Bolivia and Chile advance in the negotiations about the Silala ground water
Mon, 18/05/2009
El ministro de Relaciones Exteriores David Choquehuanca precisó a Prensa Latina que la cita estará encabezada por el vicecanciller Hugo Fernández. La comisión, agregó, valorará los avances en la llamada confianza mutua que establece controles de fuerzas conjuntas en la frontera, acciones de las aduanas de ambos países y otros ejercicios de este tipo. Un informe presentado por Choquehuanca al Congreso boliviano, en el mes de febrero, reveló que la agenda bilateral entre Bolivia y Chile tiene avances positivos, particularmente en el diferendo por las aguas del Silala. Uno de los puntos más adelantados es que Chile aceptó pagar una compensación económica del 50 por ciento por su utilización. Mientras Bolivia afirma que el Silala es una cuenca hidrográfica que contiene unos 100 manantiales activos y que no forman un flujo o curso que conduzca el agua a algún sitio determinado, Chile asegura que es un río de curso sucesivo. La Paz y Santiago suscribieron en julio de 2006 una agenda de negociación de 13 puntos como parte de una nueva etapa de nexos bilaterales. Esa estrategia también prioriza la integración fronteriza, el libre tránsito, la complementación económica, los debates sobre los instrumentos de lucha contra la pobreza, la seguridad y el narcotráfico, entre otros aspectos. Bolivia y Chile mantienen otro diferendo histórico, desde que la primera nación perdiera en una guerra del siglo XIX su acceso al Océano Pacífico.
El ministro de Relaciones Exteriores David Choquehuanca precisó a Prensa Latina que la cita estará encabezada por el vicecanciller Hugo Fernández.
La comisión, agregó, valorará los avances en la llamada confianza mutua que establece controles de fuerzas conjuntas en la frontera, acciones de las aduanas de ambos países y otros ejercicios de este tipo.
Un informe presentado por Choquehuanca al Congreso boliviano, en el mes de febrero, reveló que la agenda bilateral entre Bolivia y Chile tiene avances positivos, particularmente en el diferendo por las aguas del Silala.
Uno de los puntos más adelantados es que Chile aceptó pagar una compensación económica del 50 por ciento por su utilización.
Mientras Bolivia afirma que el Silala es una cuenca hidrográfica que contiene unos 100 manantiales activos y que no forman un flujo o curso que conduzca el agua a algún sitio determinado, Chile asegura que es un río de curso sucesivo.
La Paz y Santiago suscribieron en julio de 2006 una agenda de negociación de 13 puntos como parte de una nueva etapa de nexos bilaterales.
Esa estrategia también prioriza la integración fronteriza, el libre tránsito, la complementación económica, los debates sobre los instrumentos de lucha contra la pobreza, la seguridad y el narcotráfico, entre otros aspectos.
Bolivia y Chile mantienen otro diferendo histórico, desde que la primera nación perdiera en una guerra del siglo XIX su acceso al Océano Pacífico.
El ministro de Relaciones Exteriores David Choquehuanca precisó a Prensa Latina que la cita estará encabezada por el vicecanciller Hugo Fernández.
La comisión, agregó, valorará los avances en la llamada confianza mutua que establece controles de fuerzas conjuntas en la frontera, acciones de las aduanas de ambos países y otros ejercicios de este tipo.
Un informe presentado por Choquehuanca al Congreso boliviano, en el mes de febrero, reveló que la agenda bilateral entre Bolivia y Chile tiene avances positivos, particularmente en el diferendo por las aguas del Silala.
Uno de los puntos más adelantados es que Chile aceptó pagar una compensación económica del 50 por ciento por su utilización.
Mientras Bolivia afirma que el Silala es una cuenca hidrográfica que contiene unos 100 manantiales activos y que no forman un flujo o curso que conduzca el agua a algún sitio determinado, Chile asegura que es un río de curso sucesivo.
La Paz y Santiago suscribieron en julio de 2006 una agenda de negociación de 13 puntos como parte de una nueva etapa de nexos bilaterales.
Esa estrategia también prioriza la integración fronteriza, el libre tránsito, la complementación económica, los debates sobre los instrumentos de lucha contra la pobreza, la seguridad y el narcotráfico, entre otros aspectos.
Bolivia y Chile mantienen otro diferendo histórico, desde que la primera nación perdiera en una guerra del siglo XIX su acceso al Océano Pacífico.