La Coordinadora de Afectados por los Grandes Embalses y Trasvases (COAGRET), en colaboración con su homóloga en Portugal y con el patrocinio del Ayuntamiento de la localidad lusa de Mirandela, entregó hoy el I Premio COAGRET al catedrático de Hidrogeología, Francisco Javier Martínez Gil, por ser "el padre de la nueva cultura del agua".
El acto, que se celebró en el Centro Cívico Delicias, estuvo presidido por el representante de COAGRET España, Julián Ezquerra; el representante de COAGRET Portugal, Pedro Corteiro; el representante de Fundación Nueva Cultura del Agua, Leandro del Moral; y el alcalde de Mirandela, Amándio Pires.
Pedro Corteiro explicó, que esta primera edición los tres galardones, Premio COAGRET España, Premio COAGRET Portugal y Premio COAGRET Internacional, han recaído en Francisco Javier Martínez Gil. No obstante, en las próximas ediciones habrá un galardonado por premio.
Por su parte, Julián Ezquerra subrayó que Martínez Gil es el "adalid del cambio de paradigma en la cultura del agua, basada en la defensa de los valores humanos y de la identidad de los ríos", lo que lo ha hecho merecedor del premio.
Ezquerra expuso que las tres cualidades que definen a este catedrático son "el conocimiento profundo para diagnosticar los problemas de las cuencas hidrográficas; el amor a los ríos y a sus gentes; y la obstinación a no renunciar a la nacionalidad de los ríos, como parte rasgo identitario de un lugar".
Asimismo, el responsable de COAGRET en España destacó la contribución de Martínez Gil a la nueva cultura del agua, a través de la creación de términos, acuñados por este nuevo paradigma, como son el fluviabrazo, la fluviofelicidad o identidad fluvial.
Por otra parte, COAGRET también reservó una sorpresa para el premiado, ya que el alcalde de Santaliestra, Javier Mur, le entregó una placa que decía 'En nombre de Santaliestra, Gracias Javier". Mur apuntó que, de no haber sido por la ayuda del catedrático, este pueblo del pirineo oscense "habría dejado de existir convertido en un pantano".
DISCURSO DE MARTÍNEZ GIL.
Cuando Martínez Gil recogió el premio dijo estar "confundido" por los halagos que sus compañeros le habían ofrecido. El premio consistió en un trofeo elaborado con madera, un lote de productos de Mirandela, localidad de acoge la sede de COAGRET Portugal, y un viaje de cuatro días para él y toda su familia a este municipio luso.
El catedrático afirmó no sentirse reconocido en todo lo que se dijo de él durante la entrega de premios, y aseguró que su "única aspiración es ser una buena persona".
Asimismo, el catedrático aseguró que hoy es un día importante en su vida, pero no tanto desde la perspectiva profesional, sino más desde el punto de vista humano. En este sentido aprovechó la ocasión para reivindicar un mundo más humano, que se deje llevar por las emociones.
Martínez Gil manifestó que los actuales problemas del agua, son sólo la "versión hidrográfica" de los males humanos, que según puntualizó, "provienen del mal llamado progreso, que sólo alienta el lado material del ser humano, dejando de lado lo espiritual, en aras del bienestar entendido como beneficio". "El bienestar debería asentarse en una cultura de la fraternidad y la felicidad, en armonía con la naturaleza", agregó.
Tras su breve discurso, Martínez Gil dio la palabra al agua, traspasando el agua de una botella a un vaso delante del micrófono, para que los asistentes escucharan "el murmullo del agua, que despierta el optimismo, el amor y el cariño".
TRAYECTORIA.
Francisco Javier Martínez Gil es doctor en Hidrología por La Sorbona y doctor en Ciencias Geológicas por la Universidad de Barcelona, además de contar con tres años de experiencia profesional en la Dirección General de Obras Hidráulicas. Además es, desde 1980, catedrático de Hidrogeología en la Universidad de Zaragoza.
En 1971 fue Premio Nacional de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y recibió el Premio 'Ramón Pignatelli' a los mejores trabajos periodísticos sobre el agua. Entre 1972 y 1979 fue catedrático de Hidrogeología y Geodinámica Externa en la Universidad de Salamanca.
Martínez Gil es conocido por sus estudios de la hidrología del Ebro y de las políticas del agua en España, así como de los grandes conflictos del agua. A lo largo de su trayectoria ha pronunciado más de un centenar de conferencias al respecto, y ha escrito libros como 'Los ríos de España', 'Agua y medio ambiente en Aragón' y 'La nueva cultura del agua en España'.
Asimismo, es miembro fundador de COAGRET y de la Fundación Nueva Cultura del Agua, presidente del comité local del I Congreso Ibérico sobre Gestión y Planificación del Agua de Zaragoza y copresidente del comité científico del II Congreso que tuvo lugar en Oporto.
PREMIOS TAJADERA.
La entrega de premios no se centró sólo en el profesor Francisco Javier Martínez Gil, ya que también se votó el ganador al Premio 'Tajadera', otorgado a la persona que "constituye una mayor amenaza para una sostenible gestión de los ríos, y para los amantes de éstos", aclaró Ezquerra.
Los tres candidatos a este galardón fueron el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, José Luis Alonso, el presidente de la Federación de Regantes del Ebro, César Trillo; y el consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Alfredo Boné.
Tras la votación, en la que participaron todos los asistentes al acto del Centro Cívico Delicias, el ganador resultó ser el consejero de Medio Ambiente, "por su pésima gestión y su empeño en mantener una reserva en la cuenca del Ebro, que el caudal del río no puede sostener", concluyó Ezquerra.