Desde que varios ayuntamientos de la provincia de Alicante empezaron a recibir agua desalada (de las dos plantas de la capital y de la que existe en San Pedro del Pinatar, que introduce caudal en la Mancomunidad del Taibilla), el precio del metro cúbico del líquido elemento no ha dejado de subir, lo que supone un nuevo fracaso del Programa AGUA impulsado por el Ministerio de Medio Ambiente, que preveía más agua, de mayor calidad y a un precio inferior. El presidente regional de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, advirtió hace unos días del incremento exponencial en la tarifa que supone el recurso al agua desalada. Una circunstancia que los consistorios alicantinos que forman parte de la Mancomunidad del Taibilla ya han empezado a experimentar. En los últimos años, la Mancomunidad ha propuesto (con el voto en contra de los populares) sucesivas revisiones al alza de la tarifa. En estos momentos, los habitantes de Alicante capital ya pagan la tarifa más elevada de toda España. Según un estudio de la asociación Facua-Consumidores en Acción, una familia media con dos hijos paga en Alicante una factura de 33,7 euros, por un consumo medio de 10 metros cúbicos al mes. Una cifra que duplica con creces la media española, situada en 12,98 euros. La segunda tarifa más cara es la de la ciudad de Murcia, con 24,96 euros de media, por encima de municipios insulares como Santa Cruz de Tenerife (23,13 euros) o Palma de Mallorca (13,65 euros). Aún más barata todavía es el agua en Valencia (11,14 euros) o en Castellón (6,49 euros). En comparación, los consumidores alicantinos pagan el triple que los valencianos y más del doble de la media española. La diferencia es aún más abismal para un consumo mensual de 20 metros cúbicos. En este caso, siempre el mismo informe, una familia alicantina paga 51,89 euros, frente a los 23,83 euros de la media española. También tienen tarifas elevadas (pero mucho más económicas que en Alicante) Murcia (38,84 euros), Granada (33,67 euros) Santa Cruz de Tenerife (32,11) y Cádiz (30,05). La empresa pública municipal Aguas de Alicante ha eludido facilitar a ABC cualquier información sobre sus tarifas y sobre el porcentaje de agua desalada que facilita a los usuarios. El suministro hídrico de la capital alicantina ya era de los más caros de España cuando empezó a introducirse agua desalada en la red. En los últimos cuatro años, desde que empezó a consumirse agua desalada, la factura de los alicantinos no ha cesado de crecer. Si en 2005 se pagaban de media unos 27 euros para un consumo de 20 metros cúbicos, el último estudio de Facua arroja una factura media de 33,71 euros para el mismo consumo. Es decir, en cuatro años la factura se ha incrementado en casi siete euros (cerca de un 25%). En el último año, la subida ha rondado el 5,5%. Las perspectivas tampoco son mejores para los agricultores. Tal como han denunciado el agua desalada para el riego costará como mínimo 42 céntimos por metro cúbico, frente a los 9 céntimos del Tajo-Segura. Un operario extrae agua de una desaladora.