The Supreme supports irrigators
Fri, 31/12/2010
Desde la temporada 2000-2001 Riegos de Levante y la Generalitat han venido manteniendo una pugna en los juzgados, como consecuencia de la decisión del Consell de prohibir la caza en los embalses reguladores de El Hondo.
Los regantes consideraron entonces que se había vulnerado sus derechos. Posteriormente la administración autonómica compensó dicha prohibición incluyendo unos 200.000 euros más en los convenios de colaboración que se han venido firmando hasta este mismo año, en el que la Generalitat lo anuló de manera unilateral.
La demanda interpuesta en su momento por la comunidad de regantes siguió su trámite administrativo, y pese a los recursos presentados por la Generalitat es la cuarta ocasión en la que los tribunales dan la razón a los regantes en sus reivindicaciones.
En su resolución, el Tribunal Supremo fija la indemnización que el Consell deberá abonar a Riegos de Levante en 85.000 euros más los intereses por todo el tiempo en el que la comunidad ha dejado de percibir las cantidades que ingresaba por la caza.
Para el portavoz de Riegos de Levante, Ángel Urbina, «este sentencia, de la que tuvimos conocimiento esta misma semana, confirma lo que siempre hemos venido defendiendo, y que no es otra cosa que a los regantes se les privó de los usos tradicionales que ha tenido El Hondo desde siempre». El siguiente paso de los agricultores ahora es reclamar a la Generalitat los 200.000 euros que antes se incluían en el convenio por no cazar en el paraje. «Tenemos muy claro que si necesario recurriremos a los tribunales para que el Consell nos pague la misma cantidad de antes. Solo que ahora sabiendo que nos corresponde tal en función de la decisión que ha adoptado el Tribunal Supremo».
Urbina recordó que la comunidad ha tenido que incrementar el precio del agua -seis euros por cada hora del Hondo y un céntimo por cada metro cúbico del trasvase-, con el fin de tratar de suplir los cerca de 600.000 euros que dejará de ingresar al no haber firmado este año con la Conselleria de Medio Ambiente el convenio para el paraje de El Hondo.
«Los regantes tienen que hacer frente a su mantenimiento ante la dejadez de la Generalitat», insistió el portavoz de Riegos de Levante.
Los regantes consideraron entonces que se había vulnerado sus derechos. Posteriormente la administración autonómica compensó dicha prohibición incluyendo unos 200.000 euros más en los convenios de colaboración que se han venido firmando hasta este mismo año, en el que la Generalitat lo anuló de manera unilateral.
La demanda interpuesta en su momento por la comunidad de regantes siguió su trámite administrativo, y pese a los recursos presentados por la Generalitat es la cuarta ocasión en la que los tribunales dan la razón a los regantes en sus reivindicaciones.
En su resolución, el Tribunal Supremo fija la indemnización que el Consell deberá abonar a Riegos de Levante en 85.000 euros más los intereses por todo el tiempo en el que la comunidad ha dejado de percibir las cantidades que ingresaba por la caza.
Para el portavoz de Riegos de Levante, Ángel Urbina, «este sentencia, de la que tuvimos conocimiento esta misma semana, confirma lo que siempre hemos venido defendiendo, y que no es otra cosa que a los regantes se les privó de los usos tradicionales que ha tenido El Hondo desde siempre». El siguiente paso de los agricultores ahora es reclamar a la Generalitat los 200.000 euros que antes se incluían en el convenio por no cazar en el paraje. «Tenemos muy claro que si necesario recurriremos a los tribunales para que el Consell nos pague la misma cantidad de antes. Solo que ahora sabiendo que nos corresponde tal en función de la decisión que ha adoptado el Tribunal Supremo».
Urbina recordó que la comunidad ha tenido que incrementar el precio del agua -seis euros por cada hora del Hondo y un céntimo por cada metro cúbico del trasvase-, con el fin de tratar de suplir los cerca de 600.000 euros que dejará de ingresar al no haber firmado este año con la Conselleria de Medio Ambiente el convenio para el paraje de El Hondo.
«Los regantes tienen que hacer frente a su mantenimiento ante la dejadez de la Generalitat», insistió el portavoz de Riegos de Levante.