Los gobiernos de Murcia y la Comunidad Valenciana reclamaron ayer al presidente del Ejecutivo de la nación, José Luis Rodríguez Zapatero, que convoque y reúna una conferencia de presidentes en la que se trate como tema monográfico y «urgente» el agua, ya que «no se pueden estar haciendo estatutos a la carta».
Igualmente, advirtieron que no admitirán fecha de caducidad al trasvase Tajo-Segura como se contempla en el Estatuto de Castilla-La Mancha, ni reserva estratégica de 6.000 hectómetros cúbicos.
Así lo anunciaron ayer los consejeros de Agricultura y Agua de Murcia, Antonio Cerdá; y el de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda de la Comunidad Valenciana, Juan Cotino, tras mantener una reunión en la sede de este departamento murciano para fijar los principios y ejes básicos que se analizarán en un encuentro que se producirá «en breve» entre los presidentes de ambas comunidades, Ramón Luis Valcárcel y Francisco Camps.
Fue el pasado jueves cuando el consejero de la Comunidad Valenciana acordó en pleno solicitar a Zapatero que convocara una conferencia de presidentes autonómicos para que «se aborde en profundidad la problemática del agua de todo el territorio nacional, ya que fue un punto no debatido en las dos últimas conferencias» y con el fin de que pueda «alcanzarse un acuerdo de Estado que tenga como eje el Plan Hidrológico Nacional (PHN) de 2001».
En este sentido, Cerdá comenzó su intervención poniendo de manifiesto el «caos hidráulico» que vive España actualmente, en donde la planificación hidrológica que había «ha desaparecido y se derogó, no habiendo ninguna otra alternativa».
De este modo, tanto Cerdá como el consejero valenciano reclamaron solidaridad en torno a la cuestión hídrica, que implique «buscar consensos y evitar enfrentamientos» entendiendo el agua como un «bien escaso», argumentó Cotino, quien aseguró que en España «hay agua suficiente si se utiliza de forma racional, como se hace en Murcia y Valencia, y si se trasvasa desde los lugares donde existe a donde no existe».
Tras lo que enfatizó que lo que tendría que haber hecho Zapatero es «tener una autoridad sobre el agua en todas las regiones españolas». «Es necesario que haya tiempo para el agua, para el futuro, y que la gente tenga seguridad y pueda invertir sabiendo lo que pasará el día de mañana», expresó Cotino. Y es que, argumentó, el agua «es del conjunto de los españoles, un bien común y como tal, tiene que aplicarse el principio de solidaridad para que tengamos el agua suficiente».
También se refirió a la gestión realizada por el presidente del Gobierno de la nación, que en unos meses cumplirá seis años de mandato, de la que comentó que la lectura final que hace la sociedad española es que «no hay agua ni trabajo, además de que la economía funciona mal»; razón por la que consideró que «los resultados globales del balance son más negativos que positivos y el resultado último es de enfrentamientos y estatutos debatiéndose».
En esta misma línea, Cerdá subrayó que los gobiernos de ambas comunidades «se mantendrán inquebrantables ante la posible votación» respecto al Estatuto de Castilla-La Mancha, tras lo que puntualizó que los diputados del PP de Murcia y Valencia «seguirán la misma indicación que lleven sus gobiernos». En este punto, Cotino mostró su deseo de saber lo que contestarían a esta cuestión la vicepresidenta primera María Teresa Fernández de la Vega y la secretaria de Organización del Partido Socialista, Leire Pajín, porque hasta el momento, indicó, «lo que dice De la Vega es que parece que le ha dicho al presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, que está resuelto».

Protección del trasvase

De otro lado, el portavoz del Grupo Parlamentario Popular en Murcia, Juan Carlos Ruiz, anunció ayer que la Asamblea Regional va a aprobar la semana que viene un proyecto de ley de protección del trasvase del Tajo al Segura, que insta al Gobierno central para que lo tramite en el Congreso de los Diputados por el procedimiento de urgencia y se debata, así, en la primera sesión del próximo periodo de sesiones.
Ruiz explicó, en rueda de prensa, que el PP va a aprobar este proyecto de ley en la Asamblea después de estudiar todas las posibilidades para garantizar la continuidad de acueducto Tajo-Segura y consideró que es la forma «más rápida», ya que, temió, el PSOE «está intentando buscar apoyos de los nacionalistas» para cerrar el trasvase.