Endesa receives the authorization of the Junta to act in the Cordobilla dam

Fri, 11/02/2011

Córdoba

La Consejería de Medio Ambiente ha remitido a Endesa la autorización para el comienzo de las obras que pondrán fin a los problemas de acumulación de lodo en el embalse de Cordobilla, en el término municipal de Puente Genil. Según informó ayer la Delegación de Medio Ambiente en un comunicado, una vez recibida la solicitud de autorización remitida por Endesa, la compañía ya cuenta con el permiso correspondiente, en el que se incluye una serie de condiciones medioambientales que debe cumplir durante la ejecución del proyecto vinculadas a la conservación de la fauna que habita en el embalse, que está declarado como paraje natural. Estos condicionantes, según destaca la Delegación, "son compatibles con el proyecto presentado por Endesa y con el plazo de ejecución previsto inicialmente, que es de dos meses una vez que la empresa comience las obras". Además, Endesa debe remitir a Medio Ambiente una memoria con la planificación de dichas obras siete días antes de empezarlas.

Una de las condiciones que debe cumplir obligatoriamente Endesa es no instalar una plataforma de acceso para la maquinaria ni excavar material consolidado del lecho mediante maquinaria convencional. Además, deberá garantizar la máxima insonorización técnicamente viable de la maquinaria y las estructuras a instalar y realizar los trabajos con la mayor celeridad posible y siempre durante el día.

Durante la ejecución de los trabajos se realizará un seguimiento ambiental constante por parte del promotor con el objetivo de comprobar que éstos no alteren ni dañen ningún recurso natural del paraje. Aunque el plazo de ejecución de los trabajos es de dos meses, la autorización concedida tiene vigencia hasta el 28 de febrero del 2012.

El embalse Cordobilla fue construido en el año 1952 por Sevillana de Electricidad para aprovechamiento hidroeléctrico con una capacidad de 35 hectómetros cúbicos. A lo largo de los años ha ido sufriendo una colmatación progresiva, la cual se ha agravado en los últimos años debido en gran parte a los cambios de uso de suelo, sobre todo un notable incremento de superficie de olivar en la cuenca aportadora.