Thousands of fish die after drying up a drain in the fen d' Almardà

Tue, 31/08/2010

Levante

Hace una semana miles de peces aparecían muertos en el marjal dels Moros. Ayer, Acció Ecologista Agró volvía a disparar las alarmas tras detectarse una nueva mortandad masiva de peces en la otra gran zona húmeda de Sagunt, el marjal de Almardà. El hecho ha tenido lugar en la parte sur del LIC y ZEPA de la Marjal de Almenara. El origen de estos hechos es, según la formación ecologista, el drenaje impulsado por los regantes de las partida de l'Om Negre y Cantarrana para preparar los terrenos para el cultivo de la próxima primavera. Los peces muertos han aparecido justo al lado de la Reserva de Fauna Silvestre que gestiona Acció Ecologista-Agró y muy cerca de las Microrreservas de Flora y de la Reserva de Samaruc de las Turberas de Almardá. Según los ecologistas, estos bombeos de agua provocaron que el pasado jueves aparecieran secos dos ramales de la acequia de Corella, dejando sin agua y sin oxigeno a miles de ejemplares de peces, desde alevines de lisa y gambusia a ejemplares adultos de gran tamaño de lisas, carpas y alguna anguila desorientada. La formación ecologista descarta que los hechos hayan sido intencionados y los achaca a una «descuido», al carecer la turbina de un sensor de niveles. En cualquier caso, la rapidez con que se ha producido la desecación ha agravado la mortandad pues ha impedido a la fauna piscícola refugiarse en espacios como la Font de Quart o la Acequia de Montiver.

Tras detectarse el fenómeno, conocido técnicamente como anoxia, los guardias rurales de Sagunt ordenaron la paralización inmediata de las turbinas. Esto ha permitido que paulatinamente la zona esté volviendo a recuperar sus niveles de agua, aunque para miles de ejemplares la restitución del agua ya ha llegado demasiado tarde. Descomposición Según advierten desde Acció Ecologista Agró, desastres como este tienen importantes repercusiones ambientales. En este sentido, destacan que la llegada de aves carroñeras no ha impedido que la zona se haya visto gravemente afectada por la descomposición de los peces muertos provocando la putrefacción de las aguas. Esta circunstancia se ha visto acrecentada por el cierre de la gola de desagüe al mar por efecto del oleaje marino.

La consecuencia de todo esto ha sido que, como consecuencia del deterioro del sistema de control hidrológico en esta zona del marjal toda este agua putrefacta ha ido circulando por el humedal hasta alcanzar en buena parte dos de los espacios más importantes desde el punto de vista medioambiental: las microreservas de flora y las reservas de samaruc que gestiona la Generalitat y las 20 hectáreas que administra Agró junto a la finca de Penya.

Para Acció Ecologista Agró, estos problemas se solucionarían mediante el consenso de las actuaciones con los agricultores, de forma que se priorice el uso para la fauna durante el otoño y el invierno. Al mismo tiempo, consideran urgente que se reconstruya el sistema de control hídrico en esta zona de marjal, un objetivo que a su juicio pasa por la implicación de las administraciones públicas.

Acció Ecologista Agró aboga porque la Confederación Hidrográfica del Júcar y la Conselleria de Medio Ambiente colaboren en la reconstrucción de la infraestructura hídrica del marjal de Almardà. En este sentido, recuerdan que existe una dotación de unos 400.000 euros para proseguir las actuaciones en la zona sur del LIC y la Finca de Penya, una cuantía que los ecologistas consideran que debería destinarse a este fin. Por ello, consideran necesario que se zanjen las polémicas entre Sagunt y el CHJ sobre la finca de Penya que puedan poner en peligro la inversión.