The Ministry proposes to raise a 27% the price of water for drinking
Tue, 05/07/2011
La tarifa del agua del Tajo para los abastecimientos puede subir hasta un 27% si sale adelante la propuesta del Ministerio de Medio Ambiente que pondrá hoy encima de la mesa para ser discutida entre los usuarios del Trasvase. Este elevado incremento está basado en los gastos fijos de funcionamiento del acueducto, de tal forma que los 21 céntimos por metro cúbico que se pagan ahora subirían hasta los 26,6. La repercusión sobre el recibo del agua que pagan los hogares seríaproporcional, una vez que el Consejo de Ministros autorice la operación, lo cual no será inmediato.
Para los regadíos, dicha tarifa subiría un céntimo, hasta situarse en los 19 céntimos el metro cúbico. A esto habría que sumar un incremento del 80% del peaje por el uso de los canales del Postrasvase. La anterior subida del agua del Tajo se autorizó hace dos años, con aumentos superiores al 60%.
La Comisión Central de Explotación reunida bajo la presidencia de Marta Morén decide esta mañana un nuevo desembalse del Tajo a la cuenca del Segura superior a los 260 hectómetros para el segundo semestre del año. José Manuel Claver, presidente del Sindicato Central de Regantes, ha avanzado que pedirán 190 hectómetros en origen para las necesidades de julio a diciembre. Este volumen quedará en los pantanos de cabecera a disposición de los regadíos del Sureste y se irán desembalsando cada 15 días en función de las necesidades. El director de la Mancomunidad de Canales del Taibilla, Andrés Martínez Francés, apuntó por su parte que solicitará unos volúmenes máximos y mínimos que oscilarán entre los 75,8 y 69,6 hectómetros cúbicos en origen, según evolucione la demanda real de la población. Los consumos siguen disminuyendo en torno a un 6% anual debido a la crisis económica. Hay expectación por conocer la postura que adoptará el representante de la Junta de Castilla-La Mancha, ahora que gobierna María Dolores de Cospedal. No consta que haya sido nombrado un responsable directo para los recursos hídricos, por lo que podía asistir un funcionario o tal vez el asiento quede vacío.
Hasta ahora, el representante de Castilla-La Mancha se ha opuesto sistemáticamente a los envíos de agua a la cuenca del Segura, sobre todo para los regadíos, a la vez que ha solicitado insistentemente una información detallada sobre el destino final de los caudales para los abastecimientos, en la creencia de que parte de ese agua se dedica al riego de campos de golf.
Para los regadíos, dicha tarifa subiría un céntimo, hasta situarse en los 19 céntimos el metro cúbico. A esto habría que sumar un incremento del 80% del peaje por el uso de los canales del Postrasvase. La anterior subida del agua del Tajo se autorizó hace dos años, con aumentos superiores al 60%.
La Comisión Central de Explotación reunida bajo la presidencia de Marta Morén decide esta mañana un nuevo desembalse del Tajo a la cuenca del Segura superior a los 260 hectómetros para el segundo semestre del año. José Manuel Claver, presidente del Sindicato Central de Regantes, ha avanzado que pedirán 190 hectómetros en origen para las necesidades de julio a diciembre. Este volumen quedará en los pantanos de cabecera a disposición de los regadíos del Sureste y se irán desembalsando cada 15 días en función de las necesidades. El director de la Mancomunidad de Canales del Taibilla, Andrés Martínez Francés, apuntó por su parte que solicitará unos volúmenes máximos y mínimos que oscilarán entre los 75,8 y 69,6 hectómetros cúbicos en origen, según evolucione la demanda real de la población. Los consumos siguen disminuyendo en torno a un 6% anual debido a la crisis económica. Hay expectación por conocer la postura que adoptará el representante de la Junta de Castilla-La Mancha, ahora que gobierna María Dolores de Cospedal. No consta que haya sido nombrado un responsable directo para los recursos hídricos, por lo que podía asistir un funcionario o tal vez el asiento quede vacío.
Hasta ahora, el representante de Castilla-La Mancha se ha opuesto sistemáticamente a los envíos de agua a la cuenca del Segura, sobre todo para los regadíos, a la vez que ha solicitado insistentemente una información detallada sobre el destino final de los caudales para los abastecimientos, en la creencia de que parte de ese agua se dedica al riego de campos de golf.