El conselleiro de Medio Ambiente, Manuel Vázquez, anunció que a partir de hoy "cualquier obra de infraestructura" que signifique un movimiento de tierra en la zona del río Eume "llevará un estudio geológico preceptivo" aparejado, lo que "irá corrigiendo la enfermedad crónica" de este accidente fluvial, que presenta un "alto" nivel de acidez de "forma histórica".

Durante su comparecencia en el pleno del Parlamento gallego, que se celebra en el Pazo do Hórreo, el dirigente autonómico explicó que esta medida tiene como objetivo "fundamental" el de "no ahondar en la herida" del río, cuyos problemas de acidez se "agravaron" debido a las obras de la autovía entre Ferrol y Vilalba.

Así, de forma preceptiva, los promotores de obras deberán presentar en la evaluación ambiental estratégica o en la declaración de impacto ambiental los estudios geológicos, que deberán detallar la composición geológica de los terrenos afectados por los proyectos y la posible afectación de los movimientos de tierras a la acidez de agua, tanto del Eume como de sus afluentes.

Manuel Vázquez defendió, así, que el departamento que dirige aborda "de forma integral e inédito" en España, de manera que lleva a cabo un programa de reducción de la acidez de toda la cuenca fluvial y que, en palabras del conselleiro, tiene efectos "positivos".

EXPEDIENTE INCOADO

Este plan se aborda después de que en río Eume y sus afluentes, en especial el Chamoselo, se detectase un elevado nivel de acidez en sus aguas y ya en abril se incoase un expediente a la UTE Cabreiros, que ejecuta las obras de la autovía.

Posteriormente, aparecieron ejemplares de reos muertos en la cuenca del Eume lo que activó un equipo técnico que concluyó las medidas a adoptar en el mes de agosto, cuando se inició el tratamiento de las aguas para mejorar su PH y llevarlo a los niveles medios de referencia, que se sitúa en el 6,59.

Sin embargo, el diputado del BNG Fernando Blanco Parga diagnosticó que el río Eume está "muerto", en lo cual coincidió también el portavoz en la materia del PPdeG, Jaime Castiñeiras. Así, el representante nacionalista fijó el "problema" en las obras de la autovía y, por tanto, aseguró que el "foco" de la "enfermedad" se encuentra en el afluente Chamoselo. "La infección está en el Chamoselo", aseveró.

"NO HAY VIDA ANIMAL"

En este sentido, el diputado del Bloque aludió a un informe del Ayuntamiento de As Pontes, que data de mayo de 2007, en el que se recoge la existencia de unos elevados niveles de acidez, así como apunta que "no hay vida animal". Por ello, invitó tanto al conselleiro, como a la diputada socialista Laura Seara, a leer las informaciones que incluye.

Al respecto, Manuel Vázquez y Laura Seara (PSdeG) garantizaron que no poseen ese documento y que acudieron al registro de salida del ayuntamiento, gobernado por el socialista Valentín González Formoso, pero que "no aparecía". En todo caso, la diputada del PSdeG insistió en que los datos aportados por Blanco Parga, que se remitían a ese texto, "coincidían" con los que maneja ella.

Asimismo, Seara respaldó las palabras del diputado nacionalista acerca de que las obras de la autovía, responsabilidad de Política Territorial, "provocaron el problema". "No cabe duda", afirmó, pero recordó que los movimientos de tierra también se produjeron en la construcción del Polígono Industrial de Airíos --sobre el que tiene competencias consellerías gobernadas por el Bloque--.

PPdeG

Por su parte, Jaime Castiñeiras ironizó con que "no hacen falta enterradores porque --los socios de gobierno-- se entierran unos a otros", en relación a las intervenciones de Blanco Parga y Seara, al tiempo que añadió que "faltan gestores" en este ámbito.

"No hay río gallego adonde no llegue la gestión 'fluvicida'" del conselleiro de Medio Ambiente, continuó el diputado del PPdeG para dirigirse a Vázquez con el fin de advertirle de que Galicia dejará de ser la de los mil ríos para ser "la de los 22". En este sentido, se refirió al vertido de Brenntag en el río Umia o en A Fervenza, tras lo que espetó: "es un problema para Galicia", en referencia al conselleiro.

Manuel Vázquez se protegió de las acusaciones contestando que cuando gobernaba el PP "no eran noticia los vertidos porque eran cotidianos" y le recordó que la Xunta ha invertido en planes de emergencia para restaurar el estado de estos ríos que asciende a ocho millones de euros en el caso de Brenntag y cinco en el Eume. "Gastamos porque abordamos los problemas", agregó para replicar a Castiñeiras, que denunció que el 40 por ciento del presupuesto de la consellería se dedica a acciones de este tipo.

"AGUA DE SOGAMA"

En su último turno, el diputado del PPdeG subió a la tribuna de la Cámara una muestra de "agua contaminada extraída de un vertido de Sogama", según indicó en el Hemiciclo, recogida en una botella de plástico en la que se veía un líquido oscuro, como muestra de como están "uno de los ríos", en este caso el Legüelle, "a punto de terminar la legislatura".

Manuel Vázquez aprovechó en el turno de cierre para tachar de "insolvente político" al diputado del PPdeG por llevar a la Cámara un muestra "sin ningún documento analítico que demuestre" sus afirmaciones y censuró que acudiese al Parlamento a "echar una barbaridad".

OTRAS ACCIONES

En contraposición, el dirigente autonómico incidió en que se está desarrollando un plan de trabajo en la cuenca del Eume y "resucitando los muertos que dejó" el PP al dotar de depuradoras a Baiona, Vigo o Ribeira, entre otras.

Al respecto, se refirió a las actuaciones medioambientales en el Eume, que suponen la adicción de carbonato cálcico u obras de acondicionamiento del entorno, adjudicadas a Sogarisa. Asimismo, también se ejecutan acciones tendentes a eliminar el arrastre de tierra desde los taludes y se adoptaron medidas de rediseño de zanjas y de balsas en los afluentes Lavadoiro y Chamoselo.