Los casi constantes vertidos que de un tiempo a esta parte viene sufriendo el río de O Con han obligado a que Augas de Galicia intensifique su control sobre este cauce fluvial. Ayer mismo, una técnico recogía muestras en el entorno del conjunto monumental de Vista Alegre, y confirmaba que desde hace una temporada las analíticas realizadas en este tramo del río vilagarciano son "prácticamente diarias".

En los últimos meses los vecinos de Vilagarcía han debido sufrir en numerosas ocasiones los malos olores provocados por distintos vertidos de aguas residuales, habitualmente causados por problemas de funcionamiento en la red de saneamiento.

La concejala responsable del área municipal de limpieza, Tania García, reiteraba ayer mismo su total implicación para conseguir subsanar cuanto antes las deficiencias que demasiado frecuentemente están provocando episodios contaminantes en las proximidades del parque de A Xunqueira.

La edil vilagarciana indicaba que el Concello cuenta ya con los resultados del estudio de la red de saneamiento realizado por técnicos para detectar las deficiencias existentes en la red de saneamiento local.

Con los puntos problemáticos ya localizados, el gobierno local intenta ahora habilitar las partidas económicas necesarias para proceder cuanto antes a la reparación de los fallos e, incluso, a la instalación de algún sistema de saneamiento alternativo más eficaz que el que actualmente está en funcionamiento.

En su reciente inspección de la red de saneamiento local los técnicos se toparon con que una parte de los problemas de obstrucción que sufren las bombas de achique de la red son debidas a un uso inconveniente de la misma por parte de los vecinos del municipio.

Así, los operarios se encontraban en las últimas semanas con tablones atascados en los conductos de residuales e, incluso, con dos pollos muertos.

Con los distintos proyectos incluidos en el programa Luz Salgada, así como en el Plan de humanización del entorno del río de O Con, en ejecución o a punto de estarlo,la necesidad de solventar de una vez por todas las deficiencias de saneamiento y terminar con los aportes residuales, que afectan al medio ambiente y molestan a los vecinos con su olor, se vuelve especialmente urgente.