From Valladolid to Mongolia to explore its more than 3000 wetlands and its wildlife

Sat, 05/09/2009

EFE

El interés por descubrir las similitudes entre los lagos españoles y los de Mongolia llevó en 2005 al vallisoletano Miguel Alonso a dar un giro a su vida y a su carrera profesional y, a bordo de un todoterreno de fabricación rusa, explorar los más de 3.000 humedales del país asiático.

Este doctor en Biología por la Universidad de Barcelona realizó su tesis doctoral sobre los lagos y humedales españoles y, según relata a la Agencia EFE, atraído por las similares características de los acuíferos mongoles, decidió trasladarse allí para explorarlos desafiando los extremadamente fríos inviernos y calurosos veranos de este país estepario.

A bordo de un 4x4 ruso "de los que resiste todo" y con la ayuda de una guía mongol, Alonso se embarcó en un proyecto auspiciado por la Universidad de Barcelona, ENDESA y la máxima entidad del agua de Mongolia para recorrer una media de cinco o seis lagos diarios, analizando su acidez, su transparencia, la conductividad de la electricidad en el agua, las características de su vegetación y las especies de fauna.

Para esto último, los expedicionarios lanzan al agua una red muy fina de la que extraen diferentes tipos de animales que posteriormente analizan, registran y conservan en formol.

Cuentan en todo momento con la baza de la hospitalidad mongol, de la que se sirven para avituallarse y descansar tras las jornadas de trabajo en los característicos "gers", una especie de chozas típicas de este país a las que acuden de improviso ante la aceptación de sus habitantes, según detalla Alonso.

Estas construcciones aparecen tanto en las ciudades como en el campo -enormes llanuras esteparias- y se levantan sobre una superficie de madera sobre la que se coloca una base de tela y otra de fieltro hecha generalmente con piel de camello o de oveja.

A pesar de lo precarias que parecen a simple vista estas casas, señala Alonso, la realidad es que cuentan con todo tipo de comodidades, y es normal ver cómo en medio del desierto hay un "ger" con televisión, antena parabólica y placas solares o aerogeneradores con los que se autoabastecen de electricidad.

Para obtener estos bienes, entre los mongoles existe un sistema basado en el trueque, y es normal que, "por ejemplo, un ger tenga una televisión que le ha costado a su dueño cuatro cabezas de ganado", observa.

Desde 2005 Alonso ha podido comprobar en primera persona los entresijos de la sociedad de un país que ha recorrido en busca de lagos que analizar, a lo largo de itinerarios difíciles y lentos de completar y a fecha de 2008 ya contabilizaban 350 lagos explorados.

Destaca el estado "prístino y natural" de los lagos esteparios mongoles a diferencia de los españoles, que se han deteriorado en los últimos años a causa de su ocupación de territorios que han servido para la agricultura o la construcción.