La Estación Automática de Alerta (EAA) del río Guadaíra lleva inoperativa desde junio, como se puede comprobar en los informes que la Consejería de Medio Ambiente cuelga en su web. Los resultados de los análisis que realiza esta EAA llevan sin aparecer en los informes desde mayo. En junio, julio, agosto, septiembre y octubre la estación de control figuraba como "no operativa por actos vandálicos".

La instalación, que está integrada en el Sistema Automático de Información de Calidad de las Aguas (Saica), depende de la Agencia Andaluza del Agua. Este organismo reconoce que está sufriendo ataques y que, cada vez que arregla esta EAA, vuelve a quedar inoperativa por robos o actos de vandalismo. Según la agencia, se trata de un problema de "seguridad ciudadana" que se ha comunicado a la Guardia Civil. Además de la estación inoperativa, la agencia cuenta con otra de control en el arroyo del Cuerno, en Morón (Sevilla).

El último informe disponible de esta estación (mayo) reflejaba que las aguas del Guadaíra no cumplían con las condiciones de calidad mínimas que se exigen en el plan Hidrológico del Guadalquivir. No se llegaba al 100% del cumplimiento de los mínimos en temperatura, conductividad y oxígeno disuelto. La estación permite recoger muestras cuando se detecta un vertido.

Uno de los puntos calientes de la cuenca del Guadalquivir es el Guadaíra. Ecologistas en Acción acaba de denunciar ante la Guardia Civil un nuevo vertido de sosa cáustica en el río a la altura. Según esta asociación, "nuevamente, empresarios de la industria aceitunera han aprovechado las lluvias para desprenderse impunemente de sus residuos". Además, el 26 de noviembre la Guardia Civil informó de la imputación de tres personas por haber vertido supuestamente aderezo de aceituna al río.