La decisión de la Junta de Andalucía de trasladar a Sevilla la sede central de la Cuenca Mediterránea Andaluza, instalada en Málaga capital desde que el organismo tenía la denominación de Confederación Hidrográfica del Sur (CHS), ha puesto de acuerdo en su rechazo a los partidos mayoritarios en la provincia, PSOE, PP e IU. Todos ellos han hecho frente común ante la decisión de la Agencia Andaluza del Agua, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, que contempla la reestructuración de su organigrama, con la consiguiente desaparición de este ente, que aglutina a unos 120 trabajadores en la provincia malagueña.

La determinación adoptada por la Administración autonómica, que queda plasmada en los nuevos estatutos del organismo encargado de la gestión de aguas, ha supuesto la reacción incluso del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Málaga, que va a presentar una moción al próximo Pleno del Consistorio, a celebrar la semana que viene, relacionada con este hecho.

En concreto, la iniciativa, a la que tuvo acceso este periódico, plantea al resto de formaciones presentes en la Casona del Parque 'instar a la Junta de Andalucía a que las competencias, patrimonio y empleos que actualmente tiene la Cuenca Mediterránea en Málaga, continúen en nuestra ciudad'. El escrito, firmado por el portavoz socialista, Rafael Fuentes, y por la concejala Begoña Medina, constata la negativa de los ediles del PSOE a que la ciudad pierda 'ninguna sede administrativa', en alusión al organismo de cuenca, y subraya la necesidad de 'aspirar' a conseguir 'la localización en nuestra ciudad de nuevas instituciones, públicas o privadas, que reconozcan a Málaga como la capital económica de Andalucía'. La posición adoptada por el grupo municipal contrasta con el silencio mantenido ayer por la dirección provincial del PSOE, desde la que nadie hizo manifestación alguna.

En la misma línea expresada por los concejales socialistas en Málaga se pronunció el PP. La parlamentaria andaluza de esta formación, Ana Rico, informó de que el pasado jueves hizo una pregunta oral a la consejera de Medio Ambiente, Cinta Castillo, en relación al presunto traslado de la Cueca Mediterránea a Sevilla, y anunció que en función de la respuesta que se dé se formalizará una proposición no de ley. 'Estamos en contra de que se lleven el organismo, ya que es el único de ámbito regional que hay en Málaga', comentó Rico, quien subrayó la intención de su formación de 'hacer la guerra' con este asunto si sale adelante.

Por su parte, el también parlamentario de IU y coordinador provincial de la organización de izquierdas, José Antonio Castro, tildó de 'absurdo' y de 'sinsentido' que se contemple cerrar el ente en Málaga y abrirlo en Sevilla, 'alejado de la cuenca que tiene que gestionar'. 'No le encontramos ningún sentido a que se quiera centralizar en Sevilla', insistió, al tiempo que agregó: 'Es como si le dijésemos a Chaves que su sede la pusiera en Mérida'.

Los agricultores también han puesto el grito en el cielo ante la noticia. El secretario general de la patronal agraria Asaja, Carlos Blázquez, calificó de 'barbaridad' la intención de eliminar el organismo de la cuenca sur y aseguró que la centralización de la gestión del agua 'sólo es una medida para ahorrar costes'.

Tanto las empresas de abastecimiento de la capital, de la Costa del Sol occidental y de la Axarquía -Emasa, Acosol y Axaragua- prefirieron no valorar la decisión de la Junta hasta no conocer de primera mano los nuevos estatutos.

La gestión de las cuencas hidrográficas que están en manos de la Junta de Andalucía recaerá sobre cuatro direcciones generales. El nuevo organigrama previsto por la Agencia Andaluza del Agua contempla que desaparezcan los organismos de cuenca como existen hasta ahora y que todos los servicios se centralicen en Sevilla.

Toda la gestión de las cuencas se aglutinarán en las áreas de Servicios y Régimen Económico, Planificación y Participación, Infraestructuras y Explotación, y Dominio Público Hidráulico y Calidad de Aguas.

El borrador de los nuevos estatutos, al que ha tenido acceso este periódico, prevé que el control de estas cuatro grandes áreas lo ejerza una dirección de gerencia y que tendrá por encima la figura del presidente de la agencia que ejercerá la jefatura superior y la de representación del organismo.

La nueva reestructuración supondrá la eliminación de las direcciones generales de la Cuenca Mediterránea Andaluza -con sede en Málaga-, la Cuenca Atlántica Andaluza, la dirección general de Planificación y Gestión, y el Instituto del Agua de Andalucía.

Además, en cada provincia habrá una dirección provincial cuyo titular coincidirá con el delegado provincial de Medio Ambiente, como ya ocurría desde que hace un año la gestión de la cuenca sur se dividió entre las cuatro provincias andaluzas por las que discurre.

En cuanto al futuro de los trabajadores de la sede de Málaga, el borrador señala que pasarán a depender provisionalmente de los órganos directivos que correspondan de acuerdo con las funciones atribuidas por los nuevos estatutos.

La nueva organización prevista coincide con la transferencia de las competencias de la cuenca del río Guadalquivir del Gobierno central a la Junta de Andalucía el próximo 1 de enero.

El control de las nuevas áreas estará en manos de una gerencia y la presidencia del organismo

La delegada del Gobierno andaluz en la provincia de Málaga, María Gámez, salió ayer al paso de las informaciones relacionadas con el futuro traslado de la Cuenca Mediterránea Andaluza a Sevilla, cuando en la actualidad está asentada en Málaga, y pidió que 'no se especule' sobre ello, dado que 'no existe aún una decisión adoptada al respecto'. A este respecto, Gámez matizó que lo que en estos momentos existe es sólo un borrador de trabajo por parte de la Consejería de Medio Ambiente. No obstante, el citado documento se alude a la desaparición del organismo de cuenca y la centralización de la gestión en la capital hispalense.