Tarragona sent 37,348 cubic meters of water from their wells to Barcelona
Tue, 10/06/2008
La ciudad de Tarragona envió por medio de barcos el pasado mes de mayo 37.348 metros cúbicos de agua procedente de sus pozos al área metropolitana de Barcelona durante la emergencia de sequía, ha informado hoy en rueda de prensa el alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros (PSC).
Estos recursos hídricos sirvieron para llenar, únicamente, los depósitos de los dos barcos que zarparon los días 12 y 14 de mayo del puerto de Tarragona con destino al de Barcelona.
El suministro del agua para cargar la otra veintena de buques que partieron desde Tarragona la realizó directamente el Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT), a través de la red de la Empresa Municipal de Aguas de Tarragona (Ematsa), con agua procedente del minitrasvase del Ebro, ha explicado Ballesteros.
En cuanto a los recursos propios de Ematsa, se extrajeron 14.240 metros cúbicos (m³) del pozo Renau, 27.754 m³ de la mina protectora P-II y otros 2.354 m³ del pozo Soler Bas.
Los análisis y controles realizados a lo largo de estos días en estos puntos de captación de agua por parte de operarios de Ematsa y dos técnicos independientes han puesto de manifiesto: "que ni desde el punto de vista piezométrico -nivel del agua-, ni de la conductividad, ni del nivel de cloruros hemos estado nunca ni remotamente cerca del peligro de salinización de los pozos", ha subrayado el alcalde.
En este sentido, ha señalado que, por ejemplo, la concentración de cloruros se ha situado en una media de entre 70-80 miligramos/litro, cuando el riesgo de salinización se sitúa en los 250 mg/litro.
El alcalde tarraconense ha subrayado que el nivel de agua de los pozos es "similar" al del año pasado por estas fechas y ha informado de que las obras realizadas por Ematsa como consecuencia de las actuaciones para contrarrestar los efectos de la sequía, sufragadas por la Agencia Catalana del Agua (ACA), han ascendido a 2,7 millones de euros.
Esta inversión contempla la puesta en marcha de nuevos pozos, la revisión de otros ya existentes y la construcción de la tubería que conduce el agua hasta el puerto de Tarragona.
Durante la rueda de prensa, Ballesteros ha criticado duramente la oposición llevada a cabo, en especial, por el grupo municipal de CiU, que ha tachada de "frívola" e "irresponsable", y ha afirmado que volvería a actuar de mismo modo atendiendo a "un principio de solidaridad con toda Cataluña".
También ha asegurado que no se arrepiente de haber "cortado el grifo" y ordenado la suspensión del envío de agua de los pozos a Barcelona tras el anuncio de la Generalitat de volver a permitir el llenado de piscinas y el riego jardines, algo que ha calificado de "barbaridad".
Ha recordado, sin embargo, que el gobierno catalán reaccionó "de inmediato" tras este anuncio y modificó el decreto de sequía para mantener las restricciones.
Por otra parte, Ballesteros se ha mostrado "a favor" de construir una tubería que enlace la desalinizadora de Cunit con el sistema del CAT y, a su vez, con el del Ter-Llobregat.
Estos recursos hídricos sirvieron para llenar, únicamente, los depósitos de los dos barcos que zarparon los días 12 y 14 de mayo del puerto de Tarragona con destino al de Barcelona.
El suministro del agua para cargar la otra veintena de buques que partieron desde Tarragona la realizó directamente el Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT), a través de la red de la Empresa Municipal de Aguas de Tarragona (Ematsa), con agua procedente del minitrasvase del Ebro, ha explicado Ballesteros.
En cuanto a los recursos propios de Ematsa, se extrajeron 14.240 metros cúbicos (m³) del pozo Renau, 27.754 m³ de la mina protectora P-II y otros 2.354 m³ del pozo Soler Bas.
Los análisis y controles realizados a lo largo de estos días en estos puntos de captación de agua por parte de operarios de Ematsa y dos técnicos independientes han puesto de manifiesto: "que ni desde el punto de vista piezométrico -nivel del agua-, ni de la conductividad, ni del nivel de cloruros hemos estado nunca ni remotamente cerca del peligro de salinización de los pozos", ha subrayado el alcalde.
En este sentido, ha señalado que, por ejemplo, la concentración de cloruros se ha situado en una media de entre 70-80 miligramos/litro, cuando el riesgo de salinización se sitúa en los 250 mg/litro.
El alcalde tarraconense ha subrayado que el nivel de agua de los pozos es "similar" al del año pasado por estas fechas y ha informado de que las obras realizadas por Ematsa como consecuencia de las actuaciones para contrarrestar los efectos de la sequía, sufragadas por la Agencia Catalana del Agua (ACA), han ascendido a 2,7 millones de euros.
Esta inversión contempla la puesta en marcha de nuevos pozos, la revisión de otros ya existentes y la construcción de la tubería que conduce el agua hasta el puerto de Tarragona.
Durante la rueda de prensa, Ballesteros ha criticado duramente la oposición llevada a cabo, en especial, por el grupo municipal de CiU, que ha tachada de "frívola" e "irresponsable", y ha afirmado que volvería a actuar de mismo modo atendiendo a "un principio de solidaridad con toda Cataluña".
También ha asegurado que no se arrepiente de haber "cortado el grifo" y ordenado la suspensión del envío de agua de los pozos a Barcelona tras el anuncio de la Generalitat de volver a permitir el llenado de piscinas y el riego jardines, algo que ha calificado de "barbaridad".
Ha recordado, sin embargo, que el gobierno catalán reaccionó "de inmediato" tras este anuncio y modificó el decreto de sequía para mantener las restricciones.
Por otra parte, Ballesteros se ha mostrado "a favor" de construir una tubería que enlace la desalinizadora de Cunit con el sistema del CAT y, a su vez, con el del Ter-Llobregat.