The Ministery of Environment will limit the extraction of water from overexploited aquifers
Fri, 30/10/2009
Los usuarios de acuíferos sobreexplotados no podrán hacer uso de más de 7.000 metros cúbicos. Así lo ha recordado la consejera de Medio Ambiente, Cinta Castillo, durante la inauguración de las jornadas Los usuarios y la protección y recuperación de las masas de agua subterránea celebradas en El Ejido.
Con la presencia de cerca de un centenar de participantes, la cita sirvió para analizar los pormenores de la Ley de Aguas de Andalucía va a garantizar la protección de los acuíferos de la Comunidad Autónoma. Durante su intervención, Castillo señaló el importante papel que la futura normativa va a suponer en la gestión de las aguas subterráneas, y subrayó cómo el texto incide especialmente en la protección de los acuíferos y en su vigilancia y control para evitar la sobreexplotación, puesto que se trata de un recurso muy necesario y que se encuentra cada vez más escaso, sobre todo en nuestra provincia.
Por primera vez, la administración hidráulica va a exigir a los usuarios la necesidad de obtener autorizaciones para extraer agua de pozos por debajo de los 7.000 metros cúbicos cuando la masa de agua esté declarada en riesgo de sobreexplotación. Gracias a esta nueva reglamentación, según resalta Medio Ambiente, las captaciones que anteriormente sólo necesitaban una notificación tendrán que ser autorizadas y, de esta forma, se evitarán extracciones por encima de las posibilidades de acuíferos en peligro, lo que beneficiará a los usuarios del futuro.
Por otra parte, la consejera señaló los beneficios que supondrá la creación de los nuevos modelos de gestión de los acuíferos recogidos en la Ley. Concretamente, el texto legislativo pone en valor la experiencia acumulada en la gestión de las aguas superficiales a través de la figura de las comunidades de regantes y apuesta por extender ese modelo también a las aguas subterráneas.
Organizadas por la Asociación Española de Usuarios de Aguas Subterráneas y la Junta Central de Usuarios del Acuífero del Poniente Almeriense, estas jornadas cuentan con la colaboración de la Consejería de Medio Ambiente, a través de la Agencia Andaluza del Agua. Está dirigido a los usuarios, sobre todo productores agrarios, en una zona tan agrícola y condicionada por los recursos hídricos, como es la provincia.
Con la presencia de cerca de un centenar de participantes, la cita sirvió para analizar los pormenores de la Ley de Aguas de Andalucía va a garantizar la protección de los acuíferos de la Comunidad Autónoma. Durante su intervención, Castillo señaló el importante papel que la futura normativa va a suponer en la gestión de las aguas subterráneas, y subrayó cómo el texto incide especialmente en la protección de los acuíferos y en su vigilancia y control para evitar la sobreexplotación, puesto que se trata de un recurso muy necesario y que se encuentra cada vez más escaso, sobre todo en nuestra provincia.
Por primera vez, la administración hidráulica va a exigir a los usuarios la necesidad de obtener autorizaciones para extraer agua de pozos por debajo de los 7.000 metros cúbicos cuando la masa de agua esté declarada en riesgo de sobreexplotación. Gracias a esta nueva reglamentación, según resalta Medio Ambiente, las captaciones que anteriormente sólo necesitaban una notificación tendrán que ser autorizadas y, de esta forma, se evitarán extracciones por encima de las posibilidades de acuíferos en peligro, lo que beneficiará a los usuarios del futuro.
Por otra parte, la consejera señaló los beneficios que supondrá la creación de los nuevos modelos de gestión de los acuíferos recogidos en la Ley. Concretamente, el texto legislativo pone en valor la experiencia acumulada en la gestión de las aguas superficiales a través de la figura de las comunidades de regantes y apuesta por extender ese modelo también a las aguas subterráneas.
Organizadas por la Asociación Española de Usuarios de Aguas Subterráneas y la Junta Central de Usuarios del Acuífero del Poniente Almeriense, estas jornadas cuentan con la colaboración de la Consejería de Medio Ambiente, a través de la Agencia Andaluza del Agua. Está dirigido a los usuarios, sobre todo productores agrarios, en una zona tan agrícola y condicionada por los recursos hídricos, como es la provincia.