The Guadalquivir Commission is meeting today with the forecast of more than 1000 hm3 irrigation
Wed, 06/05/2009
El Pleno de la Comisión de Desembalse del Distrito Hidrográfico del Guadalquivir se reúne hoy con el sector con el objetivo de determinar la dotación hídrica para la próxima campaña de riego, la cual, según la previsiones iniciales, podría situarse por encima de los 1.000 hectómetros cúbicos.
De este modo, la cantidad a desembalsar podría acercarse a los 1.200 hectómetros cúbicos, según anunció en marzo el director de la Agencia Andaluza del Agua, Jaime Palop, lo que garantizaría una campaña normal para el riego en una zona afectada especialmente por la sequía en los últimos años y que ha visto mermada su actividad agrícola como consecuencia de los recortes en materia de regadío.
Tal y como afirmó Palop, las lluvias registradas en el presente año hidrológico han roto una tendencia que duraba años, lo que parece apuntar un "cambio de ciclo en cuanto a precipitaciones e incluso ante el fin de la sequía". Actualmente, los pantanos se encuentran al 55 por ciento de su capacidad, lo que, inicialmente, permitiría asegurar la normalidad en la campaña de riego.
No obstante, el director de la Agencia Andaluza del Agua insistió en su día en que la cuenca del Guadalquivir abastece a una cantidad de población y un sector de regantes "importante", por lo que aunque "se puede ser optimista" es necesario aplicar el "principio de prudencia", recordando que, en la actualidad, el sistema continúa en "alerta" y es necesario guardar agua para futuras necesidades y enlazar con el próximo año hidrológico, que podría ser seco.
PETICIONES DE AGRICULTORES Y REGANTES
Ante la comisión de desembalse de hoy, la organización agraria Asaja consideró que el incremento de volumen embalsado en los últimos dos meses, más de 300 hectómetros cúbicos, "debería permitir el desarrollo de una campaña de riego normal, con dotación plena" y anunció que en la comisión de hoy Asaja insistirá en la necesidad de garantizar el cultivo del arroz al cien por cien después de cuatro años de restricciones, "que han provocado la pérdida de 128 millones de euros".
Asaja, que participará hoy en la comisión de desembalse del distrito hidrográfico del Guadalquivir, instará a realizar un "esfuerzo especial para que los agricultores puedan sembrar toda su superficie de riego, lo que permitiría romper con la dinámica negativa de los últimos cinco años, en los que la reducción de la superficie de riego a causa de la sequía ha provocado cuantiosas pérdidas económicas a los agricultores y a cuantos dependen de los cultivos de regadío".
La organización confía en que finalmente se incremente la dotación inicial de 1.000 hectómetros cúbicos hasta al menos 1.200 hectómetros cúbicos, "lo que garantizaría el agua necesaria para sacar adelante toda la superficie de todos los cultivos", tras lo que advirtieron de que, "si por un criterio excesivamente prudente la Agencia Andaluza del Agua no incrementa la dotación hasta los 1.200 hectómetros cúbicos, Asaja demandará que se mantenga el decreto de sequía, una norma que autoriza la reasignación de recursos y permite que se incremente la dotación global, y que ya se empleo con éxito el año pasado para permitir el riego del arroz.
Por su parte, el secretario general de Feragua, Pedro Parias, también apuntó a la necesidad de un desembalse mínimo de 1.200 hectómetros cúbicos, lo que supondría recuperarla "normalidad y remontar una situación muy difícil tras tres años de fortísimas restricciones".
En declaraciones a Europa Press, Parias mencionó el desarrollo de dotaciones de 6.000 metros cúbicos para grandes zonas de riego y de unos 5.000 metros cúbicos para el riego por aspersión. Además, señaló la existencia de dotación "suficiente" para el riego de la totalidad de cosecha de arroz, que lleva dos años sembrándose al 50 por ciento, y para alargar la campaña para que se rieguen los cultivos hortícolas y leñosos en octubre.
