A report suggests a network of collectors to avoid flooding

Fri, 14/11/2008

EFE

El informe elaborado por una ingeniería
independiente, a petición del Gobierno regional, para remediar las
inundaciones del Corredor del Henares, propone la construcción de
una balsa provisional junto a la M-45 para recoger el agua y una red
de colectores de 4,4 kilómetros que desemboquen en el Jarama.


Así lo ha adelantado hoy el vicepresidente primero de la
Comunidad, Ignacio González, en rueda de prensa tras el Consejo de
Gobierno, donde ha informado de que la Consejería de Presidencia ha
recibido ya el informe técnico que el pasado 10 de octubre encargó a
la ingeniería independiente Euroestudios, a petición de los
Ayuntamientos afectados por las inundaciones ocurridas en el
Corredor las últimas semanas.


González ha indicado que el informe constata la necesidad
prioritaria de construir una balsa provisional de recogida de aguas
pluviales y, a medio plazo, de hacer una red de colectores que
canalizaría las aguas por las zonas de Vicálvaro y Coslada, hasta el
río Jarama.


El vicepresidente primero ha explicado que el informe definitivo
se enviará a los Ayuntamientos afectados por las inundaciones,
especialmente Coslada y San Fernando de Henares, y que
posteriormente, la Comunidad "abordará" con ellos quien pagará la
construcción de los colectores.


Precisamente esta misma tarde está prevista la comparecencia en
el pleno de la Asamblea de Madrid del Consejero de Presidencia,
Francisco Granados, a petición del grupo socialista, para explicar
las inundaciones de Coslada, San Fernando y Rivas.


Según ha explicado González, el informe de Euroestudios se ha
realizado a partir de los estudios pluviométricos, geológicos e
hidrológicos llevados a cabo por esta empresa durante el último mes,
que han determinado que las obras realizadas en la zona del Corredor
han tenido "una influencia mínima" en las inundaciones de los
últimos meses.


Por contra, señala que las precipitaciones que cayeron en la zona
el pasado 22 de septiembre fueron de una "intensidad especial", que
no se daba "desde hace 36 años".


Entre las causas de las inundaciones, se indica que las viviendas
más afectadas de Coslada se construyeron en vías de drenaje natural
y puntos bajos del entorno, lo que impidió la canalización normal de
las aguas de lluvia e hizo que los problemas continuaran en días
sucesivos, a pesar de que las precipitaciones no fueron tan
abundantes.


Asimismo, se ha comprobado la existencia de galerías subterráneas
en los patios de algunas viviendas (entre ellas, una antigua tubería
de la Real Fábrica de Paños de San Fernando) que al perecer están
obstruidas o no tenían suficiente capacidad, lo que hizo que el agua
saliera al exterior a través de los pozos que habían hecho los
vecinos.


Se ha constatado también que en el barrio de Santiago de Coslada
-el más afectado por las inundaciones- no hay rejillas de desagüe
para recoger el agua de lluvia, lo que causa problemas de drenaje
superficial y, por ende, provoca inundaciones.


A la vista de estas deficiencias, la ingeniería propone como
solución provisional la construcción de la balsa de depósito de agua
que ha defendido la Comunidad de Madrid las últimas semanas, una
obra que Administración regional está dispuesta a acometer cuando el
Ayuntamiento de Coslada defina el lugar del desagüe.


Esta balsa se construiría junto a la M-45, tendría unas
dimensiones máximas de 200 por 150 metros y entre 4 y 9 metros de
profundidad, y capacidad para almacenar hasta 42.500 metros cúbicos
de agua.


Se vaciaría automáticamente mediante grupos de bombeo y dejaría
fuera de servicio la galería que provoca inundaciones en los patios
de las viviendas de Coslada.


En cuanto a la red de colectores, recogería las aguas de las
cuencas que convergen en la Avenida de Vicálvaro y el barrio de
Santiago de Coslada, llegaría hasta la entrada al núcleo urbano de
San Fernando de Henares y discurriría desde allí hasta un colector
paralelo a los del Canal de Isabel II, para terminar en la
depuradora de Casa Quemada, en el río Jarama.