A machine will detect the "frequent" leakage of water in 21 villages in the Commonwealth
Thu, 24/07/2008
La Opinión. El Correo de Zamora
La Mancomunidad de Sayagua cuenta desde ayer con una máquina detectora de fugas con la que se pretenden controlar las pérdidas de agua en la red de abastecimiento y que pueden alcanzar un porcentaje del cincuenta por ciento en los 21 municipios agrupados. La herramienta permitirá así mejorar la gestión, hacer un uso "razonable" del servicio y controlar el suministro de un bien cada vez más escaso que se desperdicia a través de «frecuentes» averías. Así, con esta adquisición se espera mejorar la respuesta de la Mancomunidad ante la aparición de posibles averías que a diario propician el desperdicio de decenas de litros de agua.
El delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, formalizó ayer en Bermillo (sede de la Mancomunidad) la entrega de la máquina en presencia del presidente, Norberto Núñez, y los alcaldes y concejales que conforman la junta directiva.
La máquina cuenta con unos dispositivos (registradores) que se acoplan a los contadores de agua y van registrando los distintos caudales que tienen lugar a lo largo del día, la semana o el mes, según se programe. Esa información se envía periódicamente a un puesto de mando, donde se comprueba si los caudales han modificado su comportamiento. «Sabemos así qué zona que abastece ese tramo de red puede estar con algún tipo de problema», indica Manuel Cima, responsable de la Estación Depuradora de Sayago, que ayer explicó a los alcaldes el funcionamiento de la nueva máquina.
Después, para localizar o acotar un punto de fuga se utilizan otros dispositivos que, colocados durante la noche, registran los sonidos de la tubería. Al día siguiente, un operario patrulla la zona con una PDA y vuelca la información para saber si la zona estudiada ha tenido un sonido de paso de agua lógico o no. La referencia serán unos niveles pregrabados que determinan si hay o no fuga. «La zona se va acotando cada vez más y una vez que está más o menos centrada se utiliza un geófono que te aproxima más al punto de fuga». El sistema funciona así con sonido, que va variando, aumentando o bajando dependiendo del lugar y la magnitud de la avería.
Estos dispositivos son especialmente eficaces para zonas urbanas. Antes de la llegada de la máquina, los técnicos de la Mancomunidad han efectuado ensayos que han permitido ver la «relativa frecuencia» de las pérdidas de agua que, como es lógico, repercuten en el coste del servicio y aumentan la factura del usuario. Un problema al que se suman las acometidas ilegales, que también se está intentando atajar mediante un seguimiento diario de la red.
La Junta de Castilla y León ha concedido una ayuda de 39.802 euros para la máquina detectora de fugas, que dará servicio a los 21 municipios que forman parte de la Mancomunidad de Sayagua, con una población que supera los 9.300 habitantes.
Alberto Castro recordó el «compromiso» de la Junta con la Mancomunidad, que se ha concretado en ayudas de valor de 200.000 euros a lo largo de los últimos años , y la colaboración en las obras de la estación de tratamiento y la sustitución de la tubería en el tramo de Carbellino a los depósitos, con una inversión de cinco millones de euros. Por su parte, Norberto Núñez, recién incorporado a la presidencia de la Mancomunidad tras una baja por enfermedad, dio la bienvenida a esta nueva infraestructura, que «contribuirá a dar soluciones a los frecuentes problemas que se dan».
El delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, formalizó ayer en Bermillo (sede de la Mancomunidad) la entrega de la máquina en presencia del presidente, Norberto Núñez, y los alcaldes y concejales que conforman la junta directiva.
La máquina cuenta con unos dispositivos (registradores) que se acoplan a los contadores de agua y van registrando los distintos caudales que tienen lugar a lo largo del día, la semana o el mes, según se programe. Esa información se envía periódicamente a un puesto de mando, donde se comprueba si los caudales han modificado su comportamiento. «Sabemos así qué zona que abastece ese tramo de red puede estar con algún tipo de problema», indica Manuel Cima, responsable de la Estación Depuradora de Sayago, que ayer explicó a los alcaldes el funcionamiento de la nueva máquina.
Después, para localizar o acotar un punto de fuga se utilizan otros dispositivos que, colocados durante la noche, registran los sonidos de la tubería. Al día siguiente, un operario patrulla la zona con una PDA y vuelca la información para saber si la zona estudiada ha tenido un sonido de paso de agua lógico o no. La referencia serán unos niveles pregrabados que determinan si hay o no fuga. «La zona se va acotando cada vez más y una vez que está más o menos centrada se utiliza un geófono que te aproxima más al punto de fuga». El sistema funciona así con sonido, que va variando, aumentando o bajando dependiendo del lugar y la magnitud de la avería.
Estos dispositivos son especialmente eficaces para zonas urbanas. Antes de la llegada de la máquina, los técnicos de la Mancomunidad han efectuado ensayos que han permitido ver la «relativa frecuencia» de las pérdidas de agua que, como es lógico, repercuten en el coste del servicio y aumentan la factura del usuario. Un problema al que se suman las acometidas ilegales, que también se está intentando atajar mediante un seguimiento diario de la red.
La Junta de Castilla y León ha concedido una ayuda de 39.802 euros para la máquina detectora de fugas, que dará servicio a los 21 municipios que forman parte de la Mancomunidad de Sayagua, con una población que supera los 9.300 habitantes.
Alberto Castro recordó el «compromiso» de la Junta con la Mancomunidad, que se ha concretado en ayudas de valor de 200.000 euros a lo largo de los últimos años , y la colaboración en las obras de la estación de tratamiento y la sustitución de la tubería en el tramo de Carbellino a los depósitos, con una inversión de cinco millones de euros. Por su parte, Norberto Núñez, recién incorporado a la presidencia de la Mancomunidad tras una baja por enfermedad, dio la bienvenida a esta nueva infraestructura, que «contribuirá a dar soluciones a los frecuentes problemas que se dan».