Un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios, OCU, sitúa a Pontevedra como la capital gallega en la que la factura media por el consumo de agua es más cara.La OCU realizó un extenso informe sobre la calidad y precio del agua en España que les llevó a recoger muestras de agua en 60 localidades y a tomar datos sobre precios en 64 ciudades lo que les permitió constatar que existen grandes diferencias de tarifas. Así,la ciudad en la que el consumo de agua está más caro es, según este trabajo, Murcia,en donde la factura media alcanza los 400 anuales y poblaciones como Guadalajara o Palencia son de las más baratas con recibos medios por año de 134 y 114 euros respectivamente.

Centrando el estudio en las ciudades gallegas. Pontevedra es la que muestra una factura de agua más cara, con un recibo medio anual de 228 euros. Para situar a la ciudad del Lérez en el contexto nacional se puede decir que tan sólo se encuentra en la zona media de la tabla de estas 64 ciudades analizadas y que el precio medio del agua se sitúa un euro por encima de la media nacional. Los españoles pagan unos 227 euros de agua al año según este trabajo.Todos los cálculos se han hecho en base a un consumo medio anual de unos 175 metros cúbicos, que es lo que la OCU estima como medio para una familia media,incluyendo el IVA y otras tasas. Inmediatamente por debajo de la capital pontevedresa se sitúa Vigo. Con 225 euros al año de media para pagar el suministro es la segunda ciudad gallega de este ranking con el precio más alto.Le siguen Lugo,con 182 euros al año; A Coruña, con 175, y Orense, la más barata con 153. A este respecto, la OCU señala que el precio del agua se ha incrementado un 28% en toda España con respecto a 2005 y que siguen existiendo enormes diferencias entre las distintas localidades.

Además de realizar un análisis de los distintos sistemas de facturación que utilizan los ayuntamientos, la OCU defiende un precio del agua asequible para quien haga un uso razonable de elle y más alto a medida que el gasto se dispara. A juicio de la Organización de Consumidores y Usuarios, esto se logra con la facturación por bloques de consumo, siempre que se cumplan varios requisitos: que la factura sea simple y conocida por la población, que los intervalos de consumo sean acordes con la política de ahorro y que incluya medidas correctoras que tengan en cuenta el número de habitantes de la vivienda y el nivel de ingresos. A juicio de la OCU esta estructura de tarifas debe ir acompañada de una moderación de los costes fijos, de lo contrario, si son muy elevados, anulan el efecto deseado de la progresividad. Precisamente, con respecto al precio del agua, el pleno de la corporación municipal acaba de instar a la Xunta de Galicia a retirar el anteproyecto de Lei de Augas,al considerar que tiene como única finalidad "una suba desproporcionada e injusta de la tributación indirecta". La propuesta fue aprobada por el gobierno bipartito y contó con el voto en contra del PP. El Concello de Pontevedra argumenta que los ciudadanos sufrirán, con esta ley, un incremento en el recibo del agua de hasta un 300%. La subida sería más cuantiosa cuanto menos personas vivan en la vivienda, es decir que un ciudadano que viva sólo sufrirá un incremento en el recibo muy superior a una familia de varios miembros, que se ven beneficiadas por una bonificación.

El proyecto de Lei de Augas de Galicia viene a sustituir el actual canon del saneamiento,que aglutina en un recibo las tasas por agua, saneamiento y recogida de basuras. Con la nueva normativa, los concellos serán los que recauden el canon del agua, pero el dinero va directamente a las arcas de la Xunta. El anteproyecto del canon del agua que elabora la Xunta de Galicia, sustituirá el actual cobro del saneamiento. Aunque cambie la normativa (según el gobierno local) la ley, en esencia, es la misma. De hecho, la única modificación son las tarifas. En el actual canon se impone una tarifa mínima de 1,5 euros, a la que habrá que sumar una parte variable en función tanto del consumo, como hasta ahora, como del número de personas que residen en la vivienda.Esta cifra la determina el Padrón de habitantes.

Como ejemplos, en una vivienda en la que residan tres personas, con un consumo medio de unos 30 metros cúbicos de agua al mes y que paga unos 6 euros (restando saneamiento y basura), con la nueva medida pasará a pagar más de 15 euros. Una persona que vive sola paga por agua 2,5 euros, mientras que con la nueva ley pasará a pagar unos 11 euros.La subida del recibo del agua con la nueva ley afecta igualmente a los negocios. Con respeto a los establecimientos comerciales y hosteleros, la cuota varía si los consumos son inferiores a los 2.000 metros cúbicos de consumo, mientras que antes era anterior a 3.000 metros cúbicos. Si se aprueba el nuevo canon de saneamiento de la Xunta, el precio del agua en la ciudad subiría de forma "exagerada", según el gobierno local, que pone varios ejemplos. En el caso de los locales de hostelería, comercios y oficinas, las subidas, por término medio, también rondan el 300% en el caso de locales que utilicen poca agua (oficinas, comercios, pequeños bares, con un consumo anual a 2.000 metros cúbicos); y supera el 300% en los casos de consumo superior al anterior (colegios, restaurantes grandes, lavanderías, lavados de vehículos...). Sin embargo, para los consumos superiores a los 3.000 metros cúbicos,el incremento del recibo se sitúa en el 144%. El concejal de Facenda, Raimundo González Carballo, subraya que este incremento no es del Concello, sino de la Xunta. y se expone de forma particular el caso de Ence,que tiene un consumo anual de más de 14 millones de metros cúbicos de agua,con lo que le correspondería pagar un canon anual de unos 5 millones.