Como muchos días, distintos pescadores se acercaron ayer al pantano Burdallo, perteneciente a la sociedad de pescadores Alta Extremadura de la ciudad. En esta ocasión, no acudieron para practicar su deporte favorito, sino para observar un paisaje desolador. Cientos de peces aparecieron ayer muertos en el agua. La mayoría se podían ver en distintos puntos cercanos a la orilla de este pantano. Había ejemplares de todos los tamaños, grandes, pequeños y medianos. A media mañana, el mal olor se adueñó de la zona debido a las altas temperaturas propias de la época y a estos peces muertos. Según explicó un vaquero que andaba por la zona, este hecho «ha tenido que suceder esta noche porque ayer estuve por aquí y no había ningún pez muerto». Los motivos de este suceso todavía no se saben. Sin embargo, el presidente de la sociedad trujillana, Joaquín Avís, lo tiene claro. Considera que la mortandad de los peces ha sido provocada por un vertido tóxico. Avís explica que, antes de llevar a cabo cualquier actuación, se observará si fallecen más ejemplares en los próximos días. Si este hecho sucede, «la sociedad tomará todo tipo de medidas para poner en orden el agua». Además, derivará el problema a instancias superiores, como a la Consejería de Medio Ambiente. Otra de las medidas que acometerá la sociedad es la retirada de las unidades muertas, que tendrán que ser enterradas. Además, sugiere la posibilidad de analizar el agua del pantano para saber «de dónde viene el problema». El presidente de los pescadores apunta que es la primera vez que sucede un hecho de este tipo en Burdallo. A pesar de este suceso, la sociedad Alta Extremadura no va a parar su actividad durante el verano en la charca, ya que no hay intención de tomar ninguna medida restrictiva, por ahora. Por tanto, los socios podrán seguir pescando en la zona. Además, se continuará con las actividades programadas para las próximas semanas. El presidente tampoco tiene la intención de echar más ejemplares, ya que «Burdallo tiene mucha pesca». Otra hipótesis El técnico municipal de Medio Ambiente, Francisco Hueso, considera que las altas temperaturas de estos días han podido provocado la muerte de esos cientos de peces. Explica que este pantano cuenta con mucha materia orgánica que se alimenta de oxígeno. Con el calor, ha descendido ese oxígeno disponible en el agua, provocando la muerte de los ejemplares. Para Hueso, la posibilidad de que haya sido un vertido tóxico el causante «es un hecho muy grave». Hueso detalla que el agua que vierte en este pantano procede de Arrollo Caballo, previo paso de una depuradora. «La analítica que hacemos indica que estamos en los márgenes legales», destaca. Otra posibilidad que no descarta es que se haya podido limpiar «una cuba de fertilizantes» en el río. Joaquín Avís cree que es «complicado» que el suceso haya sido por el calor y la falta de oxígeno.