La Confederación Hidrográfica del Duero ha enviado un escrito al Ayuntamiento de Valderas para requerirle que presente la documentación necesaria para evitar la demolición del azud existente en las inmediaciones de la antigua fábrica de harinas de Varela.

Según indica la propia confederación, en una nota de prensa, la estructura, desde hace muchos años en desuso, se encuentra en muy mal estado lo que está provocando problemas de erosión en las márgenes del río, en las fincas ribereñas y a la propia dinámica del río en un puente situado aguas abajo.

Ante la frontal oposión por parte de los vecinos de la localidad, a la demolición del alud, que incluso realizaron una recogida de firmas para evitar lo que para ellos era un «atentado a la historia del pueblo», el alcalde del municipio, Eloy Rubio, se comprometió. en una reunión mantenida el pasado 6 de mayo con el presidente del organismo de cuenca, a asumir los trabajos de rehabilitación de esta infraestructura hidráulica, que la CHD tenía previsto retirar para prevenir posibles inundaciones, así como a presentar el proyecto de rehabilitación para su aprobación por parte del organismo de cuenca.

El Ayuntamiento deberá presentar en el plazo máximo de tres meses una solicitud de concesión de aguas superficiales para uso recreativo junto con el proyecto constructivo de reparación del azud y cierre de la toma existente. El proyecto debe incluir un estudio de las afecciones provocadas por el azud a los terrenos colindantes, influencia sobre la dinámica del río y su continuidad longitudinal, así como un estudio hidrológico-hidráulico en el que se pueda comprobar la influencia del azud, tanto aguas arriba como aguas abajo, comparándola con la situación natural sin la existencia de esta estructura. También deberá contemplar las medidas correctoras que se consideren necesarias para el buen funcionamiento del azud para los fines perseguidos y siempre en consonancia con la normativa vigente.

La CHD también solicita un plan de restauración de la zona degradada como consecuencia de la rotura del azud, así como un programa de explotación del azud y plan de conservación y mantenimiento del mismo.

Declaración de intenciones . El organismo de cuenca, cumpliendo el compromiso adquirido con el alcalde, envió el pasado 12 de mayo a dos de sus técnicos para asesorar al consistorio en el procedimiento a seguir para la restauración del azud.

El objeto de la polémica se encuentra en el conocido como Molino de Requejo, sobre las aguas del Cea a su paso por Valderas, en el que históricamente se realizaba la actividad industrial de la transformación del trigo en harina que, según los datos disponibles en el archivo municipal, puede tener origen en la Edad Media.

A principios del diglo pasado, sobre este molino se ubicó la fábrica de harinas Varela, respetando todos los elementos arquitectónicos, como los doce arcos de piedra de sillería, edificación en piedra y ladrillo y con concesión de la División Hidrográfi ca del Duero.