The lack of flow of the Tagus at Alicante deviates crop of southern Andalusia and Catalonia
Sun, 19/10/2008
La falta de aportes suficientes de agua del trasvase Tajo-Segura ha provocado que en los últimos ocho años se hayan dejado de cultivar 20.000 hectáreas y perdido dos mil empleos directos en Alicante, una provincia que, sin embargo, ha pagado desde el comienzo de la transferencia (1979) trescientos millones de euros -50.000 millones de las antiguas pesetas- a Castilla-La Mancha, Extremadura y Madrid, las comunidades autónomas cedentes del agua del Tajo, según recordó ayer Ángel Urbina, portavoz de Riegos de Levante y recoge un estudio de Coepa sobre la repercusión de esta obra en la provincia. Fondos que, teóricamente, debieran haberse destinado a financiar proyectos medioambientales.
Gran parte de la producción perdida -hortalizas de gran valor económico- se trasladó en un principio a la zona de Lorca (Murcia) pero al encontrar los mismos problemas que en Alicante ha terminado por desplazarse a Andalucía, Castilla-León y Tarragona, provincia, ésta última, donde las empresas hortofrutícolas de la provincia pueden regar, paradójicamente, con caudales del Ebro desde donde exportan sus productos a Francia.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, volvió a recordar esta semana que Alicante y Murcia han recibido desde que se abrió el trasvase en 1979 un total de 10.000 hm3 de agua del Tajo. Un caudal, insuficiente según los agricultores, que, además, ha supuesto sólo el 60% de la cantidad a la que tenían derecho los agricultores alicantinos y murcianos según la ley que fijó las normas de explotación del trasvase (600 hm3 en una primera fase ampliables posteriormente hasta los 1.000 hm3).
Hortalizas y cítricos de excelente productividad -el sector agrícola alicantino que riega con agua del Ebro factura 330 millones de euros al año- que están infradotadas de agua al necesitar 382 hm3 al año y sólo recibir como media 125 hm3, desaparecerán a partir del año 2015 si al final se recortan o suprimen los aportes del Tajo a la provincia. Una situación que acarrearía, además, la pérdida de 50.000 empleos, según reflejan las primeras conclusiones de un informe que está realizando Coepa, la confederación empresarial de la provincia, cuyo comité ejecutivo volvió a reclamar ayer al Gobierno que impida prosperar el artículo del Estatuto de Castilla-La Mancha que fija la caducidad de la transferencia.
Por otra parte, la grave sequía que afecta a los embalses de cabecera del Tajo -Entrepeñas y Buendía-, construidos en una zona tan expuesta a las sequías como la franja Mediterránea, unida a la ley que rige la explotación del trasvase -a partir de una reserva de 557 hm3 es el Gobierno quien debe aprobar los caudales y si ésta llega a los 240 hm3 no se envía una sóla gota-, han cerrado en la práctica la puerta a desembalses para regadío en los últimos 4 años. Ayer, el complejo de embalses almacenaba 303 hm3. No obstante, el trabajo de Coepa afirma que hoy por hoy no hay alternativa al Tajo: el agua del trasvase se paga a 0,1 hm3 el metro cúbico, mientras que la desalada sale a 0,6 euros/m3, cinco veces más cara.
LOS DATOS
El Tajo-Segura comenzó a gestarse en tiempos de la República (1933), hubo un primer diseño en 1968 valorado en 16.000 millones de las antiguas pesetas y terminó construyéndose en 1979 por 40.000 millones de pesetas (240 millones de euros).
Alicante y Murcia recibirían 600 hm3 ampliables a 1.000 en una segunda fase.La media anual en 25 años no ha pasado de los 350 hm3.
Se diseñó para mejorar la dotación de agua de 180.000 hectáreas, pero acabaron creándose muchas más y utilizándose el agua para industria y abastecimiento urbano.
El agua del Tajo sigue siendo clave para el suministro de tres millones de personas.
La opción del trasvase desde Extremadura
La directora general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, Marta Morén, aseguró el jueves que no hay nada decidido sobre el trasvase de agua del embalse extremeño de Valdecañas a la cuenca del Segura. "Estamos en un momento primitivo y es temprano para hablar de una posibilidad o no de hacer el trasvase", dijo Morén, a preguntas de los periodistas, tras una reunión en Badajoz con los presidentes de las confederaciones hidrográficas. No obstante, Morén subrayó que cualquier planteamiento que se hiciera al respecto, sería con el respeto, la colaboración y coordinación de los territorios.
En este sentido, José María Macías, presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, de la que depende el embalse cacereño de Valdecañas, añadió que actualmente está en fase de elaboración el Plan Hidrológico del Tajo, por lo que "hasta que no se finalice, no se puede decir nada". Por otro lado, el inicio de la tramitación del Estatuto de Castilla-La Mancha continua dando juego a la batalla política entre populares y socialistas. El secretario general del PPCV, Ricardo Costa, aseguró no compartir el voto negativo de sus compañeros de partido en Murcia para a continuación acusar al PSOE de utilizar una doble vara de medir en cuanto a los trasvases. Por su parte, el Grupo Socialista en la Diputación de Alicante hizo público un comunicado para mostrar su apoyo "innegociable" a la viabilidad del trasvase Tajo-Segura y acusar a la secretaria genera del PP, María Dolores de Cospedal, y a Mariano Rajoy de "ser el tapón a este trasvase".
