El nuevo presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), Eduardo Alvarado, afirmó ayer que la refinería que el Grupo Gallardo promueve en Extremadura «no va a provocar ningún estrés hídrico» en la cuenca del Guadiana, la cual, a su juicio, «goza de muy buena salud y va a seguir así». Con motivo de la inauguración de las obras de acondicionamiento de cauce y actuaciones medioambientales y sociales en Usagres (Badajoz), Alvarado respondió de este modo a las declaraciones realizadas el pasado lunes por el coordinador nacional de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, en las que criticaba los prejuicios que en su opinión provocaría la refinería extremeña en la cuenca del Guadiana. «Altamente productiva» Según el presidente de la CHG, cuyo nombramiento ha sido publicado en el BOE aunque aún no ha tomado posesión del mismo, esta cuenca «va a ser altamente productiva desde el punto de vista agrícola y también desde el punto de vista de otras actividades como pueden ser las turísticas o las industriales». Eduardo Alvarado, que avanzó que tomará posesión de su cargo a lo largo de esta semana o primeros de la próxima, se mostró además «seguro» de que esa nueva industria «se hará con todos los requisitos ambientales», algo que, según añadió, «seguro tendrán en cuenta tanto la propia empresa, el Ministerio así como la Comunidad Autónoma». De esta manera, se mostró convencido de que esta cuenca «soporta este tipo de instalaciones», y añadió que no cree que la citada cuenca vaya a sufrir «en absoluto» con esta nueva industria que, tal y como recalcó, «será absolutamente respetuosa con las prescripciones ambientales y permitirá además una alta generación de empleo».