Insistió en que estos riegos se lleven a cabo de forma "inmediata" con el objetivo de atender la demanda existente en zonas con problemas de agua, "ya que estos meses ha llovido poco y de forma aislada". Así, apuntó a cultivos del Bajo Guadalquivir, como el tomate, el algodón o la remolacha.
PRUDENCIA PORQUE LA SEQUÍA "NO SE HA RESUELTO", SEGÚN COAG
El secretario de Organización de COAG-A, Eduardo López, quiso lanzar un "mensaje de prudencia" porque la sequía "no se ha resuelto, aunque el año, desde el punto de vista hidrológico sea mejor", de forma que "no podemos gestionar este recurso en este año agrícola con demasiada alegría".
De esta forma, según indicó López a Europa Press, COAG-A demandará una dotación cercana a 4.000 metros cúbicos por hectárea como caudal medio de todos los cultivos, lo que supondrá entre 1.200 y 1.300 hectómetros cúbicos.
Asimismo, pidió "flexibilidad" a la hora de gestionar este desembalse "porque hay cultivos que terminan después y otros terminan antes", por lo que, a su juicio, "hace falta aplicar la máxima flexibilidad para beneficiar al conjunto de los agricultores y sectores productivos". Sobre el cultivo del arroz, COAG defiende que se siembre el cien por cien de la superficie "pero se debe seguir invirtiendo el dinero necesario para que se garantice la mayor superficie de arroz sembrada pero con el menor consumo de agua posible".
Por su parte, tanto la Asociación de Regantes de Andalucía (Areda) como la organización agraria UPA-A pedirán hoy que se alcance "una dotación suficiente que garantice la recuperación el cien por cien de la actividad agraria en la cuenca del Guadalquivir".
De esta forma, demandarán 1.000 metros cúbicos por hectárea para el olivar de Jaén y Córdoba así como una dotación de 350 hectómetros cúbicos para el arroz, en torno a 4.000 metros cúbicos por hectárea para el resto de cultivos y el 80 por ciento de la dotación para la Cuenca del Almanzora. A juicio de esta asociación, con esta propuesta el regadío "estaría garantizado por un período de dos años".
De este modo, la cantidad a desembalsar podría acercarse a los 1.200 hectómetros cúbicos, según anunció en marzo el director de la Agencia Andaluza del Agua, Jaime Palop, lo que garantizaría una campaña normal para el riego en una zona afectada especialmente por la sequía en los últimos años y que ha visto mermada su actividad agrícola como consecuencia de los recortes en materia de regadío.
Tal y como afirmó Palop, las lluvias registradas en el presente año hidrológico han roto una tendencia que duraba años, lo que parece apuntar un "cambio de ciclo en cuanto a precipitaciones e incluso ante el fin de la sequía". Actualmente, los pantanos se encuentran al 55 por ciento de su capacidad, lo que, inicialmente, permitiría asegurar la normalidad en la campaña de riego.
No obstante, el director de la Agencia Andaluza del Agua insistió en su día en que la cuenca del Guadalquivir abastece a una cantidad de población y un sector de regantes "importante", por lo que aunque "se puede ser optimista" es necesario aplicar el "principio de prudencia", recordando que, en la actualidad, el sistema continúa en "alerta" y es necesario guardar agua para futuras necesidades y enlazar con el próximo año hidrológico, que podría ser seco.
PETICIONES DE AGRICULTORES Y REGANTES
Ante la comisión de desembalse de hoy, la organización agraria Asaja consideró que el incremento de volumen embalsado en los últimos dos meses, más de 300 hectómetros cúbicos, "debería permitir el desarrollo de una campaña de riego normal, con dotación plena" y anunció que en la comisión de hoy Asaja insistirá en la necesidad de garantizar el cultivo del arroz al cien por cien después de cuatro años de restricciones, "que han provocado la pérdida de 128 millones de euros".