Gran parte de la producción perdida -hortalizas de gran valor económico- se trasladó en un principio a la zona de Lorca (Murcia) pero al encontrar los mismos problemas que en Alicante ha terminado por desplazarse a Andalucía, Castilla-León y Tarragona, provincia, ésta última, donde las empresas hortofrutícolas de la provincia pueden regar, paradójicamente, con caudales del Ebro desde donde exportan sus productos a Francia.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, volvió a recordar esta semana que Alicante y Murcia han recibido desde que se abrió el trasvase en 1979 un total de 10.000 hm3 de agua del Tajo. Un caudal, insuficiente según los agricultores, que, además, ha supuesto sólo el 60% de la cantidad a la que tenían derecho los agricultores alicantinos y murcianos según la ley que fijó las normas de explotación del trasvase (600 hm3 en una primera fase ampliables posteriormente hasta los 1.000 hm3).
Hortalizas y cítricos de excelente productividad -el sector agrícola alicantino que riega con agua del Ebro factura 330 millones de euros al año- que están infradotadas de agua al necesitar 382 hm3 al año y sólo recibir como media 125 hm3, desaparecerán a partir del año 2015 si al final se recortan o suprimen los aportes del Tajo a la provincia. Una situación que acarrearía, además, la pérdida de 50.000 empleos, según reflejan las primeras conclusiones de un informe que está realizando Coepa, la confederación empresarial de la provincia, cuyo comité ejecutivo volvió a reclamar ayer al Gobierno que impida prosperar el artículo del Estatuto de Castilla-La Mancha que fija la caducidad de la transferencia.
Por otra parte, la grave sequía que afecta a los embalses de cabecera del Tajo -Entrepeñas y Buendía-, construidos en una zona tan expuesta a las sequías como la franja Mediterránea, unida a la ley que rige la explotación del trasvase -a partir de una reserva de 557 hm3 es el Gobierno quien debe aprobar los caudales y si ésta llega a los 240 hm3 no se envía una sóla gota-, han cerrado en la práctica la puerta a desembalses para regadío en los últimos 4 años. Ayer, el complejo de embalses almacenaba 303 hm3. No obstante, el trabajo de Coepa afirma que hoy por hoy no hay alternativa al Tajo: el agua del trasvase se paga a 0,1 hm3 el metro cúbico, mientras que la desalada sale a 0,6 euros/m3, cinco veces más cara.
LOS DATOS
El Tajo-Segura comenzó a gestarse en tiempos de la República (1933), hubo un primer diseño en 1968 valorado en 16.000 millones de las antiguas pesetas y terminó construyéndose en 1979 por 40.000 millones de pesetas (240 millones de euros).
Alicante y Murcia recibirían 600 hm3 ampliables a 1.000 en una segunda fase.La media anual en 25 años no ha pasado de los 350 hm3.
Se diseñó para mejorar la dotación de agua de 180.000 hectáreas, pero acabaron creándose muchas más y utilizándose el agua para industria y abastecimiento urbano.
El agua del Tajo sigue siendo clave para el suministro de tres millones de personas.
La opción del trasvase desde Extremadura
La directora general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, Marta Morén, aseguró el jueves que no hay nada decidido sobre el trasvase de agua del embalse extremeño de Valdecañas a la cuenca del Segura. "Estamos en un momento primitivo y es temprano para hablar de una posibilidad o no de hacer el trasvase", dijo Morén, a preguntas de los periodistas, tras una reunión en Badajoz con los presidentes de las confederaciones hidrográficas. No obstante, Morén subrayó que cualquier planteamiento que se hiciera al respecto, sería con el respeto, la colaboración y coordinación de los territorios.
En este sentido, José María Macías, presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, de la que depende el embalse cacereño de Valdecañas, añadió que actualmente está en fase de elaboración el Plan Hidrológico del Tajo, por lo que "hasta que no se finalice, no se puede decir nada". Por otro lado, el inicio de la tramitación del Estatuto de Castilla-La Mancha continua dando juego a la batalla política entre populares y socialistas. El secretario general del PPCV, Ricardo Costa, aseguró no compartir el voto negativo de sus compañeros de partido en Murcia para a continuación acusar al PSOE de utilizar una doble vara de medir en cuanto a los trasvases. Por su parte, el Grupo Socialista en la Diputación de Alicante hizo público un comunicado para mostrar su apoyo "innegociable" a la viabilidad del trasvase Tajo-Segura y acusar a la secretaria genera del PP, María Dolores de Cospedal, y a Mariano Rajoy de "ser el tapón a este trasvase".