El Pleno de la Cámara de Comercio de Murcia acordó en la sesión que celebró ayer expresar la "necesidad" de que la política hidráulica del Gobierno central "se rija por los principios de igualdad y solidaridad, y no de oportunismo político", para así proporcionar al Levante español "una solución a su escasez hídrica, con los mismos criterios adoptados en el caso catalán".


En opinión de los empresarios, la aprobación de un trasvase del Ebro a Barcelona "está plenamente justificada considerando el peligro de desabastecimiento que sufre la ciudad, al que se debe hacer frente con los medios técnicos y humanos más adecuados", según informaron fuentes de la Cámara de Comercio en un comunicado.


Al respecto, reprochó que las distintas denominaciones que recibió la actuación, como minitrasvase, conducción de agua, y cesión de derechos de los regantes "no pueden ocultar el hecho incuestionable de que el Gobierno central ha debido ejecutar, de forma urgente y mediante Decreto-Ley, una medida que rechazó en la anterior legislatura y que estaba contemplada en el Plan Hidrológico Nacional (PHN) que derogó en 2004".


Por este motivo, los empresarios dijeron que las declaraciones de la nueva ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, "causan perplejidad y extrema preocupación sobre la intención del Ejecutivo de mantener la política de agua de los últimos cuatro años, incluida la derogación del trasvase del Ebro".


En este sentido, la Cámara expresó su voluntad de "sumarse a cuantas medidas se adopten para reclamar un trato justo e igualitario en materia de agua", y dijo que "cuando un gobierno deroga una parte del PHN en el que se ven afectadas las comunidades autónomas de Valencia y Murcia y la provincia de Almería, hay que poner en marcha con carácter de urgencia actuaciones que solucionen sus déficit estructurales".