El rector de la Universidad Politécnica de Valencia, Juan Juliá, y el presidente de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias, SEIASA de la Meseta Sur, Francisco Rodríguez Mulero, firmaron hoy el convenio para la renovación por dos años de la "Cátedra Seiasa de la Meseta Sur", creada en 2008 para la investigación y aplicación de técnicas de uso eficiente del agua en regadíos, según informó la institución académica en un comunicado.

Al acto asistieron representantes de la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunidad Valenciana (Fecoreva), así como de la Federación de Entidades de Riego de la Provincia de Alicante.

El acuerdo rubricado hoy ratifica el objetivo original de la Cátedra en la "promoción, divulgación, desarrollo y aplicación de técnicas para la utilización del agua de riego eficientemente", haciendo hincapié en la "implantación de nuevas tecnologías de ahorro de agua y en los modelos de evaluación, control y gestión de infraestructuras de riego", así como en "todas las actividades de I+D+I que se puedan plantear o considerar".

El presidente de SEIASA calificó de "muy fructífera" la labor de la Cátedra, en sus dos primeros años de andadura, y que se ha convertido en un instrumento "de gran utilidad" para las comunidades de regantes de la Comunitat Valenciana. Por su parte, Juliá agradeció "la apuesta de SEIASA por esta Cátedra modélica de lo que queremos que sean las Cátedras de Empresa de la UPV".

En estos dos primeros años la Cátedra, con sede en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y del Medio Natural, y dirigida por Pedro Beltrán, profesor de la UPV experto en temas de optimización de riego y depuración de aguas, ha centrado su actividad no sólo en el ámbito de la investigación sino también en la formación, a través de la organización de cursos, jornadas y actividades docentes de toda índole para la formación general y específica tanto de los técnicos como gestores de las Comunidades de Regantes, según la misma fuente.

SISTEMA DE INFORMACIÓN GEOGRÁFICA

En el ámbito de la investigación, se han llevado a cabo trabajos de evaluación de instalaciones de riego existentes desde el punto de vista de funcionamiento, tanto hidráulico como telemático, así como ensayos de calidad y validación de los distintos elementos que constituyen las infraestructuras de riego. También se ha desarrollado un Sistema de Información Geográfica para la gestión de las Infraestructuras de riego existentes, así como para la de las propias Comunidades de Regantes.

Además de la realización de trabajos y estudios específicos, propuestas de clasificación de Embalses y sus Planes de Emergencia, también se ha promovido la realización de prácticas de empresa por parte de los alumnos de la Escuela, tanto para las obras de riego en ejecución, como para el control y gestión de las infraestructuras existentes.

Fruto de la labor de investigación desarrollada desde la creación de la Cátedra es la aplicación de una nueva tecnología de membranas que permite la regeneración y reutilización de aguas depuradas en varias obras de modernización de regadíos ejecutadas en la Vega Baja del Segura (Alicante) por SEIASA de la Meseta Sur, en base al Real Decreto 1620/2007, de 7 de diciembre, que establece el régimen jurídico de la reutilización de este tipo de aguas para el riego.

Por otra parte, el diseño e instalación de un novedoso sistema de filtrado ha permitido "importantes avances" en la lucha contra la proliferación del mejillón cebra, causante de "graves perjuicios" económicos y medioambientales, gracias a la instalación de dispositivos capaces de detener la propagación de sus larvas.

La aplicación de éstas y otras tecnologías, implantadas por medio de las obras de modernización de regadíos ejecutadas por el MARM a través de SEIASA de la Meseta Sur, "permitirá situar a los regadíos de la Comunitat Valenciana a la vanguardia de España". En la actualidad, la modernización se traduce en un ahorro de agua calculado en 114,13 hectómetros cúbicos al año en la Comunitat Valenciana y en un aumento de la productividad de las explotaciones que puede alcanzar hasta un 25%.

Estas infraestructuras contribuyen además a evitar la contaminación de acuíferos y terrenos por nitratos al disminuir la cantidad de fertilizantes aplicados gracias a la distribución controlada del abono a través del agua de riego. Se fundamenta en la obtención de energía eléctrica mediante la instalación de miniturbinas para el telecontrol de hidrantes en los regadíos.

Así se aprovecha la presión y energía cinética del agua de la red de regadío para obtener la tensión de alimentación de los hidrantes así como de las estaciones de telecontrol, según explicó el profesor Pedro Beltrán.

Así mismo, se estudia la posibilidad de obtener energía limpia mediante la instalación de paneles fotovoltaicos o de instalaciones mixtas fotovoltaicas y minieólicas para atender las necesidades eléctricas de los regadíos en las comunidades de regantes. Las instalaciones fotovoltaicas sirven para cubrir los embalses y depósitos, evitando la evaporación y la formación de algas, recalcó el responsable de la Cátedra.