería necesario realizar un estudio detallado que incluyera la toma de muestras de fangos en la laguna y la realización de análisis de las aves.
La detección de las aves muertas en la Laguna de Pozuelo de Calatrava ha sido posible gracias al dispositivo de vigilancia que el Gobierno regional puso en marcha los humedales cercanos a la laguna de Navaseca y que se amplió a otras zonas húmedas como el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, el embalse de El Vicario o las lagunas de Alcázar de San Juan, entre otros.
Se da la circunstancia que tanto la laguna de Navaseca como la de Pozuelo de Calatrava son utilizadas por las depuradoras de los respectivos municipios para verter sus aguas en la última fase del proceso de depuración.
La toxina Clostridium botulinum es la causante del botulismo, sin embargo, el desencadenante para que aparezca esta enfermedad en las aves no es la presencia de la toxina, si no el hecho de que a partir de la descomposición de los cadáveres de los animales muertos, otras aves ingieran las larvas de moscas que se producen y que son las acumulan la toxina, que es lo que acaba intoxicándolas.
Lo que puede parecer una infección, en realidad, es una intoxicación, pues las aves no se infectan por el contacto de unas con otras o por el agua, si no que se intoxican a través de la ingesta de las larvas que contienen la bacteria.
Los expertos consideran que la manera más eficaz de trabajar ante un brote de botulismo es la de retirar los ejemplares muertos para evitar la intoxicación de otros, y recoger a los que se encuentren enfermos para tratarlos en los centros de recuperación de especies y evitar así su muerte.
En los últimos años los brotes de botulismo aviar vienen repitiendo cada verano en la provincia de Ciudad Real, sobre todo, cuando las condiciones climáticas de altas temperaturas favorece la aparición de la toxina en humedales y la muerte de algunas aves desencadena que la intoxicación acabe afectando a otras.
Según ha podido saber hoy Efe, desde hace aproximadamente una semana se está detectando mortandad de aves de distintas especies en esta laguna, que está incluida en el catálogo de espacios protegidos de Castilla-La Mancha como Reserva Natural y Refugio de Fauna.
Las aves muertas están siendo retiradas prácticamente a diario del vaso lagunar por personal técnico y agentes medioambientales de la Consejería de Agricultura de la Junta de Comunidades.
El nuevo episodio de muerte masiva de aves en una laguna de La Mancha Húmeda se produce días después de que se tuviera constancia de una circunstancia similar en la laguna de Navaseca (Daimiel), que según confirmó entonces a Efe el jefe de Toxicología y de la Unidad de Sanidad Animal del Instituto de Recursos Cinegéticos (IREC), Rafael Mateo, se trataba de un caso de botulismo aviar.
La laguna de Pozuelo de Calatrava, también conocida como 'La Inesperada', se encuentra a escasos treinta kilómetros de la laguna de Navaseca, que se localiza en el entorno del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel.
Expertos consultados hoy por Efe han señalado que la muerte de aves en estas lagunas puede estar relacionado con el mismo brote de botulismo, o bien, tratarse de un episodio diferente.
En cualquier caso, han comentado, para poder determinar si se trata de un mismo caso o no sería necesario realizar un estudio detallado que incluyera la toma de muestras de fangos en la laguna y la realización de análisis de las aves.
La detección de las aves muertas en la Laguna de Pozuelo de Calatrava ha sido posible gracias al dispositivo de vigilancia que el Gobierno regional puso en marcha los humedales cercanos a la laguna de Navaseca y que se amplió a otras zonas húmedas como el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, el embalse de El Vicario o las lagunas de Alcázar de San Juan, entre otros.
Se da la circunstancia que tanto la laguna de Navaseca como la de Pozuelo de Calatrava son utilizadas por las depuradoras de los respectivos municipios para verter sus aguas en la última fase del proceso de depuración.
La toxina Clostridium botulinum es la causante del botulismo, sin embargo, el desencadenante para que aparezca esta enfermedad en las aves no es la presencia de la toxina, si no el hecho de que a partir de la descomposición de los cadáveres de los animales muertos, otras aves ingieran las larvas de moscas que se producen y que son las acumulan la toxina, que es lo que acaba intoxicándolas.
Lo que puede parecer una infección, en realidad, es una intoxicación, pues las aves no se infectan por el contacto de unas con otras o por el agua, si no que se intoxican a través de la ingesta de las larvas que contienen la bacteria.
Los expertos consideran que la manera más eficaz de trabajar ante un brote de botulismo es la de retirar los ejemplares muertos para evitar la intoxicación de otros, y recoger a los que se encuentren enfermos para tratarlos en los centros de recuperación de especies y evitar así su muerte.
En los últimos años los brotes de botulismo aviar vienen repitiendo cada verano en la provincia de Ciudad Real, sobre todo, cuando las condiciones climáticas de altas temperaturas favorece la aparición de la toxina en humedales y la muerte de algunas aves desencadena que la intoxicación acabe afectando a otras.