Las 301 fuentes ornamentales de la ciudad de Barcelona disponen de un sistema de re circulación de agua que permite evitar el deterioro y alargar los periodos de renovación del líquido, lo que supone 72 más que hace cuatro años.
Este era uno de los objetivos del plan de actuaciones en las fuentes ornamentales y públicas de Barcelona del mandato municipal sobre el que el gobierno municipal ha rendido cuentas hoy en la última comisión plenaria de Sostenibilidad del mandato.
Según el Ayuntamiento, en este mandato se han invertido más de 30 millones de euros en las fuentes de Barcelona, 13 de los cuales procedían de fondos estatales y europeos, y se han realizado 223 actuaciones.
Otro de los objetivos era incrementar hasta el 20% el numero de fuentes ornamentales conectadas a recursos hídricos alternativos, como el agua freática, para reducir el consumo de agua potable.
El mandato se cierra con 83 fuentes ornamentales, entre ellas las de mayor consumo de agua como la de la Fuente Mágica de Montjuic, con abastecimiento de la red freática, lo que supone la mitad del consumo total.
Otras dos actuaciones destacadas, que suman casi 3 millones de euros, son las rehabilitaciones de los estanques del Parque de la España Industrial y del parque de Pegaso.
Además señala que se ha incrementado el consumo de agua del subsuelo para abastecer espacios municipales en más de un millón de metros cúbicos (27,85%) y se ha ampliado la red de agua freática de 38 kilómetros en 2007 a los 71 actuales.
El gobierno estima que la utilización del agua del freático juntamente a la reciente llegada del agua regenerada procedente de la estación depuradora del Prat mediante una cañería que cruza la Zona Franca hasta llegar en Montjuïc "significa que la ciudad no volverá a partir delante de nuevos episodios de sequía".