The sanitation saves lives with effectiveness and little money
Tue, 09/09/2008
DOS de cada cinco personas en todo el mundo (2.600 millones, de los cuales 980 millones son niños) carecen de acceso a una simple letrina y una de cada seis no dispone de acceso a agua potable segura. "Esta situación -dice el Banco Mundial- causa dos millones de muertes infantiles al año, reduce la asistencia escolar y priva al ser humano de su dignidad".
El saneamiento e higiene adecuados -baños limpios, fácil acceso a agua potable, eliminación apropiada de aguas residuales- son necesidades básicas para la salud y para muchos otros aspectos de la vida.
La Semana del Agua, celebrada en Estocolmo entre el 18 y el 24 de agosto, se centró en la crisis mundial del saneamiento. Al encuentro asistieron 2.500 expertos de 140 países y más de 200 organizaciones relacionadas con la gestión del agua. El presidente del Consejo Consultivo sobre el Agua Potable y Saneamiento, Roberto Lenton, explica que "2.000 millones de personas carecen de instalaciones sanitarias básicas. Esto tiene consecuencias extremadamente graves en la salud de la población y su impacto económico. Es una crisis silenciosa. Un tabú. El saneamiento es un tema con el que la gente se siente molesta hablando y, entonces, no se discute. Hay muchas personas que realmente no tienen conciencia de la importancia del saneamiento y la higiene".
Soluciones
La comunidad internacional conmemora en 2008 el Año Internacional del Saneamiento.
El Banco Mundial (BM) y el Programa de agua y saneamiento (PAS) -una asociación de múltiples donantes- participaron en ese encuentro para dar a conocer soluciones que han resultado un éxito para luchar contra los problemas de agua y saneamiento.
El BM es la fuente externa de financiamiento más importante de este sector, con una cartera de 13.800 millones en proyectos en ejecución en más de 100 países. Las operaciones se destinan principalmente a mejorar la gestión de los recursos hídricos y ampliar los servicios de agua ( abastecimiento y saneamiento, irrigación y drenaje, y energía hidroeléctrica).
Mucha eficacia
BM y PAS trabajan conjuntamente para fortalecer el impacto de los préstamos destinados al saneamiento.
Los problemas más graves están en los barrios de alta densidad, con riesgo de contaminación más alto.
Un ejemplo con buenos resultados es el proyecto de eliminación de aguas fecales de la ciudad de Bombay (la India) que ha conseguido que más de 250.000 habitantes de los barrios más desfavorecidos dispongan ahora de letrinas comunitarias.
En América Latina el principal problema está relacionado con la desigualdad entre zonas rurales y urbanas. Gran parte de la inversión en países de ingreso mediano está orientada al alcantarillado urbano y al tratamiento de aguas negras. En Colombia, la mejora del saneamiento urbano ha facilitado la descarga de aguas negras sin tratamiento alguno en los ríos.
Las ayudas también van dirigidas a lograr el acceso a servicios básicos. En Brasil, ha ayudado al Gobierno de Lula Da Silva en el lanzamiento de Prosanear, un proyecto experimental. Después de extender los servicios a casi un millón de habitantes pobres de las zonas urbanas, se ha convertido en un programa nacional financiado completamente con fondos locales. En las zonas rurales, los proyectos forman parte de iniciativas de más envergadura. Es el caso del Fondo social para el desarrollo en Yemen, que proporcionó servicios de abastecimiento de agua a dos millones de personas de zonas alejadas.
Manos limpias
El PAS no se queda aquí. Pretende el cambio de hábitos y conducta de los consumidores. Este aspecto se encarna en uno de sus programas estrellas: "el lavado de manos con jabón" en Perú, Senegal, Tanzania y Vietnam.
