The Seprona attributes the death of fish to an alga and the CHD does not discard an acid spill
Wed, 18/02/2009
Un alga que absorbe el oxígeno del agua puede haber sido la causa de la muerte el pasado fin de semana de «varios miles» de peces en las inmediaciones del embalse de Valparaíso en Zamora, según informó el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) a Efe, aunque la Confederación Hidrográfica del Duero baraja otras dos hipótesis: un vertido de aguas ácidas procedentes de la cantera de Boya o una descenso natural del PH del agua debido a que el terreno es pizarroso.
Cientos de truchas, bogas, escallos, percasoles y alevines de varias especies aparecieron muertos el domingo pasado en las riberas del embalse de Valparaíso y fueron los propios vecinos los que alertaron al Seprona ya que hace un año ocurrió algo parecido.
La muerte de los peces fue denunciada por los vecinos de las poblaciones ribereñas del embalse de Valparaíso, quienes atribuyeron este hecho a un vertido de una cantera de pizarra situada en el municipio zamorano de Boya.
Según han explicado estas fuentes del Seprona, la pizarrera de Boya cuenta con un pozo, al cual los vecinos acusaron de ser la causa del vertido que ocasionó la muerte de los peces.
Fuentes de la CHD explicaron que han recogido muestras de agua de los arroyos de Valdalla y de Valdeboya, así como de los embalses de Cernadilla, Agavanzal y Valparaíso. En este último se han tomado muestras cada dos metros a profundidades de entre 30 y 40 metros. La CHD pedirá además a Iberdrola información sobre la calidad del agua, ya que este embalse es de su propiedad, así como un informe de mortandades anteriores de peces.
Responsables de la cantera aseguraron que tanto el Seprona como los técnicos de la Confederación Hidrográfica del Duero habían descartado que la mortandad se debiera a la actividad de la pizarrera, «que cuenta con todos los permisos legales para ejercer sus trabajos».
La mortandad de peces en el embalse ha llevado a la plataforma contra la mina de cuarzo de Micereces a pedir a la Junta «seriedad y rigurosidadante la concesión de licencias de este tipo», ante la posibilidad de que este desastre ecológico tuviera relación con la actividad de la cantera.
Cientos de truchas, bogas, escallos, percasoles y alevines de varias especies aparecieron muertos el domingo pasado en las riberas del embalse de Valparaíso y fueron los propios vecinos los que alertaron al Seprona ya que hace un año ocurrió algo parecido.
La muerte de los peces fue denunciada por los vecinos de las poblaciones ribereñas del embalse de Valparaíso, quienes atribuyeron este hecho a un vertido de una cantera de pizarra situada en el municipio zamorano de Boya.
Según han explicado estas fuentes del Seprona, la pizarrera de Boya cuenta con un pozo, al cual los vecinos acusaron de ser la causa del vertido que ocasionó la muerte de los peces.
Fuentes de la CHD explicaron que han recogido muestras de agua de los arroyos de Valdalla y de Valdeboya, así como de los embalses de Cernadilla, Agavanzal y Valparaíso. En este último se han tomado muestras cada dos metros a profundidades de entre 30 y 40 metros. La CHD pedirá además a Iberdrola información sobre la calidad del agua, ya que este embalse es de su propiedad, así como un informe de mortandades anteriores de peces.
Responsables de la cantera aseguraron que tanto el Seprona como los técnicos de la Confederación Hidrográfica del Duero habían descartado que la mortandad se debiera a la actividad de la pizarrera, «que cuenta con todos los permisos legales para ejercer sus trabajos».
La mortandad de peces en el embalse ha llevado a la plataforma contra la mina de cuarzo de Micereces a pedir a la Junta «seriedad y rigurosidadante la concesión de licencias de este tipo», ante la posibilidad de que este desastre ecológico tuviera relación con la actividad de la cantera.