Spaniard Busisnessmen of the Water thinks Chinese market is difficult
Wed, 17/10/2007
Los empresarios españoles de tecnologías del agua consideraron hoy que la competencia de países como Italia o EEUU hace muy difícil su entrada al mercado chino, salvo en el caso de la desalinización, en la que España tiene pocos rivales.
"Pienso que la desalación (es la tecnología más exportable de España) debido a que en otros países de Europa no se ha desarrollado porque no la necesitan. Pero en depuración o abastecimiento de aguas tenemos la misma tecnología", dijo hoy a Efe José María Villaroel, director de proyectos de la consultora de ingenieros Euroestudios.
Villaroel forma parte de la comitiva de cuarenta empresarios hídricos españoles que acompañan a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, en su primer viaje a China.
La delegación participó ayer en el primer Foro Chino-Español del Agua y hoy asistió a la inauguración del Tercer Foro Internacional del Río Amarillo, que se celebra en la ciudad oriental de Dongying, cerca del delta que forma la corriente antes de desembocar al mar.
Entrar en el tentador mercado del país asiático, explicaron, requiere una apoyo firme de la administración española.
"Es muy difícil, pero a lo mejor si se hace patrocinados por el Gobierno español podemos entrar. Solos es imposible. Hablo de ayudas para hacer proyectos concretos aquí que estén pagados por el Gobierno español, y en base a eso seguir. No sería una ayuda a fondo perdido", señaló Villaroel.
En este sentido, Mauricio Gómez, director en Canarias de Idom, consultora centrada en ingeniería y medio ambiente, defendió la creación de unos fondos específicos para China por parte del Ministerio de Medio Ambiente.
La piratería fue otro de los obstáculos mencionados por los empresarios en el acceso al mercado chino.
"El problema de aportar tecnología aquí es que te la copian, te la hacen tres veces más barata y te hacen la competencia a continuación", subrayó Alfonso Andrés, presidente de la firma hidrológica Inclam, en una opinión compartida por muchos empresarios asistentes al foro.
En los encuentros de la comitiva empresarial española con empresarios chinos, la gestión hídrica integrada española fue uno de los temas que más interés despertó.
"Sí están interesados en el tema de cómo se gestiona el agua en España. Lo difícil es que aquí la gestionen igual porque tienen problemas espectaculares, con más de 360 millones de personas sin agua potable", afirmó Andrés.
Explicó que muchas firmas occidentales están trabajando con los chinos pero en otros países.
"Una de las potencias de China es que tiene mucho dinero, porque no se lo gasta en arreglar los problemas internos, y lo maneja fuera. Por ejemplo en África o Latinoamérica están pegando muy fuerte porque financian, y tienen unos tipos de interés muy bajos", afirmó.
Además, en esos países en desarrollo "venden productos con la calidad que necesitan. El país que no tiene tuberías, por ejemplo, prefiere 300 kilómetros de tubería mala que 100 de tubería buena".
Y lo que más necesitan, a su juicio, es capacidad de gestión: "La gente que sabe gestionar en China gana más dinero que los que saben gestionar en España. Ahí sí que podemos aportar mucho".
"Pienso que la desalación (es la tecnología más exportable de España) debido a que en otros países de Europa no se ha desarrollado porque no la necesitan. Pero en depuración o abastecimiento de aguas tenemos la misma tecnología", dijo hoy a Efe José María Villaroel, director de proyectos de la consultora de ingenieros Euroestudios.
Villaroel forma parte de la comitiva de cuarenta empresarios hídricos españoles que acompañan a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, en su primer viaje a China.
La delegación participó ayer en el primer Foro Chino-Español del Agua y hoy asistió a la inauguración del Tercer Foro Internacional del Río Amarillo, que se celebra en la ciudad oriental de Dongying, cerca del delta que forma la corriente antes de desembocar al mar.
Entrar en el tentador mercado del país asiático, explicaron, requiere una apoyo firme de la administración española.
"Es muy difícil, pero a lo mejor si se hace patrocinados por el Gobierno español podemos entrar. Solos es imposible. Hablo de ayudas para hacer proyectos concretos aquí que estén pagados por el Gobierno español, y en base a eso seguir. No sería una ayuda a fondo perdido", señaló Villaroel.
En este sentido, Mauricio Gómez, director en Canarias de Idom, consultora centrada en ingeniería y medio ambiente, defendió la creación de unos fondos específicos para China por parte del Ministerio de Medio Ambiente.
La piratería fue otro de los obstáculos mencionados por los empresarios en el acceso al mercado chino.
"El problema de aportar tecnología aquí es que te la copian, te la hacen tres veces más barata y te hacen la competencia a continuación", subrayó Alfonso Andrés, presidente de la firma hidrológica Inclam, en una opinión compartida por muchos empresarios asistentes al foro.
En los encuentros de la comitiva empresarial española con empresarios chinos, la gestión hídrica integrada española fue uno de los temas que más interés despertó.
"Sí están interesados en el tema de cómo se gestiona el agua en España. Lo difícil es que aquí la gestionen igual porque tienen problemas espectaculares, con más de 360 millones de personas sin agua potable", afirmó Andrés.
Explicó que muchas firmas occidentales están trabajando con los chinos pero en otros países.
"Una de las potencias de China es que tiene mucho dinero, porque no se lo gasta en arreglar los problemas internos, y lo maneja fuera. Por ejemplo en África o Latinoamérica están pegando muy fuerte porque financian, y tienen unos tipos de interés muy bajos", afirmó.
Además, en esos países en desarrollo "venden productos con la calidad que necesitan. El país que no tiene tuberías, por ejemplo, prefiere 300 kilómetros de tubería mala que 100 de tubería buena".
Y lo que más necesitan, a su juicio, es capacidad de gestión: "La gente que sabe gestionar en China gana más dinero que los que saben gestionar en España. Ahí sí que podemos aportar mucho".