"Nuestro énfasis está en la educación pública, a fin de cambiar las actitudes dentro del seno de la familia -explica Eduardo Pérez, especialista en saneamiento del PAS-; estamos aprendiendo qué cosas sirven para crear, fomentar y mantener el hábito del lavado de manos. En Ghana se llevó a cabo una campaña que consiguió aumentar las mujeres y niños que se lavan las manos antes de comer o preparar la comida en un 34%".
El saneamiento e higiene adecuados -baños limpios, fácil acceso a agua potable, eliminación apropiada de aguas residuales- son necesidades básicas para la salud y para muchos otros aspectos de la vida.
La Semana del Agua, celebrada en Estocolmo entre el 18 y el 24 de agosto, se centró en la crisis mundial del saneamiento. Al encuentro asistieron 2.500 expertos de 140 países y más de 200 organizaciones relacionadas con la gestión del agua. El presidente del Consejo Consultivo sobre el Agua Potable y Saneamiento, Roberto Lenton, explica que "2.000 millones de personas carecen de instalaciones sanitarias básicas. Esto tiene consecuencias extremadamente graves en la salud de la población y su impacto económico. Es una crisis silenciosa. Un tabú. El saneamiento es un tema con el que la gente se siente molesta hablando y, entonces, no se discute. Hay muchas personas que realmente no tienen conciencia de la importancia del saneamiento y la higiene".
Soluciones
La comunidad internacional conmemora en 2008 el Año Internacional del Saneamiento.
El Banco Mundial (BM) y el Programa de agua y saneamiento (PAS) -una asociación de múltiples donantes- participaron en ese encuentro para dar a conocer soluciones que han resultado un éxito para luchar contra los problemas de agua y saneamiento.
El BM es la fuente externa de financiamiento más importante de este sector, con una cartera de 13.800 millones en proyectos en ejecución en más de 100 países. Las operaciones se destinan principalmente a mejorar la gestión de los recursos hídricos y ampliar los servicios de agua ( abastecimiento y saneamiento, irrigación y drenaje, y energía hidroeléctrica).
Mucha eficacia
BM y PAS trabajan conjuntamente para fortalecer el impacto de los préstamos destinados al saneamiento.
Los problemas más graves están en los barrios de alta densidad, con riesgo de contaminación más alto.
Un ejemplo con buenos resultados es el proyecto de eliminación de aguas fecales de la ciudad de Bombay (la India) que ha conseguido que más de 250.000 habitantes de los barrios más desfavorecidos dispongan ahora de letrinas comunitarias.
En América Latina el principal problema está relacionado con la desigualdad entre zonas rurales y urbanas. Gran parte de la inversión en países de ingreso mediano está orientada al alcantarillado urbano y al tratamiento de aguas negras. En Colombia, la mejora del saneamiento urbano ha facilitado la descarga de aguas negras sin tratamiento alguno en los ríos.
Las ayudas también van dirigidas a lograr el acceso a servicios básicos. En Brasil, ha ayudado al Gobierno de Lula Da Silva en el lanzamiento de Prosanear, un proyecto experimental. Después de extender los servicios a casi un millón de habitantes pobres de las zonas urbanas, se ha convertido en un programa nacional financiado completamente con fondos locales. En las zonas rurales, los proyectos forman parte de iniciativas de más envergadura. Es el caso del Fondo social para el desarrollo en Yemen, que proporcionó servicios de abastecimiento de agua a dos millones de personas de zonas alejadas.
Manos limpias
El PAS no se queda aquí. Pretende el cambio de hábitos y conducta de los consumidores. Este aspecto se encarna en uno de sus programas estrellas: "el lavado de manos con jabón" en Perú, Senegal, Tanzania y Vietnam.
"Nuestro énfasis está en la educación pública, a fin de cambiar las actitudes dentro del seno de la familia -explica Eduardo Pérez, especialista en saneamiento del PAS-; estamos aprendiendo qué cosas sirven para crear, fomentar y mantener el hábito del lavado de manos. En Ghana se llevó a cabo una campaña que consiguió aumentar las mujeres y niños que se lavan las manos antes de comer o preparar la comida en un 34%".