El director de la Agència Catalana de l'Aigua, Manel Hernández, defendió ayer en Mollerussa ante los regantes del Ebro la necesidad de incrementar los caudales ambientales de los ríos más allá del criterio genérico de un 10% del caudal medio histórico de cada tramo. De hecho, en distintos documentos la ACA plantea destinar a usos ecológicos un tercio de esa media, lo que supondría triplicar la asignación actual. Hernández dijo que esta propuesta fue remitida, junto al acuerdo del Parlament que avala los estudios de la Agència, a la CHE y al ministerio en octubre y que la defenderán en las negociaciones sobre el nuevo Plan Hidrológico del Ebro. "Habrá que hacer un encaje de intereses, que pueden ser contrapuestos", añadió. En este sentido, dijo que en lo que afecta "al ámbito catalán del Ebro pedimos que nos dejen negociar". Afirmó que la obligación de la Generalitat es defender su postura y que esto no supone ninguna intromisión en la gestión hídrica del Ebro, a cargo del ministerio. Indicó que el lunes se reúne de nuevo con sus homógolos aragoneses, tras la ratificación, el martes, de que Aragón acudirá al tribunal si la ACA no retira su plan de gestión de las cuencas internas. El presidente de la Federación de Regantes del Ebro, César Trillo, consideró la propuesta de la ACA excesiva y dijo que "en años de sequía, los números no cuadran. Como en el caso de Aragón, cuyo Estatuto reserva a la comunidad 6.500 hectómetros cúbicos de agua, en este caso también digo que no puede ser".Asimismo, defendió la unidad de cuenca y dijo que cualquier decisión afecta a todos los tramos del río.

El director de la ACA y su adjunto, Gabriel Borràs, visitaron las obras para cuatro nuevas compuertas en el canal d'Urgell, que subvenciona laAgència, y que permitirán ahorrar al cabo del año 20 hectómetros cúbicos de agua.