Los ganaderos de la provincia de Sevilla deben añadir ahora otra preocupación más a las que ya llevan sufriendo varios meses. A la lengua azul y los precios de los cereales se suma ahora la sequía de los dos primeros meses del año agrario —que comenzó el 1 de septiembre— y que está afectando a las zonas de la sierra donde se necesita pasto para alimentar el ganado. Asaja indicó ayer en un comunicado que la escasez de lluvias durante los últimos dos meses «ha despertado una nueva preocupación en agricultores y ganaderos, que temen enfrentarse a una situación de sequía similar a la vivida hace dos años». El déficit de lluvias, según la organización agraria, es de un 30% en Sevilla, lo que sitúa las reservas de la cuenca del Guadalquivir en el 33,3%, por debajo de los niveles de noviembre de 2005, cuando la cuenca estaba al 37,2% de su capacidad. Prórroga No obstante, la situación parece minimizada gracias a la petición de Asaja al Ministerio de Agricultura, que ha decidido prorrogar hasta el próximo lunes el periodo de contratación de seguro de sequía en pastos, con el que los ganaderos podrán sufragar los gastos extra en alimentación que sufren debido a la ausencia de pastos. Estas ayudas ya se concedieron en 2005, cuando se pagaron en Andalucía 102 millones de euros en concepto de indemnizaciones de los seguros agrarios que beneficiaron a casi 11.000 ganaderos y agricultores. El caso de los agricultores En Asaja aseguran que esta sequía inicial está afectando principalmente a los ganaderos, ya que a los agricultores «hasta les beneficia en cierto modo», pues «estamos en plena época de siembra y en ese momento las lluvias pueden dificultar la labor en las vegas y las marismas». No obstante, si la escasez de agua se prolonga empezaría a afectar también a los agricultores y «se repetería un ciclo muy negativo como el de hace dos años», indican en Asaja. Además se llegaría a poner en peligro la próxima campaña de riego. Pese a todo, en la organización no quieren ser alarmistas y esperan que en los próximos meses cambie la tendencia negativa de las precipitaciones, hasta ahora inexistentes en Sevilla. Por otra parte, mediante el seguro integral de cereales, cuyo periodo está abierto hasta el 17 de diciembre, se pueden cubrir la merma del rendimiento de las producciones por climatología adversa. ARCHIVO Sin agua, los pastos para el ganado escasean