La compañía Cobre las Cruces (CLC), promotora de la mina a cielo abierto excavada en suelos de Gerena, Salteras y Guillena, ha concluido el cierre de 20 pozos del acuífero Niebla-Posadas en el entorno de la corta que acometió sin tener permiso y que han contaminado, aunque «levemente» el agua, mientras que continúa trabajando en sus instalaciones «con normalidad».
Fuentes de la filial de la multinacional canadiense Inmet Mining explicaron ayer a Europa Press que el trabajo diario no se ha visto afectado por el cierre de dichos sondeos ilegales, aunque «se trabaja con toda la normalidad que se puede tener en estas circunstancias», tras la detección por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) de la práctica de sondeos no autorizados en el fondo de la excavación, tal y como días antes habían denunciado grupos ecologistas
En este sentido, las fuentes de la compañía recordaron que los responsables y técnicos del proyecto «tienen toda su atención centrada en resolver este asunto», que calificaron como «prioritario».Así, indicaron que el miércoles pasado, cuando la CHG decretó la paralización sobre los sondeos de agua, Cobre Las Cruces comenzó a trabajar «de inmediato» en su clausura.
Además, mostraron su «buena disposición» para resolver cuanto antes esta situación. Con este objetivo, un grupo de técnicos de la compañía se encuentra trabajando en una batería de medidas que presentarán el próximo martes a la Confederación, con el fin de gestionar eficazmente los recursos hídricos y satisfacer las peticiones del organismo encargado de vigilar la cuenca.
La Junta se inhibe
Su presidente, Francisco Tapia, y el comisario de Aguas, Javier Serrano, anunciaron el pasado miércoles la paralización decretada sobre los sondeos no autorizados que Mina Las Cruces había acometido en el fondo de la excavación.
Después de que las excavaciones alcanzaran recientemente una cota de 140 metros por debajo del nivel del firme, la Confederación detectó una serie de perforaciones a la búsqueda de aguas que requerirían el visto bueno de este organismo, que además ha incoado un procedimiento sancionador por infracción muy grave, si bien tales prácticas no habrían derivado en consecuencias relevantes para el medio ambiente, según precisó
En cuanto a la autorización concedida por la CHG para detraer y bombear agua al acuífero Niebla-Posadas, ambos responsables de la cuenca del Guadalquivir han anunciado la revisión integral de tal concesión, ya que el sistema que se emplea implica una pérdida de recursos hídricos que no estaba prevista.
Por su parte, la consejera de Medio Ambiente, Cinta Castillo, valoró ayer mismo la «extraordinaria agilidad» con la que ha actuado la Confederación al paralizar los sondeos ilegales, a la vez que descartaba cualquier responsabilidad de la Junta en este asunto, al afirmar que el departamento que dirige «no tiene ninguna competencia» sobre esta mina.