Asaja, que participará hoy en la comisión de desembalse del distrito hidrográfico del Guadalquivir, instará a realizar un "esfuerzo especial para que los agricultores puedan sembrar toda su superficie de riego, lo que permitiría romper con la dinámica negativa de los últimos cinco años, en los que la reducción de la superficie de riego a causa de la sequía ha provocado cuantiosas pérdidas económicas a los agricultores y a cuantos dependen de los cultivos de regadío".
La organización confía en que finalmente se incremente la dotación inicial de 1.000 hectómetros cúbicos hasta al menos 1.200 hectómetros cúbicos, "lo que garantizaría el agua necesaria para sacar adelante toda la superficie de todos los cultivos", tras lo que advirtieron de que, "si por un criterio excesivamente prudente la Agencia Andaluza del Agua no incrementa la dotación hasta los 1.200 hectómetros cúbicos, Asaja demandará que se mantenga el decreto de sequía, una norma que autoriza la reasignación de recursos y permite que se incremente la dotación global, y que ya se empleo con éxito el año pasado para permitir el riego del arroz.
Por su parte, el secretario general de Feragua, Pedro Parias, también apuntó a la necesidad de un desembalse mínimo de 1.200 hectómetros cúbicos, lo que supondría recuperarla "normalidad y remontar una situación muy difícil tras tres años de fortísimas restricciones".
En declaraciones a Europa Press, Parias mencionó el desarrollo de dotaciones de 6.000 metros cúbicos para grandes zonas de riego y de unos 5.000 metros cúbicos para el riego por aspersión. Además, señaló la existencia de dotación "suficiente" para el riego de la totalidad de cosecha de arroz, que lleva dos años sembrándose al 50 por ciento, y para alargar la campaña para que se rieguen los cultivos hortícolas y leñosos en octubre.
Insistió en que estos riegos se lleven a cabo de forma "inmediata" con el objetivo de atender la demanda existente en zonas con problemas de agua, "ya que estos meses ha llovido poco y de forma aislada". Así, apuntó a cultivos del Bajo Guadalquivir, como el tomate, el algodón o la remolacha.
PRUDENCIA PORQUE LA SEQUÍA "NO SE HA RESUELTO", SEGÚN COAG
El secretario de Organización de COAG-A, Eduardo López, quiso lanzar un "mensaje de prudencia" porque la sequía "no se ha resuelto, aunque el año, desde el punto de vista hidrológico sea mejor", de forma que "no podemos gestionar este recurso en este año agrícola con demasiada alegría".
De esta forma, según indicó López a Europa Press, COAG-A demandará una dotación cercana a 4.000 metros cúbicos por hectárea como caudal medio de todos los cultivos, lo que supondrá entre 1.200 y 1.300 hectómetros cúbicos.
Asimismo, pidió "flexibilidad" a la hora de gestionar este desembalse "porque hay cultivos que terminan después y otros terminan antes", por lo que, a su juicio, "hace falta aplicar la máxima flexibilidad para beneficiar al conjunto de los agricultores y sectores productivos". Sobre el cultivo del arroz, COAG defiende que se siembre el cien por cien de la superficie "pero se debe seguir invirtiendo el dinero necesario para que se garantice la mayor superficie de arroz sembrada pero con el menor consumo de agua posible".
Por su parte, tanto la Asociación de Regantes de Andalucía (Areda) como la organización agraria UPA-A pedirán hoy que se alcance "una dotación suficiente que garantice la recuperación el cien por cien de la actividad agraria en la cuenca del Guadalquivir".
De esta forma, demandarán 1.000 metros cúbicos por hectárea para el olivar de Jaén y Córdoba así como una dotación de 350 hectómetros cúbicos para el arroz, en torno a 4.000 metros cúbicos por hectárea para el resto de cultivos y el 80 por ciento de la dotación para la Cuenca del Almanzora. A juicio de esta asociación, con esta propuesta el regadío "estaría garantizado por un período de dos años".