The new national center of the climatic change will be ready in two years

Mon, 01/06/2009

El Diario Montañés

El Ayuntamiento de Cartes sigue dando pasos para la consecución de uno de los grandes proyectos de legislatura, un plan que traspasará las fronteras regionales para convertirse en una referencia nacional, como repite cuantas veces sea necesario el alcalde de la localidad, Saturnino Castanedo.
Se trata de un proyecto de puesta en marcha de un centro nacional sobre el cambio climático y las energías renovables aprovechando una antigua fábrica de harinas de la localidad de Riocorvo, junto a Las Caldas de Besaya.
Pionero en España
La intención es abrir un centro pionero en España, de características bioclimáticas y de energías renovables, sin olvidar las nuevas tecnologías. Un proyecto que precisará de una inversión próxima a los cinco millones de euros, y que en principio contará con la colaboración de las consejerías de Medio Ambiente, de Industria y Desarrollo Tecnológico y de Educación del Gobierno de Cantabria. El alcalde ha explicado que para su financiación, el proyecto se encamina a su inclusión en la propuesta de desarrollo de I+D+I del Plan Eólico del Ejecutivo cántabro, «como mejor fuente de financiación de este gran proyecto», apuntó.
El horizonte para poner en servicio todo un complejo de grandes dimensiones se fecha en unos dos años. Castanedo está convencido de que en ese tiempo verá la luz un proyecto que se extiende al desarrollo de áreas de investigación, industria, educación y museísticas.
Importante apuesta
Una «apuesta» que se convierte, aseguró el alcalde, en el gran proyecto del municipio para varias legislaturas, elevando a nivel nacional las repercusiones que pueda tener en un futuro próximo. El agua, el viento o el sol serán algunos de los recursos que se estudiarán y mostrarán en el futuro centro.
Siempre desde las áreas señaladas: su investigación, su aprovechamiento industrial, educación sobre esas materias y una muestra palpable del tema del que se trate en un museo que podría tener como referencia principal, aprovechando la proximidad del río Besaya, el agua.
Historia del edificio Una antigua fábrica en la localidad de Riocorvo, perteneciente al término municipal de Cartes, ha sido la ubicación escogida para ese centro nacional sobre cambio climático y energías renovables. En este campo, lo que se pretende con el proyecto es rehabilitar esa fábrica, para, en un plazo lo más breve posible comenzar con los trabajos. En ese terreno, Castanedo avanzó que ya se han cerrado prácticamente los acuerdos con los propietarios para participar en el proyecto de referencia.
Antigua fábrica de harina, se sitúa en la vieja carretera Nacional-611 que une Las Caldas de Besaya con Riocorvo, paralela al río Besaya y muy cercano al Balneario y Santuario de Las Caldas. Un buen inicio, ya que también una fábrica de harinas fue el comienzo de otra actividad industrial, la que comenzó a desarrollarse a finales del siglo XIX, cuando José María Quijano y Fernández-Hontoria compró en Los Corrales de Buelna una fábrica de harinas y trasformó su fundición, entonces dedicada a la fabricación de clavos, en la Sociedad Altos Hornos-Forjas de Buelna.
Ingenios
Respecto a la de Riocorvo, el edificio alberga uno de los ingenios hidráulicos del municipio de Cartes, incluido en el Inventario General del Patrimonio Cultural de Cantabria, como Bienes Inventariados (año 2003, el Molino del Salto, junto al resto de molinos de la localidad). Se trata de un edificio que fue molino harinero y que ha sufrido diversas reformas. En el siglo XX la familia Yllera transformó el edificio en una moderna fábrica de harinas, para, más tarde, en 1921, convertirlo en fábrica de hilaturas.
Aunque la fábrica pasó a otros propietarios, se mantuvo su nombre y su uso hasta los años sesenta. En la actualidad una mínima parte de sus instalaciones son utilizadas para la producción de energía eléctrica.
Para finalizar, el antiguo edificio se sitúa en el tramo de Camino Real que discurría entre Santander y Reinosa, concluido en 1753 y que supuso la apertura de, entre otras, la llamada 'ruta de las harinas' que condujo al despegue comercial de la cuenca del Besaya y Campoo. Un 'tirón' histórico que se pretende marque el futuro del nuevo proyecto.
Para ello se trabaja «muy duro» desde el Ayuntamiento, cerró el alcalde.