The Provincial paralyzes Gobela urgent works to protect the stickleback
Wed, 09/06/2010
Los sobresaltos no cesan para los afectados por las inundaciones del río Gobela. Las obras urgentes que debían finalizar en junio, después de iniciarse con retraso, se demorarán aún varios meses. El Departamento foral de Agricultura ha ordenado la paralización de los trabajos para proteger al pez espinoso, ahora y hasta septiembre en época de cría. La Diputación acusa a la Agencia Vasca del Agua (Ura) de incumplir el plan de gestión aprobado para salvaguardar esta rara especie piscícola, que sólo habita en tres ríos vizcaínos y uno guipuzcoano.
Según explicó ayer un portavoz de la Diputación, este organismo presentó a Ura, en julio de 2009, las medidas correctoras previstas en el plan de gestión del pez espinoso. «Las opciones eran dos: no actuar en el período crítico de cría -de abril a agosto- o retirar el pez del cauce, hacer los trabajos y reintroducirlo después». Pero el inicio del proyecto gubernamental se retrasó unos meses más de lo anunciado, hasta febrero de 2010, y las tareas afectan ahora de lleno a la época reproductiva de la especie.
Actualmente, a la Agencia Vasca del Agua le queda la única posibilidad de enviar la justificación de la necesidad de demoler los puentes para reanudar las obras. Según el portavoz de la Diputación, sin este trámite habría que esperar a septiembre para reanudar los trabajos. La paralización del proyecto afecta a la demolición de las pasarelas de Salsidu y Jolaseta, «aunque hay otros tramos en los que se puede continuar». El plan de obra contemplaba el derribo del puente de Salsidu en cuestión de días. La finalidad era construir otro más largo para evitar ese efecto presa que, durante las crecidas, se produce al acumularse los objetos arrastrados por la corriente. La actuación iba a finalizar en junio. Ese punto es una de las zonas de cría del pez espinoso. Según los vecinos, se ha retirado la maquinaria de obra de la zona.
Según explicó ayer un portavoz de la Diputación, este organismo presentó a Ura, en julio de 2009, las medidas correctoras previstas en el plan de gestión del pez espinoso. «Las opciones eran dos: no actuar en el período crítico de cría -de abril a agosto- o retirar el pez del cauce, hacer los trabajos y reintroducirlo después». Pero el inicio del proyecto gubernamental se retrasó unos meses más de lo anunciado, hasta febrero de 2010, y las tareas afectan ahora de lleno a la época reproductiva de la especie.
Actualmente, a la Agencia Vasca del Agua le queda la única posibilidad de enviar la justificación de la necesidad de demoler los puentes para reanudar las obras. Según el portavoz de la Diputación, sin este trámite habría que esperar a septiembre para reanudar los trabajos. La paralización del proyecto afecta a la demolición de las pasarelas de Salsidu y Jolaseta, «aunque hay otros tramos en los que se puede continuar». El plan de obra contemplaba el derribo del puente de Salsidu en cuestión de días. La finalidad era construir otro más largo para evitar ese efecto presa que, durante las crecidas, se produce al acumularse los objetos arrastrados por la corriente. La actuación iba a finalizar en junio. Ese punto es una de las zonas de cría del pez espinoso. Según los vecinos, se ha retirado la maquinaria de obra de la zona.